Capítulo 164
Mariana se golpeó con fuerza el lugar donde el hombre la había tocado, con una mirada llena de desdén y furia. —¡No me sigas molestando, o te haré pagar caro!

Ya estaba de mal humor por el acoso que había sufrido, y ahora el hijo de Alfredo se atrevía a provocarla. ¡Él de verdad tenía ganas de morir!

¿La tomaba por un blanco fácil? ¿Alguien a quien cualquiera podía molestar y pisotear?

Sin embargo, justo cuando Mariana estaba a punto de irse, una voz masculina fuerte y resonante se escuchó desde fuera: —¡Ay, quién se cree tan atrevido para hacer que mi hijo quede mal!

Ella levantó la vista y vio que el recién llegado no era otro que Alfredo, lo que hizo que levantara una ceja.

Nefer Bustos, al ver a su padre, corrió hacia él como si hubiera encontrado a su salvador y se quejó con indignación: —¡Papá, es esta mujer! ¡Me hizo enojar! ¡Quiero que se muera, que desaparezca de Yacuanagua!

Mariana y Walter se miraron, como si estuvieran diciendo: ese tipo hablaba con mucha presunción.

Alfred
Continue lendo este livro gratuitamente
Digitalize o código para baixar o App

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explore e leia boas novelas gratuitamente
Acesso gratuito a um vasto número de boas novelas no aplicativo BueNovela. Baixe os livros que você gosta e leia em qualquer lugar e a qualquer hora.
Leia livros gratuitamente no aplicativo
Digitalize o código para ler no App