Adrián Sokolov
Continúo similando una llamada mientras esperamos alguna señal o que alguien sospechoso salga. Marie está nerviosa, con Carlos al lado mostrándole de todo a su al rededor para despistar cualquier sospecha. Es obvio que ella no se puede concectar cuando su hija está ahí dentro corriendo peligro.
Veo como una pareja sale con la niña, ésta última me ve y sale corriendo hasta mi.
—Principe quero a mi mamá —grita a medida que se acerca.
Alguien me dispara dos veces, uno me pega en el brazo y el otro en la pierna izquierda, abrazo a la niña y camino lo más rápido que puedo. La punzada de dolor no me deja avanzar. La niña corre cuando ve a su mamá. La policía llega cerca y arrestan a quienes llevan la niña. El que me disparó huyó. Levanto la cabeza y veo a Marcos caminar con Katherine agarrada para que no se escape.
—Vas a
Adrián Sokolov Veo las personas salir y entrar del restaurant mientras espero a un viejo amigo y su esposa. Quien diría que el capitan de los infieles y el rompe corazones, hoy tendría muchos hijos y con una sola mujer y no cualquier mujer, si no una que lo hizo sufrir cuando estábamos en la secundaria. Lo veo entrar de mano con su amada y me pongo de pies.-Adrián Sokolov -dice abriendo sus brazos.-Lorenzo Lombardi -digo abrazándolo. -.Lucía -digo y besando su mejilla.-Hola Adrián -dice sonriente.Lorenzo me lleva 2 años de edad, estuvimos en la misma secundaria, yo fui el menor del grupo, si también fui un cerebrito cabron. Jajaja a Lucía no la olvido, tenía un pelo largo, era llenita y algo nerd.Nos sentamos y pedimos algo de comer.-¿Cuál es la reseta para estar tan joven? -pregunto y ambos
Marie Johnson Cuando rompemos el beso, la cara de Adrián es un completo poema. Los segundos pasan lentos. Traga saliva antes de hablar. En sus ojos hay odio, rencor, desilusión e indignación. Nos mira con rabia y asco a los dos. Aprieta los puños y sus músculos están tensos. Sonríe antes de hablar.—Pues lárgate con él, como la zorra que eres —dice y Carlos va aventarse sobre él, pero lo detengo. Me acerco a Adrián y le pego con todas mis fuerzas. Su cara se va a un lado y él la regresa con rabia. Le he dejado la mano marcada en su bello rostro y no me arrepiento. Me doy media vuelta y salgo de la oficina, con la cabeza en alto y el dolor por lo bajo. Sé que al lado de Carlos me irá mejor.Voy hasta el pequeño cubículo en donde trabajo y me pongo a digitar algo para la recepcionista. Los ojos me pican y no puedo contener las lágrimas.—No
Adrián Sokolov Veo mi reloj mientras camino apresurado para llegar a tiempo a la oficina, me quedé dormido y por eso vengo tarde. Respondo algunos que otros saludos de parte del personal y continúo mi camino. Recuerdo que tengo una reunión a las 11 y Carlos debe ir conmigo. Decido pasar por su oficina y entro sin tocar. Él y Marie están hablando muy juntos y eso me incomoda. Carraspeo y se alejan.-Más tarde hablamos -dice Marie besando sus labios.-Vale cielo -dice Carlos.-Buenos días señor, Sokolov -dice Marie pasando por mi lado.-Buenos días -digo seco -a las 11 tenemos una reunión, no la olvides -digo de lo más normal.-Si, lo recuerdo -dice ordenando su escritorio.¿Por qué lo tiene desorganizado?¿Habrá follado con Marie en el escritorio?-Bien -digo saliendo.Creo que me odio,
Marie Johnson Carlos insistía en que lo acompañara a la reunión pero no estaba de acuerdo, además se que sería muy incómodo estar entre dos hombres que sienten algo por mi. Así que decidimos ir con Adrián.Carlos con toda la confianza que tiene con su primo, abre la puerta y nos quedamos pasmado al ver a la niña que pidió permiso para hacer una tarea de economía. Nos había dicho que tenía 16 recién cumplid. Se está vistiendo, siendo recién follada por el imbécil y salvaje de Adrián. Carlos da un paso hacia adelante y lo mira con asco. Yo no digo nada aunque siento algo por dentro que duele y mucho. Adrián se percata de que tiene su miembro fuera y lo entra rápido..Como si ya no estoy cansada de verlo y tocarlo.—¿Serás idiota? —pregunta Carlos acercándose a él; peligrosamente —es una niñata.—Acabo de enterarme ¿acaso lo aparenta? —dice Adrián frotá
Adrián Sokolov Entro al bar y busco un taburete cerca de la barra, el chico me sonríe muy amable y me muestra una botella que tiene buena pinta, pido un trago y en menos de 3 segundos me lo tomo.Pido otro trago.Marie llega a mi cabeza, el beso con Carlos, su cercanía, me tiene mal. Desgraciadamente soy un imbécil enamorado. Todo sucedió tan rápido. Creo que es la segunda vez que me enamoro.Un trago.Luego otroY otros y otros más. Me siento mareado y fuera de sí.Mi celular suena y lo tomo.—¿En dónde estás idiota? —pregunta Loren y balbuceo estupideces y río.—En un bar. ¿Qué quieres? —pregunto.—Estas borracho, voy para allá —me cuelga y yo inflo mi labio superior antes de guardar el celular.El chico me da otro trago y lo acepto.
Marie Johnson Llegamos a su departamento y lo guio a su habitación. Carlos decidió marcharse y dejarme aquí con Adrián, para que no vuelva a salir. Ya que él lo conoce bastante y sabe que sería capaz de largarse de nuevo.—Debes ducharte —digo tirándolo en la cama. Pesa muchísimo. Se empieza a desnudar y yo me quedo viéndolo. Se levanta en boxer y camina tambaleándose , lo agarro y lo guío.—Báñame —dice entrando a la hermosa bañera.¡Qué tentación!Obedezco, pues no quiero que se rompa hasta el culo. Me hala y casi me caigo. Me pone debajo de la ducha y el agua fría me congela hasta los huesos. Nos bañamos en silencio. Él baja los tirantes de mi blusa de pijama y lo termino de quitar. Me desnudo. Besa mi cuello y me erizo.—Terminemos —digo removiéndome incómoda. Asiente y continuamos bañándonos.
🌟🌟🌟Adrián Sokolov —Es muestro turno de disfrutar —digo a Marie abrazándola por detrás.Habíamos llegado recién del zoológico, fue frustrante, demasiado para decir verdad. Ya odio menos los animales.—¿A dónde me vas a llevar? —pregunta abrazándome por el cuello.—¿A la playa? —pregunto con duda.—Son las 8 de la noche y debemos trabajar mañana —dice mirándome fijamente.—Nos tomaremos el día libre, mi madre se quedarán con los niños —digo besando su frente.—Está bien, vámonos —dice tomando mi mano.Nos subimos a uno de mis vehículos y nos vamos rumbo a la playa, solo con la ropa que tenemos puesta.Después de un camino no muy largo llegamos, me estaciono y nos quitamos los tenis y salimos.—El último en llegar deberá hacerle un oral
Adrián Sokolov Me despierto y siento un aroma bastante conocido impregnado en las sábanas. Estiro mi mano y no hay nada. Me meto a lavar los dientes y salgo solo con el bóxer. Voy hasta la cocina y la veo en ropa interior cocinar y bailar.—Despierta tan temprano —digo abrazándola por detrás.—Para hacerle desayuno a mi jefe —dice dándose la vuelta.—Buena empleada —digo abrazándola y levantandola para ponerla en la loseta. Me pongo en medio de sus piernas y la beso. El sabor a pasta dental invade mi boca y nariz. Ella rodea sus manos en mi cuello y me acerca más.Meto mis manos en sus bragas y ya está un poco mojada, empiezo a comer su cuello, huele a mi jabón y me encanta. Huele mejor en su piel. Acaricio su entrepiernas y jadea fuerte, continúo sin detenerme.—Mierda Adrián —gruñe araña