Un gemido lleno de excitación escapó de sus labios en el momento en que la lengua del alfa se puso sobre la tela de la ropa interior dándole un placer que jamás imaginó en su vida que alguna vez se pudiese imaginar.
Su cuerpo comenzó a retorcerse del placer en el mismo instante en que su parte íntima comenzó a reaccionar ante los breves toques de la lengua del alfa contra esta. Con una de sus manos, tocó el cabello del alfa invitándolo a seguir con lo que estaba haciendo. No obstante, esto no pareció molestarle al alfa en que hiciera todo eso.
Con una sonrisa de lado, tomó posesión de los labios de la omega con mucha precisión en el acto, su lengua se movía con tanta destreza que le era imposible a Rachel de seguirle el beso, el calor irradiaba d
La sonrisa en su rostro no se fue en ningún momento, todo lo contrario se mantuvo intacta durante todo el congreso y con los presidentes de otros países. Todos sabían quién era Ian Jones, un tirano que vivía de los ingresos de su país y que llevaba más años gobernando que cualquier otro presidente.Ian tenía a todos a sus pies, cada quien sabía a que se atenían cuando se dirigían a él. Aunque muchos lo envidiaban de sobre manera a causa de que él tenía todo lo que un hombre pudiese desear en la vida con solo chasquear los dedos.Pero la sonrisa de ese presidente no era precisamente por eso, todo lo contrario. Recordaba en cada ocasión que podía la manera en la híbrida que tenía en casa había gritado su nombre la noche anter
Su espalda chocó con la pared detrás de ella cuando una de las embestidas marcó el ritmo una vez más, no supo cómo fueron a parar una vez más en la lujuria y la pasión en ese día.Pasó más de dos semanas desde que volvieron de ese congreso y el presidente del país pasaba más tiempo con ella que con su esposa…aunque Rachel no podía dejar de imaginarse las veces en las cuales la pobre mujer se quedó sola en casa con un lazo que él por muy malo que fuera, le fascinaba la forma en la que el alfa la trataba en cada uno de sus encuentros.Sus uñas fueron a parar a la espalda del alfa cuando su vientre comenzó con las contracciones de que se iba a correr en ese instante.El alfa al darse cuenta de e
Rachel estaba en el baño con todo dándole vueltas y más vuelta. Ese día se levantó con el estómago en la boca y no había una respuesta coherente para eso. Sus amigas estaban realmente preocupadas por su salud y sabían cómo reaccionaría la omega si le dijeran sus sospechas.Otra arcada salió de sus labios y el mismo contenido. En verdad le estaba asustando esos cambios en su metabolismo, no podía decir con exactitud lo que tenía, pero la tensión en el cuarto de baño era notoria para su situación.Sus amigas le ayudaron a ponerse de pie y la llevaron a la habitación, se sentó en la cama con las piernas hechas gelatinas, se llevó ambas manos a los labios para evitar que los sollozos que querían salir de estos.
Cualquier persona que estuviese mirando al hombre del otro lado del escritorio diría que estaba viendo al mismísimo presidente del país. La mirada era idéntica a la del presidente y eso era algo que sabía cómo usarlo a su favor en dado caso de que fuese necesario en su momento.Las personas que estaban en su despacho, fueron saliendo poco a poco dejando a las tres mujeres solas con él. Si Ian era de temer su hermano también lo era.— Sólo te di una maldita orden y no la sabes cumplir como se debe — dijo, con voz neutra —. Tenías que ofrecerle un buen sexo al idiota de Zaid y punto —ladeó el rostro —, ¿Es que acaso ya ni para eso sirves?— No es nada de eso, señor. Es solo que Zaid tien
La semana en la que Ian se pasó de fiesta en fiesta celebrando su triunfo fue la mejor de todas. No obstante, sentía que algo le faltaba y que ese algo tenía unos hermosos ojos azules como el cielo con unas pequeñas nubes a su alrededor y eso le hacía sentirse frustrado de sobremanera cada vez que alguna omega de cualquier raza se le acercaba.El necesitaba a esa híbrida con él.Leonard y Zaid le decían que solo era cuestión de unas semanas más antes de volver a la misma rutina de siempre, pero estaba seguro de que fracasaría si seguía de esa manera. Esa noche tenía otro viaje fuera del país, y eso lo estaba volviendo loco de sobremanera.Estúpida omega de ojos lindos que lo volvían loco con cada cosa que
El clima de Pekín china no era para nada bueno para Rachel. A decir verdad, su nariz no paraba de soltar pequeños mocos y eso; que tenía un abrigo puesto ocultando su cola de las miradas curiosas de todos esos alfas.Era de noche cuando llegaron a esa ciudad y la verdad es que Rachel no sabía cómo sentirse al respecto con todos los olores de los omegas y alfas del lugar. Al menos agradeció que los betas tuviesen un olor más ligero o si no estuviera perdida y mareada.De un momento a otro fue llevada a otro lugar y alejándola del alfa. Por suerte Valeria y Carla estaban cerca de ella porque o si no hubiese hecho un tremendo escándalo en pleno aeropuerto.El alfa le había explicado que debían de estar separados en cuanto pisaran Pekín.
La mirada del alfa estaba perdida en la ciudad, según él había cometido el peor error de todos al marcar a la omega como lo hizo la noche anterior. No podía creer que había marcado a Rachel y que ella simplemente se había desmayado cuando por fin se dio cuenta de su error ya era demasiado tarde para remediarlo.Su celo lo había tomado por sorpresa como era de esperar. Pensaba que solo era un simple mito entre los ancianos que se encontraba por ahí en la calle, pero se dio cuenta de que todo era verdad y que Rachel era su alma gemela.Ahora las cartas estaban sobre la mesa, Rachel era suya por toda la puta eternidad y eso era algo que estaba muy en el fondo de su corazón y ahora estaba en lo más alto de este. Miró a la omega acostada en la cama, aun inconsciente por la actividad anterio
Ian miraba las pruebas que Rachel se había hecho ese día y todas daban positivo, realmente estaba embarazada. Si que todo estaba perdido, bueno no tanto.Leonard y Zaid estaban que lo mataban con la mirada, realmente lo mataban y él en verdad que no estaba para nada contento con las consecuencias de sus actos. Debía de poner su plan en marcha, su hermano ya había dado la orden de que debían matarlo dentro de poco y Rachel aún no estaba operada de la vista.Miró hacia donde estaba la omega durmiendo y no dudó en sonreír al ver sus pequeñas manos sobre su vientre. Era una buena imagen.— Tenemos que hacer algo, Ian — la voz de Leonard lo volvió a la realidad —. Creo que lo mejor será que todo se quede así