10: No es el norte

Pude ver la decepción en los ojos de Farís, sonreí porque sabía bien que ella no haría tal cosa. Devika era la única persona con la que me llevaba bien de esa familia, era una buena chica.

—Entonces ya sabes la condición, Farís —abrí la puerta de mi apartamento —adiós, ni se te ocurra hacer un escándalo porque voy a llamar a la policía. Te recuerdo que tienes una orden de restricción y no te puedes acercar a mí.

La puerta se cerró y él insistió un poco más, pero después se lo llevó su adorado hijo-sobrino. Así que el viejo se encuentra casi en la quiebra y queriendo concretar un matrimonio con la Princesa del Zoco, vaya que es interesante.

Esa chica me encantaba fastidiarla, verla enojada era bastante tierno e incluso cuando maldecía. Al recordar el sostén que usaba y todos esos tirantes en forma de cruz sobre su pecho… Demonios… Tenía que reconocer que la deseaba y vaya que mucho.

—Maldición — sentí un dolor punzante en mi entrepierna — ¿Es en serio? Pareces un conejo hormonal, no pu
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP