Un panorama confuso―Lo siento, pero creo que necesito un momento para procesarlo ―Eva se había dejado caer en el sillón, apenas entraron en la casa. Logan se le quedó viendo, él sabía que para ella todo aquello debía ser demasiado.―Sé que lo que viste en ese lago fue algo muy impactante.― ¡¿impactante?! ―exclamó Eva a manera de pregunta― ¡Literalmente te vi convertido en un lobo gigante matando a otro sujeto!… ni siquiera sé cuál de las dos cosas esas difícil de procesar.Logan tuvo que desviar el rostro, pues una sonrisa se intentó dibujar en la comisura de sus labios, ante lo que había sido una aseveración de su Luna que a él le ocasionó mucha gracia.―Eva lo siento, no quería que tuvieras que verlo así… pero entiende, ese malnacido estaba amenazándolos, no podía permitir algo así… Frank tenía que pagar.―Pero es que no te discuto eso, ¡¿Pero matarlo Logan?! ¡¿A caso ustedes todo lo resuelven con soluciones así de drásticas?!Eva no estaba de ánimos como para hacer un berrinche,
Compromiso adquirido.―Logan, yo no lo he olvidado. El compromiso sigue firme en mi memoria.― ¿Entonces? ―le preguntó el alfa que no le quitaba la mirada de encima. Los dos cuerpos apenas se habían separado unos centímetros, pero aún seguían deseándose con furia.―Es solo que ese acuerdo fue hecho por otras razones muy diferentes.―Lo sé, sé que lo hiciste por tu hermana y el dinero que necesitabas para ella —Logan dio esto dejando en claro que aquello le estaba haciendo sentirse diferente.―No solo eso, amor ―Eva estaba condensado en ese momento un caudal de muchas ideas y nociones contrastantes que le hacían descubrirse abierta a decirlo todo―… ayer yo no había dimensionado la realidad de este mundo oculto que he descubierto a tu lado… todavía no había entendido lo real que podía llegar a ser todo esto.Logan asintió dejándose ir a un lado del sofá. Aquellas palabras de Eva le estaban haciendo reflexionar.― ¿Me estás diciendo que el miedo te ha hecho dudar?―De ninguna manera ―afi
La emisaria del diablo―Susana ¿Qué crees que estás haciendo?Logan clavó en aquella rubia la mirada más fría y llena de odio que Eva le había conocido hasta entonces.El alfa estaba exaltado por una furia sin precedentes cuando esa mujer intentó pasar más allá del umbral de la puerta.― ¿Acaso no me permitirás pasar? ―la rubia parecía empeñada en asumir aquello como una situación que no alcanzaba a entender.Se notaba a priori que ella solo quería importunar con su presencia y que lo estaba haciendo con la peor de las intenciones, por eso Eva se acercó hasta llegar al lado de Logan para marcar su posición.Logan tomó la mano de Eva en un gesto que a su luna le dejó con el corazón impregnado de una emoción sublime.―La verdad ahora mismo no es un buen momento ―sentenció Logan al tiempo que halaba a Eva hasta dejarla pegada a su pecho.Susana, lejos de acomplejarse por este derroche de cercanía entre el alfa y su luna, se quedó con una sonrisa que le daba a su rostro un aspecto mecaniz
Deseo― ¿De qué demonios habla esa mujer?Eva no se quedó en silencio ni un segundo más. Ella podía entender que Logan estaba tan impresionado como ella, pero las preguntas a sus respuestas solo podían venir de él, por lo que se hizo necesario expresar todo sin un mínimo filtro.―Eva, la verdad, esto es toda una locura… No sé qué decirte…― ¿No sabes qué decirme? Logan creo que estás acogiendo jodidamente mal tus respuestas.Eva sabía que ella le había dejado en claro a la rubia melindrosa que ella no pensaba alejarse de Logan; sin embargo, ahora que estaba a solas con él, la sola idea de imaginar que él que se suponía que estaba por convertirse en su esposo para toda la vida, estaba esperando un hijo con esa mujer, le hacía perder la cordura.Eva se dio la vuelta e intentó retomar el camino del que se había devuelto recién con aquellas intenciones de comunicarse con su amiga. Ella no quería decir cosas de las que luego pudiese arrepentirse y por eso había decidido retirarse a la rec
Atracción natural.La puerta de la habitación terminó destrozada cuando Logan la abrió de una sola patada.―Hazme tuya ―le dijo Eva, quien no soportaba esperar un segundo más.―Lo haré ―le respondió Logan con la voz atravesada por un vendaval de emociones intensas que le hacían estar preso de un trance de atracción incontrolable.Eva sabia que sus decisiones estaban siendo alteradas e influenciadas fuertemente por todo lo que estaba viviendo en brazos del alfa, pero no había forma de que ella pudiese siquiera intentar oponerse a sus propios instintos, pues cada partícula de su ser sucumbía de manera infinita a las sensaciones que Logan le hacía vivir.Desde que ella se subió sobre él, rodeando las caderas de su alfa con sus piernas y aferrando sus brazos alrededor del cuello de él, Eva se sintió que estaba en el lugar perfecto donde siempre debió estar.―Te deseo tanto ―Le susurró Logan al oído, ocasionando que Eva se dejase ir en un suspiro de pleno disfrute. El alfa estaba tocando l
Sellando el trato.―Te amo Eva Moon―le susurró al oído Logan mientras le mordía el lóbulo de su oreja derecha.Eva estaba extasiada de placer. Ella ahora era la verdadera reina de ese palacio.Atrás habían quedado los días de dolor y de angustia. Aún estaba todo aquel pandemonio que enfrentar: Los problemas de la manada, los conflictos en la empresa, la enfermedad de Nina y la distancia de Alan, más aún para ella era necesario recuperar la cercanía con su hermana; pero en ese preciso momento, nada de eso importaba. Para ella no había nada más que el aquí y el ahora.―Yo te amo más Logan Reich.Eva sonrió al envolver el cuello de su alfa con ambos brazos para volver a besarle los labios de miel mientras seguía desenfrenada, cabalgándole con furia.Era cierto que la masculinidad de Logan era algo prodigioso e incluso intimidante, pero Eva, a pesar del dolor que aún conservaba de lo que había sido su primer encuentro, no escatimo en limitaciones y se entregó al furor de ese encuentro com
En todo su esplendor― ¿Estás segura de esto?Logan condujo coche con la vista puesta en ella, era algo que se le hacía difícil de evitar, pues Eva captaba del todo su atención.―Claro que si Logan… recuerda que en primera instancia este fue el trabajo que yo esperaba obtener el día que me presenté en tu empresa.La mañana del siguiente día había llegado después de que Logan y Eva se pasaran toda la tarde y la noche del día anterior, poniéndose a cuentas sobre los pormenores de aquel nuevo problema al que se debían enfrentar.La empresa de Logan era el resultado del esfuerzo de las generaciones de sus antecesores, quienes habían llevado su agresividad y domino al mundo empresarial. Todos los miembros de la manada del lobo blanco eran hombres respetados, exitosos y millonarios, pero era Logan quien se encargaba de gerenciar lo que era el patrimonio de la manada en aquella empresa, que era la que manejaba el grueso de todo el capital que, como una sociedad, la manada dirigiría.―Es cie
En la guarida del lobo― ¿Estás lista? ―Logan le miró a los ojos con detenimiento antes de abrir aquella puerta.Eva estaba convencida por demás, pero no podía negar que aquel gesto de parte de él le había imbuido de una fuerza incontenible que le hacía sentirse extasiada por demás. Logan era su motor ahora que sabía que a su lado tendría el amor de un hombre atento y apasionado.―Yo nací lista ―le aseguró Eva, quien muy en el fondo tenía cierto recelo por lo que estaba a punto de enfrentar. La experiencia del día anterior aún le seguía afectado cuando lo pensaba, pero no estaba dispuesta a permitir que esto le afectase un segundo más.Logan sonrió sin ser capaz de dejar de mirar a la hermosa mujer que tenía su lado. Eva iba vestida con un traje de ejecutiva que le hacía verse impresionante y le daba una imagen de profesionalismo increíble.―Lo sé… ya me lo has dejado en claro.―Y lo seguiré demostrando hasta que sea necesario.Aquel comentario de Logan ocasionó que Eva sonriera de sa