Capítulo 27. Inicio de la reconciliación Ivanna Linares FloresGuanajuato, MéxicoLlegamos a un hotel hermoso en Guanajuato, bajamos todos del auto para registrarnos en la recepción y nos entregaron las llaves de la suite que habíamos reservado Axel y yo. Todos tomamos nuestro ligero equipaje y nos subimos en el ascensor para ir a nuestras respectivas suites. Cris me sorprendió dejando todo en el piso del ascensor y tomándome en sus brazos delante de Axel y de Amaia, algo que me tomó mucho por sorpresa.–No puedo creer que mi querida amiga está demasiado nerviosa – Dijo Axel – Quién te viera güera.Cris me había sorprendido totalmente, estaba contenta, me encantaba que él con sus gestos y ternura me hiciera una mujer muy feliz, puesto que yo no era de este tipo de demostraciones públicas y mis amigos lo saben.–Ellos se ven hermosos, así como están – Dijo Amaia – Juntos y enamorados. Tu güera, necesitabas a alguien como Cris para que derritiera el hielo que te rodea.Me causó mucha r
Capítulo 28. Llevando la iniciativaIvanna Linares FloresGuanajuato, MéxicoMe encantaba lo que me hace sentir, no niego que he experimentado muchas cosas con otros hombres, pero con Cris es muy diferente, me hacía sentir única, amada y protegida, lo que había estado buscando sin habérmelo propuesto.–Mi amor, Ivanna – Me dijo Cris – Quiero hacerte mía, no puedo esperar hasta que sea de noche.Estaba pensando lo mismo que él, que no iba a poder esperar hasta la noche, que debíamos amarnos ahora mismo, no hay tiempo que esperar, además estoy segura de que a Axel y a Amaia, les está pasando lo mismo, creo que llegamos a inaugurar las habitaciones.–Ni yo tampoco quiero esperar tanto tiempo, mi amor – Le susurré – Me encantas, Cris.Abracé a Cris y lo besé intensamente y después ambos por la urgencia que nos estaba consumiendo, nos despojamos cada una de las prendas de ropa que nos estaban cubriendo, nos urgía estar el uno con el otro y yo no recuerdo haberme sentido así, desde hace muc
Capítulo 29. Un buen comienzoCristóbal Mendoza RamírezGuanajuato, MéxicoEstaba feliz por la entrega que acabábamos de tener Ivanna y yo, había sido por demás maravillosa y yo sentía que tocaba el cielo, al despertar abrazándola como lo quise hacer desde la primera vez que nos entregamos al amor y que no fue posible porque mi novia no lo había querido así. Pensé que ella estaría dormida y me concentré en aspirar el delicioso aroma de su cabello y ella, al sentir mi respiración, se giró y me dio un apasionado beso en los labios.–Cris, eso estuvo maravilloso, tanto así que nunca duermo de día y dormí como un bebé – Ivanna me miraba con sus ojos encantadores – Pero, nos tenemos que levantar para salir a recorrer y vernos con Amaia y con Axel.Me encontraba viviendo en un sueño, esta hermosa mujer me hacía muy feliz, la amo como nunca he amado a ninguna otra persona, estaba totalmente rendido a sus pies, y ella era a la que quería complacer en lo que me pidiera, estoy dispuesto a sus ó
Capítulo 30. Un total martirioCristóbal Mendoza RamírezGuanajuato, MéxicoEstaba muy emocionado de poder hacer estos viajes con mi novia, nunca me hubiera imaginado que me iba a encontrar con el amor de mi vida en la pasantía y que esta era mi jefa. No cabe duda que el destino tiene una forma muy atinada de actuar, ahora estoy a su lado y sé que vamos a ser muy felices.–Tampoco es que sea tan grande – Dijo Axel – Así que tiempo tenemos, vamos.–Vamos, chicos.Entramos al recorrido de las momias y a mí en lo personal algunas me dieron un poco de miedo, Amaia estaba igual que yo porque en ningún momento soltó a Axel de la mano y lo que me agradó es que Ivanna tampoco hizo ningún intento por soltarme a mí y eso me gustaba que mi novia quisiera estar conmigo. Eso lo valoraba demasiado.–De aquí podemos ir a la Alhóndiga y después al teatro Juárez – Sugirió Axel – Ya que está en el centro, ahí podemos ver dónde podemos comer.Desde luego que estaba de acuerdo con su itinerario, esos pun
Capítulo 31. Bello durmienteIvanna Linares FloresLeón, Guanajuato, MéxicoCris había caído rendido después de la caminada que dimos y más aún porque se había lastimado los pies trayendo puestos los duros zapatos de vestir, aun cuando a este tipo de viajes se viene con zapatos deportivos para más comodidad. Me quedé mirándolo hipnotizada, como si fuera el primer novio que he tenido y en cierta forma sí que era la primera relación que se podía definir como es.Él tenía todo lo que me gustaba mucho en alguien y mientras lo miraba dormir, él se despertó un poco sobresaltado, creo que con mi escrutinio lo desperté de su sueño profundo, me había quedado hipnotizada viendo lo lindo que se veía.–Hola, amor – Me dijo más dormido que despierto – Lo siento, Ivanna. No me quería dormir, te lo juro que no.No había de que disculparse, si se había cansado más que los demás, le había afectado mucho el haber traído ese tipo de zapatos y lo había dejado descansar, no había sido su culpa al quedarse
Capítulo 32. Nada de demostraciones Ivanna Linares FloresLeón, Guanajuato, MéxicoLo abracé rápidamente para ocultar un poco mi incomodidad, no soy mucho de las que nos gusten las flores, ni tampoco estar melosa con nadie. Ese para nada era mi estilo y no me interesaba tampoco y ahora Cris se estaba atreviendo a ser más meloso conmigo porque veía como andaban Axel y Amaia y yo, quería parar esto y lo iba a hacer. Bajamos las escaleras de la Universidad y nos dimos cita para cenar en un hermoso restaurante.Nos sentamos en una mesa y Axel y Amaia seguían en lo suyo, pero cuando Cris tomó mi mano más de una vez para besarla, lo solté bruscamente y él se sintió mal, me molestaba que fuera de esa forma, no había la necesidad de estar encima de mi todo el tiempo, que dejara que Axel se portara así con Amaia, yo tengo mi forma de ser y melosa no era una de las formas de actuar de mi parte.–Lo siento, voy a tomar aire – Dijo Cris – Con permiso.Él, ya a estas alturas, ha debido intuir que
Capítulo 33. Un susto de muerteCristóbal Mendoza RamírezLeón, Guanajuato, MéxicoLas cosas no resultaron bien en el paseo de la mina y sobra decir que me llevé el susto de mi vida. Estando ahí abajo, Ivanna se desvaneció y por poco se golpeaba la cabeza en una de las paredes de la mina y lo que era peor, que mientras yo sostenía en mis brazos a mi novia, Axel, no podía ni ayudarme para nada, pues Amaia se desmayó al igual que Ivanna y ahora sí, que cada uno tenía que atender a su chica.–Cris, voy a sacar a Amaia de la mina y una vez que salgamos nosotros, pido que alguien baje a ayudarte o ¿Puedes sacar a Ivanna en brazos? – Me preguntó Axel, con tranquilidad – Eso sería lo mejor.Alguien tendría que venir a ayudarnos, no iba a poder con Ivanna, es demasiado trayecto lo que hemos recorrido, que venga una brigada de rescate para que nos saque a los dos, él que se llevara a Amaia antes de que a ella le pasara algo, pues se desmayó al ver a Ivanna así.–No, Axel, no podría cargarla to
Capítulo 34. Mala experienciaCristóbal Mendoza RamírezLeón, Guanajuato, MéxicoTomé de las manos a Ivanna para que se pudiera poner de pie, todavía la notaba desmejorada, no voy a dejar de recriminarme, ella no debió por nada del mundo haber bajado a la cueva o más bien hacer el intento de bajar a explorar con nosotros.–Cris, no se preocupen – Respondió la güera – No debí entrar aquí, sabiendo lo que me ocurre en lugares encerrados.Es correcto lo que acaba de decir, pero principalmente yo no debía dejar que eso ocurriera, ella es mi novia, mi responsabilidad, es cuidarla y proteger su integridad aunque ella se hubiera aferrado a bajar, pero estoy seguro de que esta escena no la va a vivir de nuevo estando conmigo.–Güera, ¿Cómo te sientes? – Preguntó Axel – Si te sigues sintiendo mal, esperamos un poco.Axel tenía razón, pero entre más tiempo pasáramos ahí, yo me inquietaba más de que le volviera a pasar, Ivanna sé que va a querer salir lo antes posible, ya voy conociendo a mi nov