~~~James.― ¿Nos dirigimos a casa, señor? ―me dice Walter, en cuanto la petulante y desmemoriada de Alison se baja del auto.¡Y me ha tratado como a un mentiroso!Entonces, me río de todo, porque me ha vuelto a demostrar todo su carácter y por alguna razón masoquista, eso me atrae más de ella.―Señor… ―trata de decir Walter nuevamente, pero lo interrumpo.―Debemos volver a la oficina―le indico y él pone en marcha el vehículo.Desde que ocurrió lo de anoche, me quedó algo muy claro, y eso es que Alison está en peligro constante y solo espero que no sea por mi culpa.Es por eso por lo que esta mañana cité a Carlisle y a Coleman, los hombres a los que les tengo más confianza, para que se encargaran de la investigación, porque de seguro que hay otra rata sucia caminando entre mis filas, una que ha estado informando a mis enemigos cómo poder hacerme daño.Enemigos que me están declarando la guerra y que se aprovechan que no sé quiénes son, para acabar con todos los que me rodean.Y no voy
~~~James.Soy un hombre que se encarga de una organización internacional, así que me puedo encargar de que una mujer se rinda a mis pies, también. Además, he tenido a todas las mujeres que me ha dado la gana, así que ella será mi mujer, después de todo, ya me confesó que me quiere, solamente tengo que romper su orgullo y que confiese sobria que está enamorada de mí.Entonces, se aparecen Carlisle, en conjunto con Coleman, quienes tienen amarrado a Stevenson, sacándome de mis pensamientos por la mujer que se robó mi corazón.―Hemos encontrado a la rata, señor―me indica mi segundo al mando y yo estoy tratando de entender―Stevenson estuvo hablando con unos amigos, referente al informe que le entregó hace unos días―señala y ahora quiero estallar en ira.― ¿Y cómo se enteraron de todo eso? ―le pregunto, antes de sacarle la verdad a la rata de Stevenson.―Verá―dice esta vez Coleman―ese tipo de anoche se me hacía conocido, así que me puse a investigarlo y resulta que es el ejecutor de la or
~~~Alison.Pero ¡qué se ha creído este tipo!Sí, amanecí en su cama y me rescató anoche del tipo que estuvo a punto de tomarme a la fuerza, pero, de ahí a que crea que voy a ser su mujer o a que voy a jugar a la casita feliz con él y Mark, pues, está más que equivocado, porque es un abusivo.¿Es que acaso piensa que soy tan masoquista, como para tener que estar junto a él?¿Y ahora dice que le confesé mi amor por él?¿Es que acaso cree que me volví loca?Pero, creo que ya sé cuál es el problema en todo esto y eso tiene que ver con que me he ido a vivir a su casa, y a lo mejor piensa que es la excusa que me busqué para meterme en su cama, tal y como pensó la tal Tiffany anoche, y de seguro James piensa que soy la chacha que se encargará de quitarle el frío de noche, mientras me trata como a una esclava de día.Y entonces, recuerdo el miedo que me da toda su cercanía.¿Y cómo es que supo en dónde encontrarme a noche para rescatarme?Y no es que me queje, después de todo, ese tipo estab
~~~Alison.―Nadie te ha dado permiso de que te vayas de aquí―me responde destilando ira en cada poro de su piel―y no te voy a dejar que te vayas de ninguna manera―me espeta cabreado, pero yo me zafo de su agarre y trato de alejarme de él.―No te lo estoy preguntando, James, solo te lo estoy comunicando―le respondo, pero, tal parece que no quiere entender lo que le acabo de decir.―Eres una cobarde, Alison Elkins―me dice de lo más sarcástico―no me puedo creer que prefieras huir a tener que afrontar lo que sientes por mí―insiste en decirme, pero es que no puedo creerme lo que me ha dicho.―Y tú te has inventado algo, solamente para que sea la mucama con la que te acuestas―le digo de lo más enfadada―que me parece mentira que siendo un hombre tan guapo, te tengas que inventar cuentos como este, solamente para que yo me confunda y crea que en verdad dije una cosa como la que me acusas tú―le espeto molesta―y si por casualidad lo dije, ahora deshago mi palabra, porque es obvio que ahora que
~~~Una semana después.Alison.―Vuelves a llegar tarde―me dice James nuevamente esta semana, recibiéndome en la entrada con su cara de pocos amigos y sus brazos cruzados en su pecho, tal y como supongo que esperaría a su peor enemigo.Creo que me he vuelto una impopular por aquí, luego de que logré mudarme para la casa de Georgy, la cual queda bastante lejos de la gran mansión de James, sin contar con que es una odisea venir hasta acá, con la innumerable cantidad de transportes que necesito tomar.Transportes que no son nada baratos, debo aclarar.Pero, ni modo, así van a tener que ser las cosas, porque ni loca vuelvo a vivir aquí.Sin embargo, eso no disculpa que llegue tarde, después de todo, siempre puedo buscar una nueva vivienda que quede más cerca.Y en serio, estoy poniendo mi mejor esfuerzo en ello, después de todo y como están las cosas, se me irá el dinero que gano entre trenes, buses y taxis.―Lo siento, James, no volverá a... ―trato de excusarme, como los días anteriores,
~~~Alison.Y llega tanta gente a la casa de mi amiga, que hasta se amontonan en el pasillo del apartamento y hasta en las escaleras, en donde se notan varias parejas haciendo de las suyas, y ahí es cuando me doy cuenta de que ha sido toda una mala idea, pero, ya estamos en esto y ni modo que vayamos a echarlos a todos, ahora que los hemos reunido, para que se diviertan.―Veo que tu vaso está seco, toma este de aquí―me dice un amigo de Georgy, quien está viendo quién está tomando y quien no, así que le pregunto para qué lo hace y me responde con un―para que todos estemos parejos, por supuesto―me indica y yo estoy queriendo evitar la horrible idea de que quiere que todos estemos igual de ebrios.Pero ese no es el único que hace lo mismo y hay otros dos que se encargan de los vasos vacíos, reemplazándolos por unos colmados de bebidas de varios colores.Y ya para la medianoche, no estoy muy segura de cuántos vasos de alcohol me he bebido y mucho menos, de qué se trataba el último trago q
~~~Alison.―Anda, cariño, que solamente es un beso―me dice, al tiempo que me toma por la cintura y su mano trata de colarse por mi suéter―a menos que quieras incluir otras cosas―me dice con una sonrisa lasciva, lo que me hace temblar de pie a cabeza, así que lo empujo como mis fuerzas me lo permiten, pero él es más fuerte que yo.Y es cuando un miedo empieza a perforar a cada uno de mis huesos, solamente de pensar que esta no es la primera vez que me encuentro en esta situación, que nada bueno podía esperar de una fiesta como esta y que en las otras ocasiones, la mayoría de ellas, mi mejor amiga ha estado cerca, cuando todo lo malo me ha pasado.En el bar, en la parada de autobuses y ahora, en esta maldita fiesta improvisada."Pero ¿qué podía esperar cuando la tequila y Georgy se juntan?", pienso, al tiempo que forcejeo con todo lo que tengo, para que este tal César entienda de que no quiero nada con él.Entonces, miro a mi alrededor, donde un montón de gente continúa canturreando "¡
~~~Punto de vista neutro.James estaba muy cabreado, a pesar de que había descargado gran parte de su rabia propinando golpes a diestra y siniestra a cada uno de los malditos que estaban alentando a ese miserable que intentó abusar de Alison.Otro miserable que pretendía hacer lo mismo.Él no podía dejarla sola, luego de que el miserable de Stevenson se encargó de venderle información a sus enemigos, la misma que le había solicitado y la razón por la cual había pagado con su vida algunos días atrás.Y tal parece que a sus enemigos no les había llegado la información clara, cuando le pidió que lanzara su cadáver en la puerta del líder de la organización que lo había desafiado.Así que tendría que hacer algo más fuerte que eso.―Hemos capturado al tal César―le indica Carlisle, con una tropa completa de sus mejores hombres―también hemos capturado a algunos que lo estaban ayudando a escapar―le señala y James ahora quiere estallar en ira.― ¡Agárrenlos a todos! ―le espeta con la rabia sal