Difícil explicación― ¡¿Te costaba tanto llamar?! —le reclamó su mejor amiga.Eva se quedó en silencio al recibir los reclamos de ella.―Lo siento mucho ―fue lo único que pudo decirle en ese momento.―Realmente trato de entenderte y no enfadarme Eva, pero no puedo creer que la calentura te haya superado de tal manera para que te olvidaras de avisarme que estabas lista a entregarte a un completo desconocido.― ¡¿Qué demonios estás diciendo?! ―preguntó Eva abordada de golpe por un viaje de confusión sin precedentes. Aquella conclusión a la que Lily había llegado no le hacía mucha gracia.―Es obvio lo que ocurrió, Eva, no es necesario que te hagas la inocente.― ¿A caso crees que…?―Estoy casi segura… no te juzgo Eva, a estas alturas no es normal que una chica de tu edad siga siendo virgen… seguramente el patán te sedujo, no te juzgo, el imbécil está demasiado atractivo… ¡Pero maldición, podías avisarme!― ¡Lily no, entre él y yo no ocurrió nada de lo que te imaginas!― ¿Entonces no pasa
Un poco de tensión.― ¡¿De verdad era necesario que fuese tan drástico con mi amiga?! ―le preguntó Eva, apenas llegaron a la casa.El lugar era un verdadero palacio de ensueños, lo que hablaba con mucha elocuencia de la que era la privilegiada posición de ese sujeto que ahora tenía al frente, pero Eva estaba tan cabreada que no tuvo tiempo de reparar en nada de eso y se fue directo con su afrenta.―Entiéndalo de una buena vez señorita Moon, de ahora en adelante no puedo correr el riesgo de que usted hable con cualquier persona. Por si se le olvidó, le recuerdo que usted ahora conoce nuestro más poderoso secreto y le aseguro que un lobo está dispuesto a matar para mantener el silencio sobre su verdad.Al decir esto, el señor Logan sonrió de manera amenazante, haciendo al mismo tiempo un gesto que invitó a Eva a mirar a Alan, quien se encontraba acomodando unas cosas al fondo de la sala.―De ninguna manera iba a contarle nada a Lily, ella tiene sus propios problemas y no quiero perjudic
El segundo al mando Eva tuvo chance de bañarse y cambiarse de ropa. Logan había sido enfático respecto a no compartir el baño, por lo que ella no pudo evitar sonreír con cinismo mientras hacía esto. Alan había sido su guía en la casa luego de haber tenido una pequeña conversación respecto a la verdadera naturaleza de esa relación de lealtad que le unía con su jefe. ―Son muchos los tipos de vínculos que unen a los de nuestra especie, señorita ―le dijo Alan sonriendo con melancolía―… así como el jefe está destinado a estar unido a usted por un amor inexplicablemente apasionado, así estoy yo comprometido a ser la mano derecha del jefe de la manada. Eva se había quedado con muchas dudas antes de eso, por lo que con Alan se sintió en la confianza de poder sacarse un par de dudas. ―Espera un momento… ustedes hablan de lobos y manadas como si yo estuviese enterada de todo eso. ― ¿Nina no le explicó? ―le había dicho Alan con preocupación. ―Ella me dio un resumen, pero vaya que es difíc
Cuentas claras― ¿Cómo se supone que llevaremos esto adelante si ni siquiera se el motivo por el cual usted me odia?Eva planteó aquella pregunta dejando de lado cualquier miedo o impedimento. Era cierto que ella se había quedado impresionada por el despliegue de atenciones que Logan había tenido a la hora de servirle aquel almuerzo, pero ella estaba demasiado enfocada en saldar sus dudas.― ¿De verdad no piensa dejarme disfrutar lo que preparé? ―Logan se mostraba equilibrado; hasta ese punto había mantenido a raya sus impulsos egoístas y de venganza, pero las reacciones impetuosas de Eva no dejaban de ocasionarle conflicto.―Lo siento, ya le agradecí por todo esto y le dije que me ha impresionado que un sujeto como usted pueda cocinar así de bien…― ¿Un sujeto como yo? ¿A qué se refiere?―Ya sabe… altanero, reacio, mandón.―De verdad que no sé a qué se refiere ―le dijo Logan dando a entender que todo aquello que Eva le decía escapaba de su comprensión.Eva se mentalizó en dejar ese
Una antigua traición―Sí, Nina me contó un poco del origen ―le respondió Eva, casi sin voz cuando Logan le interrogó respecto a lo que ella conocía de la leyenda.Logan asintió mientras veía la espalda de esa chica que había pasado a su lado, intrigada por toda aquella habitación: Era la biblioteca de la manada, donde se guardaba y preservaba el conocimiento ancestral de su clan en libros, pergaminos y pinturas.Eva era un ratón de biblioteca que disimulaba su condición por esa belleza que le hacía parecer una supermodelo, pero para ella había sido demasiado impresionante encontrarse con esa cantidad de información inédita que estaba allí contenida.―Perfecto, eso me facilitará las cosas ―Logan no terminaba de encontrar la manera idónea para lidiar con su Luna, a quien odiaba con locura, pero a quien al mismo tiempo no podía mantener lejos de él.―Si lo dice porque cree que ya he entendido todo este tema de los lobos y lunas se equivoca, pues aunque he logrado comprender un poco sobre
Una antigua traición 2Eva recordó entonces que en sus visione y sueños, el lobo que ella veía era siempre uno grande y majestuoso, pero de color grisáceo, incluso plateado cuando le daban directamente los rayos de la luna; pero jamás había visto un lobo blanco.―El alfa hijo de Logan perdió la capacidad de ser portador de esa majestuosidad… pero además desarrolló la necesidad de marcar su poder por medio del despotismo y la crueldad… solo así logró mantener a raya a los demás lobos que querían ocupar su lugar, pero eso no es todo.Eva estaba escuchando con atención aquella historia que podía sentir con mucha tristeza.― ¿Pero de ella no supieron nunca nada?―No… y no fue eso lo peor, señorita Moon; al haberse negado ella a cumplir con su destino, se rompió lo que debía ser un ciclo de estabilidad, por lo que ese propósito que ella no cumplió en vida, pasó a su hija.― ¡¿Qué?!―Al negarse ella a ser la luna del alfa, como estaba predestinada, la naturaleza le obligó a traspasar ese de
HeridasLa herida se había vuelto a abrir. No solo la herida de su pecho; también lo había hecho la de su alma.Logan había vivido toda su vida canalizando ese odio en una forma de autoridad que le había permitido alcanzar el prestigio y el poder no solo entre los suyos, sino también en el mundo de los hombres al convertirse en el más poderoso CEO de la industria inmobiliaria.Era una debilidad que él había sabido convertir en cualidad y por eso se había sentido muy orgulloso toda su vida. En la imaginación de su manada, se suponía que la Luna, que estaba destinada para el padre de Logan, se había suicidado antes de tener una hija, por lo que Logan había vivido toda su vida, enfocado en sus propias metas.El amuleto de sangre le había complementado esa seguridad de poder vivir enfocado en sus negocios sin tener que temer la traición de su luna, pero después de haberse cegado por esas ansias de venganza y terminar herido por ese maldito lobo de la visión, Logan ahora estaba en aprieto
DesahogoLogan estaba fuera de sí; Eva había perdido todo control.― ¿Está seguro?―No hables ―le respondió Logan apresurándose a colocar de nuevo sus labios sobre los de ella.Eva estaba perdida en ese trance, pero no podía dejar de pensar en el odio que él había jurado profesarle; sin embargo, ahora estaba extasiada de ver como una explosión de pasión le estaba saciando los labios.Logan la apretó contra su pecho haciendo que su Luna quedase sin aire, pero nada de aquello le molestaba en lo absoluto: Ese pecho era justo el lugar donde su alma ansiaba estar.Logan mordió el labio inferior de ella haciendo que un suspiro contenido brotase de la garganta de Eva, quien no podía contenerse por la agitación que le gobernaba. Ella estaba descubriendo muchas de esas sensaciones por primera vez.Ella había permanecido toda una vida alejada de las cuestiones del cuerpo y del corazón, precisamente por estar concentrada en sus propias desgracias; ahora las desgracias quedaban a un lado para de