Tras un rato llegaron a su destino: una hermosa playa con arena blanca, algunas piedras y el agua cristalina; donde los mayores del grupo se bajaron primero y sacaron las cosas de la cajuela, Scott igual bajo, dejando que la brisa marina golpeara su cara. - Que recuerdos, hace mucho que no venía a ver el mar – indico con calma, en eso noto que la rubia platinada seguía en el auto y tenía los ojos cerrados, provocando que sonriera y con cuidado se acercara a ella – Karen, despierta ya llegamos – hablo buscando tocar el hombro de ella para moverla un poco, pero justo cuando esta por tocarla. - Vuelve a tocarme y esta vez si te arrestare para meterte en una jaula – indico Karen, quien se miraba de mal humor porque la habia despertado de su siesta. - Am… perdón es que pensé que te habías dormido. - Solo tenía los ojos cerrados, es todo. - Jeje de acuerdo – menciono divertido Scott, ya que a su vista ella en verdad se habia dormido un rato - ven vamos que tus padres, ya instalaron las
Era un nuevo día y se notaba que el clima era ideal para descansar y relajarse ya que el sol estaba presente, pero no quemaba tanto gracias a la presencia de algunas nubes, también habia una brisa fresca… en definitiva un hermoso día que no podía apreciar cierta peliverde, porque justamente en esos momentos estaba saliendo de una de las oficinas gubernamentales que era controlada en su mayoría por agentes de su familia. - Al fin… - hablo para sí misma mientras sonreía de lado - ahora solo necesito la firma de Karen y con eso tanto ella como los bebes llevaran de forma legal el apellido Albani – hablo en voz baja consigo misma, mientras caminaba hacia su auto deportivo color plata al mismo tiempo que buscaba estirarse ya que habia pasado toda la noche en vela arreglando esos papeles. Para Margot este tipo de tramites eran sencillos, aunque laboriosos y por eso ella era la experta de la familia cuando se trataba del papeleo civil o los tramites gubernamentales; eran complejos, pero no
En otro lugar a las afueras de la ciudad, se podía ver a Scott un poco ansioso ya que le habia avisado de último minuto a esa persona de que iría a verlo, porque deseaba pedirle de favor que les hiciera ese regalo especial a sus hijos, mientras sonreía y recordaba con cariño ese lugar; igual esperaba que en verdad él tuviera tiempo para recibirlos ya que era una persona muy ocupada porque sus servicios eran solicitados por casi todos los mafiosos, políticos, millonarios y artistas. Llego a una casa algo retirada de la ciudad, la cual en apariencia se miraba rustica y común: una pequeña casa, de dos plantas con un jardín amplio lleno de árboles de limón persa, una casa con una fachada de ladrillos de arcilla negra y laja en el exterior con algunas enredaderas cubriendo algunas partes de las paredes, de ventanas amplias donde se apreciaban unas cortinas blancas y un gran muro que protegía toda la propiedad. Al acercarse a la entrada fue interceptado por el guardia que vigilaba la entra
Regresando unas horas del tiempo podíamos ver a Margot y a Karen, en el vehículo de la primera rumbo a su casa. Tras haber salido de la casa de los Quissi, Margot le habia hasta rogado a Karen para que la acompañara, pero noto que ella se negaba porque no quería ir e igual no iría a algún lugar desconocido con ella, pero gracias a cierto problema logro meterla al auto y con ello se pusieron de camino a la segunda mansion de los Albani; aunque ahora la peliverde temía por su vida, ya que al mirar por el retrovisor podía ver la mirada de odio que le dedicaba la rubia platinada. Por su parte Karen solo se limita a observar los movimientos de la peliverde, mientras fruncia el ceño y recordaba con algo de molestia, como es que habia terminado en esa ridícula situacion. -------------------- Flash Back -------------------- Habia seguido a la peliverde hasta un automóvil, el cual estaba estacionado cerca de su casa y vio como ella se subía y prendía el vehículo. - Sube – le indico la peli
- Cierto, esta debe ser tu primera ceremonia del té – indico Chloe – ven es divertida, yo aun no domino eso de hacer el té, pero la señora Tanaka es una experta. - Eso es porque eres demasiado despistada – indico Margot con seguridad, mientras se sentaba en el tapete y le pedía el recipiente a la señora para empezar a preparar el té. - Hmm… entonces era verdad que Matsuno son yakusas y crearon una alianza con los Albani – opino Karen. - Aja, yo soy la hermana menor del actual líder – dijo con seguridad Aiko – y a pesar de estar aquí en Italia, mi esposo me permitió modificar esta habitación para tener algo de mi país natal – explico de forma calmada, mientras se sentaba en una mesa con varios postes y tazas vacías – ven siéntate. - ¿Porque la mesa? - Oh, sabes de estas cosas – hablo alegre la mayor de las peliverdes – bueno cariño, es que no queremos que mi sobrino nos mate si te obligamos a participar en la ceremonia del té de forma estricta ya que eso de estarse levantando del s
Los de seguridad se sorprendieron al reconocer su automóvil, por lo que lo dejaron pasar rápidamente sin cuestionar nada ya que notaban que por la mirada que tenía en esos momentos el rubio, lo mejor era no dirigirle la palabra por precaución. Scott estaciono su automóvil en la entrada de la casa, al lado del automóvil de Margot e ingreso al interior de la enorme mansión. - Decimo, buenas tardes – le saludo con respeto el mayordomo que le abrió la puerta. - Buenas tardes, ¿dónde están mis tíos? – pregunto de forma seria. - Los señores están en el salón del té – indico notando que, tras escuchar esa respuesta, el rubio se encamino a paso rápido a dicho lugar. Scott avanzaba a paso rápido por los pasillos y justo cuando estaba a unos metros de distancia de la habitación, escucho un fuerte estruendo seguido de algunos disparos; ante eso se asustó y preocupo demasiado por lo que corrió para llegar a la habitación, mientras imaginaba diversos escenarios peligrosos que podrían estar ocur
Por otra parte, en cierto automóvil se podía notar que el ambiente era algo incomodo, ya que Scott aún se sentía algo triste porque no probo del gelato y Karen se estaba regañando de forma mental porque igual estaba sufriendo por no haberlo probado. En ese momento Scott se encontraba manejando de regreso a la ciudad mientras suspiraba con tristeza. - Ya deja de hacer eso – le regaño Karen, ya que se estaba cansando de escuchar esos suspiros llenos de tristeza. - Pero… es que el gelato… - lloriqueo Scott – eres cruel, nos podíamos habernos quedado. - No. - ¿Por qué? - Porque no y ya deja de quejarte – indico ella frunciendo el ceño - o te arrestare. - No es justo, ¿porque tu si puedes comer dulces y yo no? - A mí no me gustan los dulces. - Mentirosa… - murmuro Scott. - ¿Qué dijiste? – le reclamo enojada la rubia platinada. - Lo que escuchast… ¡auch! - empezo a decir Scott, pero interrumpió su queja al recibir un golpe en su brazo cortesía de las esposas de la rubia platinada
Tras haber terminado la mini discusión y que cierto rubio perdiera ante la lógica de la chica, ahora se dirigían a un restaurante que eligió Karen para que cenaran tranquilamente, aunque se podía notar que Scott estaba de mal humor ya que él deseaba ir a un restaurante familiar a comprar una hamburguesa que trajera un juguete, porque era raro que el saliera a cenar fuera. - ¿Es aquí…? - pregunto algo molesto cuando aparcaron en un establecimiento que se notaba ligeramente vacío, ya que se podía apreciar a algunas personas en el interior – oye no parece un buen lugar mejor vamos a… - No iré a un lugar lleno de gente solo porque tú quieres un juguete – le regaño la rubia platinada, quien igual estaba molesta por tener esa discusión con un “adulto”. - … - Scott frunció el ceño ante ese regaño y estaba por quejarse, pero noto que ella ya se había bajado del vehículo y se encaminaba al interior del restaurante. El rubio solo dejo escapar un suspiro, antes de bajar, cerrar su vehículo y