Un año después…. Había pasado un año después de todos los acontecimientos que surgieron a consecuencia de la muerte de Ivanita. Después de aquel encuentro en el que Betty había buscado a Iván, había surgido entre ellos el comienzo de una relación en dónde ambos se dieron la oportunidad de comenzar de cero dejando atrás todo el tormento que le había causado a Iván la muerte de su hija. La relación al principio se tornaba bastante prometedora ya que Betty tenía la mejor intención de que las cosas funcionaran entre ellos de la mejor manera, sin embargo, había algo que a ella la tenía bastante incómoda y era el hecho de que todavía Iván estaba casado legalmente con Rebeca a pesar de tener un año separado de ella. Eso al principio no había sido ningún obstáculo para comenzar a tener una relación con él, sin embargo, cuando sus padres se enteraron de que Iván era un hombre casado, inmediatamente su padre le puso un ultimátum a Betty advirtiéndole que tenía dos opciones, terminar definit
Rebeca y Sandra estaban contentas porque habían cobrado su quincena, era uno de los momentos que más disfrutaban, ya que ganaban muy buen sueldo, pero de la misma forma trabajaban duro durante todo el mes.Mientras se cambiaban en el vestidor Sandra se acercó a Rebeca diciéndole: —Qué bueno que hoy hemos salido temprano, ¿qué te parece si nos vamos de compras?— Rebeca le respondió con apatía: —si quieres ve tú, pero la verdad es que yo estoy demasiado cansada y lo que quiero es llegar a casa y acostarme a dormir temprano.—Por favor, Rebeca, no puedes seguir viviendo así, de la casa al trabajo y del trabajo a la casa, tienes que pensar un poco en ti. Mira lo cambiada que estás, ya es tiempo de que comiences a comprarte ropa y zapatos para que puedas lucir esa nueva figura. — le dijo mientras caminaba a su alrededor observándola . —Creo que ya es hora de que comiences a lucir totalmente diferente. Has hecho un sacrificio durante un año bajando de peso, y siempre estás vestida con ese
Al día siguiente, Rebeca se despertó con un ánimo excepcional. Al mirarse en el espejo, quedó fascinada por su nuevo aspecto. Era impresionante el cambio que había experimentado tras su visita al salón de belleza el día anterior.Este nuevo look le había devuelto la confianza en sí misma. Anteriormente, le resultaba difícil mirarse al espejo; sin embargo, ahora todo era diferente. Le costaba creer que la mujer que veía reflejada, tan hermosa y, sobre todo, feliz, fuera realmente ella.“Por más que me miro, no puedo creer que sea yo. Me veo tan diferente, ¡Dios mío! Gracias por darme este maravilloso regalo de verme como una mujer auténtica, atractiva, bonita y empoderada. Esto me hace sentir más segura de mí misma.”Rebeca eligió un conjunto juvenil que había adquirido con la ayuda de Sandra, quien la asesoró para que se viera realmente hermosa. Optó por un blazer y pantalón, combinados con una blusa por dentro, y unos elegantes zapatos de tacón alto. El color negro realzaba su figura
Ivan no salía de su asombro, era inexplicable ver a Rebeca tan cambiada, no dejaba de mirarla, estaba impactado no solamente con el cambio, si no con lo bella que se veía.—Y bien Iván, me gustaría saber a qué debo tu visita, porque no creo que hayas venido solamente a mirarme.—Rebeca yo..es que no termino de asimilar lo cambiada que estás, estoy sorprendido, discúlpame si te hago sentir incómoda.—Jajajaja —soltó una carcajada que dejó sorprendido a Iván. —¿Discúlpame? No me hagas reir, la que está sorprendida soy yo, porque jamás en el tiempo que estuvimos juntos me pediste disculpas por todos tus atropellos.Iván bajó la mirada, por primera vez se sentía avergonzado, porque efectivamente siempre había maltratado a Rebeca de la peor forma.—Pero ¿Por qué te quedas callado? No es común en ti, siempre te has caracterizado por gritar y vociferar todo lo que te da la gana, sin medir las consecuencias.—Rebeca yo…—No me expliques nada, la verdad es que ya no me interesa, lo único que qu
Diego Armando se encontraba en la clínica desde muy temprano, atendiendo a varios pacientes que había citado para primera hora de la mañana. Era un profesional comprometido con su labor, apasionado por su profesión y dedicado a ayudar a los demás.Desde la incorporación de Rebeca a su equipo de trabajo, ella se había convertido en su mano derecha, desempeñando su trabajo de manera excepcional, lo que le facilitó significativamente la operativa de la clínica.Rebeca, por su parte, estaba profundamente agradecida con Diego por todo lo que había hecho por ella. Gracias a su apoyo, había logrado alcanzar su peso ideal, lo que representaba una razón suficiente para sentir un gran agradecimiento hacia él.Aquella mañana él se había extrañado de que Rebeca no hubiera llegado, ella era muy puntual y comprometida con el horario, sin embargo, decidió comenzar a atender a sus pacientes.Llamaron a la puerta y Diego Armando enseguida dijo en voz alta:— ¡Adelante! — cuando se abrió la puerta entr
Después de una jornada de trabajo en donde Diego había estado bastante incómodo con la aparición de Iván, había llegado la hora del almuerzo y Rebeca estaba ya lista para salir a comer con Sandra como lo hacían todos los días.Ellas almorzaban en el cafetín de la clínica donde había un área especial para los empleados.— ¿Estás lista Rebeca? Porque yo estoy hambrienta. —le dijo Sandra mientras tomaba su bolso.— Sí, ya nada más guardo estos informes médicos de los pacientes de emergencia y podemos ir a almorzar.Cuando Rebeca terminó de guardar las historias en el archivo, justo en ese momento entró Diego Armando y se dirigió a Rebeca sonriendo:— Rebeca, quería saber si ya vas a almorzar.— Sí Diego Armando, solo guardo estas historias y me voy con Sandra al cafetín. ¿Por qué? ¿Necesitas algo?— Sí, es que me gustaría invitarte a almorzar, es que quiero que hablemos lo de tu divorcio. Tengo un amigo que puede ayudarte con ese asunto rápido.Rebeca se sorprendió, no se esperaba esa in
Rebeca y Diego Armando llegaron a la clínica muy contentos, conversando y sonriendo. Habían disfrutado de un tiempo juntos que les permitió conocerse mejor, estableciendo una conexión más profunda que la habitual. Diego Armando se sentía satisfecho en la compañía de Rebeca, descubriendo aspectos de su personalidad que no había notado antes, lo que lo hacía sentir que había tenido a alguien especial frente a él sin darse cuenta.Al ingresar al área de rehabilitación de pacientes, donde trabajaba Rebeca, Sandra estaba organizando el área de medicamentos. Al ver llegar a Rebeca y Diego Armando juntos y riendo, su expresión cambió y se sintió incómoda. Nunca imaginó que pudiera existir una química entre ellos, lo que la llevó a pensar que había facilitado en exceso la situación para Rebeca.— Hola, Sandra. ¿Cómo está todo por aquí? Lamento haber llegado tarde, se nos pasó la hora sin darnos cuenta — comentó Rebeca al colocar su bolso sobre el perchero y arreglarse un poco la ropa, sintién
Rebeca estaba extasiada sintiendo aquel beso apasionado de Diego Armando. Se sentía como si fuera la primera vez que un hombre la besaba, porque a decir verdad, con Iván jamás llegó a sentir este tipo de emociones, por mucho que había estado enamorada de él. Su corazón latía cada vez más fuerte, pero lo más maravilloso que sintió Rebeca en ese momento no fue solo el sinnúmero de emociones que la hacían estremecer al sentir ese beso que la hacía sentirse deseada, sino saber que Diego Armando también se estremecía al besarla y que su corazón latía tan fuerte como el de ella. Esa experiencia era única, porque jamás pudo percibir esa emoción por parte de Iván.Cuando él terminó de besarla, la miró a los ojos y le dijo:— Rebeca, jamás pensé que podría sentir algo así de nuevo. Aunque para serte honesto, esto es mucho más intenso que lo que llegué a sentir anteriormente por alguien. Me siento totalmente feliz a tu lado.Ella tenía los ojos llenos de lágrimas de emoción, experimentando un s