Abro mis ojos completamente desorientada y veo a Iván y al doctor frente a mi —Jimena, ¿te sientes mejor? Te has desmayado— Me explica el doctor y asiento.
Abro y cierro mis ojos unas cuantas veces intentando volver a la normalidad —Si… no sé que paso—
—Se te bajo la presión, nada grave dado tu estado— Dice y sus palabras vienen una vez a mi cabeza…
«Voy a tener mellizos…» Pienso.
—¿No lo soñé? ¿No? — Pregunto llevando mis manos a mi vientre y por alguna razón Iván se sonríe.
—Si no te desmayas nuevamente, te diré que no… sé que no esperabas es
De alguna manera Iván hace que todo parezca mucho más sencillo de lo que es. Él me ha llevado a ver que vamos a poder con todo lo que representa ser padre de mellizos y mucho más si así lo queremos. Conoce a la perfección mis miedos en cuanto a perder mi libertad laboral, también como me atormenta el pasado, y por supuesto mi intento por soportar mis culpas, pero así todo, no se da por vencido, me ayuda, y me tiene una paciencia de oro. Todo el día de hoy nos la hemos pasado mirando cosas para los bebés, y también me ha convencido de que nos detuviéramos en una agencia de bienes raíces para que miráramos casa y allí me di cuenta de la gran visión arquitectónica que él posee, ya que podía ver mansiones donde yo solo veía una casa cara y destruida. Si bien no hemos iniciado ning&uac
3 días despuésTodavía no le he dado la noticia del embarazo a mi jefe, y no es porque no me atreva, o tenga miedo a que su propuesta laboral cambie a causa de esta noticia, sino porque quería que los primeros en enterarse de todo sean mis padres. Con Iván hemos acordado de avanzar un casillero a la vez, primero mis padres, después una video llamada con los suyos, y por último mi trabajo. —¿Nerviosa? — Me pregunta mientras que esperamos a que mis padres nos abran la puerta.—Mucho, nunca es fácil decirles a tus padres que van a ser abuelos— Bromeo y nuestras risas se convierten en la primera imagen que ve mi madre al abrirnos.—Hija, Iván, bienvenidos— Nos dice con una enorme sonrisa tat
Mi prometido cierra la puerta detrás de nosotros y por algún motivo ambos respiramos profundo, supongo que de alivio —Bueno, tus padres no me han matado, creo que eso es una ventaja— Bromea mientras que voy dejando mi bolso encima del sofá y rio ante sus palabras.—Totalmente, no me he quedado viuda antes del matrimonio— Remedo entre risas que se ven interrumpidas ante la manera que sus brazos me aprisionan para pegarme a su cuerpo.—No te desharás de mi tan fácilmente— Advierte y sentir sus labios sobre mi cuello es de las sensaciones que más me gustan en esta vida —Te esperan muchos años a mi lado, muchos besos, caricias… muchos momentos felices que vamos a ir construyendo juntos a pesar de toda la incertidumbre que significa convertirnos en padres— Me susurra al oí
Un poco más de un mes despuésDefinitivamente, la vida no es algo que tu puedas planear por completo, en realidad es como dice aquella famosa frase, “la vida es aquello que te va sucediendo mientras estás ocupado haciendo otros planes”; siento que es exactamente eso lo que me esta sucediendo. Tenia planes de comenzar ese nuevo puesto laboral, de continuar viajando y aventurándome en mi carrera, pero por ahora, y solo por ahora; he decidido tomarme un tiempo de calma. Gabriel no ha tenido problema alguno en mantener su oferta laboral a pesar de mi embarazo, pero fui yo quien decidió rechazarla y no me arrepiento de haberlo hecho. Por primera vez en mi vida quiero dedicarme a mi embarazo, a mis planes de boda, y a ayudar a Iván con la empresa, aunque en realidad su oferta es que yo abra mi propia consultoría de market
Dos semanas despuésTodavía no puedo creerlo… este sábado es nuestra boda… Miro a mi alrededor y mi momento de asombro se ve empañado a causa de la cantidad de cajas que nos rodean y es que todavía no hemos terminado de desempacar todo. Hemos estado demasiado ocupados entre los preparativos de la boda y nuestros trabajos, eso sin contar que yo he estado haciendo mi propia investigación acerca de todo lo que necesito para abrir mi consultoría tal y como sugirió mi futuro esposo. —¿Estás lista hermosa? — Me pregunta Iván mientras guarda su celular en el bolsillo.—Si, vayamos antes de que se nos haga tarde y sean tus padres quienes nos esperen a nosotros en el aeropuerto— Comento sonriente y rápidamente tomo m
Al día siguienteQue mis padres y los de Iván se lleven bien, es sin duda alguna un plus que nos hace muy felices. La cena de ayer ha ido de maravilla, al parecer entre ellos hay muchos temas de conversación en común y eso hizo que la estadía de mis suegros en casa de mis padres resultara en algo muy natural. Es obvio que los bebés han sido algo de lo que han conversado también, y a pesar de que aprecio muchísimo los consejos que nos han dado acerca de como ser padres, sé que Iván y yo iremos aprendiendo en el camino. Probablemente cometamos muchísimos errores, pero es justamente de eso de lo que se trata; aprender de los errores.—Hermosa, ¿estás lista? — Me pregunta entrando al baño mientras que termino de peinarme.—E
(Al día siguiente)No creía que este día llegaría, es más, la idea de casarme es algo que llegue incluso hasta descartar después de haber perdido a Sebastian, pero con lo que yo no contaba es con que la vida me daría una sorpresa como está —Te ves hermosa hija— Me halaga mi madre una vez que termina de ayudarme a cerrar todos los botones de es precioso vestido de novia que todavía no puedo creer que me quede tan bien. —Creo que voy a llorar…— Murmuro.—No llores, arruinaras el maquillaje— Bromea y me mira a través del reflejo del espejo.—Jamás pensé que podría llegar a sentirme así de feliz— Confieso con una enorme sonrisa tatuada en mi ros
Todo pareciera marchar con mucha prisa después de aquel “si acepto” que nos dijimos. De repente estábamos bailando el vals bajo la atenta mirada de los pocos invitados que había en nuestra boda. A los pocos minutos cortábamos el pastel, él quitaba mi liga para lanzarla y yo hice lo mismo con mi ramo, en resumen, todo aquello que nos tomo un largo tiempo planear sucedido rápidamente. Por una parte, nos hubiera encantado hacer de aquel momento uno eterno, pero tengo la sensación de que esto nos gusta mucho más… —Te amo esposa mía— Me dice mi esposo mientras que sus besos me van quitando la respiración de camino a nuestra cama en esta habitación de hotel.—Yo te amo más… no lo puedo creer, soy tu esposa— Murmuro entre risas nerviosas y vuelvo a be