Las cosas se empezaron a normalizar tras la caída de la familia Tards y curiosamente con su caída, se descubrió que Ramiro ya les debía muchos favores y dinero a otras familias, lo que significaba que no los habían atacado porque pensaban que los Albani los respaldarían y protegerían. Por su parte Diego, busco limpiar toda su oficina ya que al saber que habían infiltrados empezo a revisar los curriculums de todos los oficiales para descubrir a los espías de otras mafias e igual se divorció de Elena; aunque ella busco rogarle porque no lo hiciera, pero él se negó ya que estaba muy dolido con la traición que le hizo y ya sea la mafia, policías o gente normal, si ella hizo eso sin tener ningún remordimiento, nada garantizaba que no lo volviera a hacer solo porque algo no le parecía. Alessandro con la ayuda de Margot, se aseguraron de que Elena no le robara su herencia a Karen e igual recuperaron los documentos originales y la carta que le escribió a su nieta con su última voluntad. Po
Al día siguiente todos se enteraron de la proposición, donde las peliverdes estaban por quejarse porque no se incluyó a la familia en ese momento, pero al notar que ellos estaban felices, desistieron en sus intenciones de quejarse o tratar de hacer que repitieran ese momento con todos presentes. Con las heridas de Karen, el medico dejo un tiempo más de reposo por seguridad; algo que ambos rubios aceptaron por salud y después de unas semanas más, ahora el medico la estaba revisando para ver si su cuerpo ya habia sanado por completo. - Y bien, doc ¿cuál es el resultado? – pregunto Scott, quien cargaba a sus gemelos y los 3 veían al médico revisar a la rubia platinada. - Hehe espera – dijo mientras escuchaba los pulmones de ella – bueno, yo ya te veo bien, por ahora no busques cargar a los gemelos si estas de pie y como permaneciste casi un mes sin moverte caminaras con ayuda de un andador. - ¿Es necesario? – pregunto Karen haciendo una mueca. - Es por seguridad, ya que no sabemos có
Después de esa hermosa y peculiar fiesta improvisada, las cosas empezaron a ser movidas para la pareja de rubios. Comenzando porque Sara le anuncio a su abuelo que estaría una temporada con ellos ya que le ofrecieron trabajo de restauración de algunos monumentos históricos en el museo y ella buscaba pasar sus ratos libres jugando con los gemelos y platicar con Karen. La mansion termino de ser arreglada después de 6 meses, ya que además de la estructura, los Albani reforzaron toda la seguridad e implementaron la mejor tecnología de punta en toda la casa y el jardín, para evitar que esta volviera a ser destruida de esa forma tan sencilla. Por su parte, los gemelos se la pasaron a gusto con el bisabuelo y los tíos, aunque cuando llego la hora de ir a su nueva casa, la familia Fiore ya no quería dejarlos marchar porque se habían acostumbrado a ellos. - ¿Se deben ir? – pregunto Sara, quien cargaba al pequeño Johann. - Jeje sí, pero prometemos visitarlos los fines de semana – dijo Scott.
Las cosas en la mansion Albani habían cambiado para mejor, hasta los propios sirvientes estaban a gusto con la nueva señora de la casa, ya que Karen no los interrumpía a cada rato con algún capricho, un problema absurdo ni los molestaba por gusto. Samuel igual respiraba un aire de tranquilidad en casa, sentía una calma que no habia sentido desde que Elisa habia fallecido y le gustaba escuchar de vez en cuando la risa o el llanto de los gemelitos. Scott buscaba terminar rápido sus deberes diarios con el papeleo para ir a ver a Karen y a sus hijos, quienes ya tenían año y medio de edad y estaban en la tierna etapa de su vida donde buscaban dar sus primeros pasos, por lo que su habitación y en varios lugares de la mansion se colocó una alfombra muy suave para ellos, porque ya estaban empezando a gatear. - Jon, Eli papá ya está aquí – canturreo alegre Scott al llegar a la habitación de ellos y ver que sus hijos estaban sentaditos en el suelo rodeados por su ejército de peluches. - Pa –
Después de estar de acuerdo, se comenzó a ver los planes para la boda religiosa de los rubios y aunque ellos no sabían mucho sobre lo que se requería para celebrarla además de lo obvio. Lo curioso es que las noticias volaban rápido y al día siguiente Aiko y sus hijas estaban de visita en la casa para ayudarlo con la organización de la boda. - Hola hola – saludo risueña Chloe al entrar al cuarto de los gemelos quienes estaban sentaditos en sus sillas portabebés escuchando el cuento que su madre les estaba leyendo en esos momentos. - Ahh… - Aw… si ahh ya está aquí – dijo Chloe divertida sentándose en el suelo para quedar a su altura. - Hija, motívalos a que te llamen por tu nombre – dijo Aiko entrando a la habitación – buenas tardes Karen. - Buenas tardes – menciono ella dejando la lectura del cuento de caperucita roja para otra ocasión. - Ya nos enteramos por el abuelo – dijo Margot, quien entro detrás de su madre e imito a su hermanita para sentarse en el suelo y tomar con cuida
Tras un ligero interrogatorio, Damián consiguió los datos que el necesitaba y les dijo que regresaría al día siguiente con varias ideas y sugerencias para ellos, donde si les agradaba podían empezar de ahí para la organización. Samuel y Ricardo habían mirado desde lejos ese ligero interrogatorio, notando que en verdad ese sujeto era un profesional y solo hizo preguntas con respecto a sus gustos que tuvieran que ver con decoraciones para la fiesta. Tras despedirse del pelinegro, Aiko y sus hijas se quedaron para cenar en familia; aunque Margot y Chloe solo buscaban cargar y jugar con los gemelos con los juguetes de ellos. Al día siguiente, la casa estaba en calma, era medio día y Karen estaba jugando en la sala con sus hijos en compañía de Samuel, ya que Ricardo y Scott estaban en una junta de negocios. - Jeje ¿que tienes ahí? – le preguntaba Samuel al pequeño castaño, quien estaba sentado a su lado y le mostraba sus cubos de construcción. - Ah… - Eso es un cubo hijo – le dijo aca
Ignorando toda la felicidad y calma que se vivía en esos momentos, quien no la estaba pasando bien era Elena; habia pasado de tener todo a nada y todo por culpa de su hija, esa cosa que nació mal y se volvió en una molestia constante en su vida desde ese instante. Era la niña que en un futuro competiría con ella, ya que podía imaginarse como compararían su belleza con la de ella, por eso se dedicó a hacer que su pequeña se viera nada agraciada, buscaba esconder su existencia de sus amistades e igual ella se encargó de aislarla de todos, ya que hasta a la misma servidumbre amenazo con despedirlos si descubría a alguno consolando o hablando con esa niña. Todo estaba saliendo bien para Elena: Karen vivía en un infierno como debía ser, porque nació siendo mujer y ella era la única mujer importante en esa casa, pero ese triunfo no duro mucho ya que su esposo pasaba menos tiempo en la casa y con ella, a veces era rara la ocasión que fuera a dormir a casa, todo por culpa de la obsesión que
Damián le habia llamado a Scott para informarle que habia conseguido el viñedo y la iglesia; aunque el sacerdote quiso negarse al principio, pero al saber quiénes se casaban cambio de opinión rápidamente y solo le paso el formulario permitido para decorar la iglesia. Con los 2 puntos importantes resueltos, Damián agendo en primer punto importante: ver las ropas de ellos, empezando por la hermosa novia a quien llevaría de compras en compañía de los gemelos a la mejor boutique de la ciudad. Karen se habia sorprendido de la velocidad y eficiencia del pelinegro, aunque no estaba muy segura de querer ir, por lo que Damián pidió que cerraran la tienda para darles privacidad y llamo a unas amigas para apoyar a la rubia platinada. Cuando llego el gran día, Karen aún se miraba algo insegura, pero busco borrar esos miedos, repitiéndose a sí misma que no era débil y buscaría superar todo eso, ya que nada era como antes; aunque al bajar del auto y ver el gran edificio que era esa boutique se si