SE DIO CUENTA DE QUE TE ESTA PERDIENDO.

Después de cortar la llamada con Roger y por supuesto bloquear su número, decide ir hacia la cocina, imposible volver a conciliar el sueño después de la tremenda metida de pata que acaba de hacer...

¿Cómo le iba a decir a ese cucaracho que estaba de novia con Daniel? Su archienemigo, su nemesis, algo que jamás podría ocurrir...

¿Y si realmente se le ocurre venir a la boda? ¿Y si se entera de que le mintió? Dios mio, sentiría la peor humillación de su vida.

Sarah llega a la cocina, a pesar de que hacia años que no visitaba la casa, la conoce de memoria. Se acerca a la nevera y saca un jarrito con leche, su abuela siempre le preparaba leche caliente cuando no podía dormir y realmente surtía efecto.

-¿Podrías calentar un poco de leche para mi? -pregunta una voz a sus espaldas, algo que la sobresalta y arroja el jarro al suelo, haciendo un tremendo ruido, por suerte las habitaciones están lejos de la cocina, si no hubiese despertado a toda la casa-perdona, Sarah, no quise asustarte -exclama Daniel, llevando solamente un pantalón de joggins, con su torso completamente desnudo, y su cabello revuelto, algo que la avergüenza, por suerte están en la oscuridad y no puede ver sus mejillas seguramente encendidas de calor. ¿Quien es este adonis del Olimpo? ¿Qué hizo con el anterior Daniel, el de su adolescencia? Wow... Realmente se siente muy extraña y excitada frente a él, pero debe controlar sus impulsos o el podria darse cuenta.

-No te preocupes, fui yo la tonta, estaba concentrada en otra cosa -Sarah se agacha al suelo a tomar el jarro y Daniel busca un paño para limpiar la leche derramada. Luego se acerca a la nevera y le entrega el cartón de leche a Sarah-gracias, pondré un poco más para ti.

-¿Estas bien?-pregunta algo preocupado, no es normal verla tan apagada.

-Si, no es nada interesante -ambos se sientan en la isla, esperando a que la leche se caliente.

-Para que estés con esa cara y no puedas dormir, seguro que debe ser muy interesante -Sarah busca algún rastro de burla en su voz y en su semblante pero no la encuentra, al contrario, está serio, como si estuviera esperando que se abriera con él.

-Es que... Es Roger -no puede seguir, un nudo en la garganta amenaza con hacerla llorar y no quiere humillarse frente a Daniel.

-¿Qué sucede con él? -pregunta confundido.

-Me llamo... Para decirme que me extrañaba, es un...

-Miserable, malnacido, dilo sacalo de adentro, ¿y como le dice Emily?

-Cucaracho...

-Es el apodo ideal para él, es un Cucaracho y hay que aplastarlo como tal... No permitas que te envuelva con palabras bonitas, Sarah... Ese hombre no vale la pena-Por alguna razón, siente que Daniel habla como enojado, como si realmente se sintiera triste por el dolor de Sarah, seguro es su imaginación.

-No lo haré, Daniel... Pretende que pase de ser la oficial a su amante... Y por más que lo ame, no puedo permitirlo, mi amor propio, no me lo permite.

-Me alegra escuchar eso, una mujer que se respeta vale mucho, te felicito, Sarah.

Segundos después, Daniel va hacia la cocina, apaga el fuego y sirve un vaso de leche para cada uno y vuelve a sentarse junto a Sarah.

-Gracias, Daniel.

-Lo que no entiendo es... ¿Por que estas tan preocupada? No es que ese tipo venga a aparecerse por aquí ¿verdad?-pregunta confundido.

-Es que... Metí la pata y hasta el fondo-exclama avergonzada.

-¿Qué fue lo que hiciste?

-Para alejarlo de mi, y pedirle que no me llame más... Le dije que estaba saliendo con alguien-Manifiesta Sarah llevándose las manos al rostro, intentando disimular su vergüenza y sus nervios.

-Esta bien, demuéstrale a ese cucaracho que no es indispensable en tu vida.

-El problema es que... Le dije que estaba saliendo contigo -confiesa sin poder disimular su vergüenza -lo siento... Juro que fue lo primero que se me vino a la cabeza, estaba dormida, me sorprendió -explica, al ver que Daniel no reacciona frente a la confesión.

-Tranquila, Sarah -exclama segundos después -no es que el venga por aquí, no sabe donde estas.

-Eso es lo peor... -Sarah ya no sabe como disimular sus nervios tiene ganas de llorar -haciéndome la valiente le dije donde estaba y que estaba invitado a la boda, estaba segura de que él no vendría, antes jamás se habría subido a un avión por mi, por eso no me imagine que ahora lo haría.

-¿Eres tonta verdad? ¿No ves que se dio cuenta de que te perdió y va a hacer lo imposible por recuperarte?

-¿Estas enojado? Perdóname, no quería involucrarte en esto...

-Tranquila, veremos como lo podemos solucionar... Pero te aseguro que Roger Morgan estará aquí en dos días...

-¿Tu crees? -pregunta consternada.

-Por supuesto que lo creo, solo un imbecil te dejaría ir -Sarah abre los ojos más que sorprendida, no puede creer lo que acaba de escuchar de la boca de Daniel...

-Daniel...yo...-Sarah debe haberse vuelto completamente loca, porque, dejándose llevar por un impulso se acerca a él y comienza a recorrer con sus manos el torso de Daniel, pero él rápidamente la quita-lo siento... Fui una estúpida, no se que me paso...-exclama muy avergonzada, con sus mejillas encendidas. Daniel se pone demasiado cerca de ella, haciendo que su corazón comience a latir con fuerzas.

-No vuelvas a hacerlo, Sarah, nunca más... Oh te juro que no respondo de mi -le confiesa en el oído, en un susurro, dejándola anonadada.

-¿Qué dijiste? -pregunta sorprendida, seguro escucho mal. Daniel jamás podría decir algo así.

-Olvidalo...-bebe de un solo sorbo la leche y deja la taza en la bacha para luego retirarse, sin antes decirle-mañana a las ocho iremos con Emily a ver la vajilla para la ceremonia, espero que puedas levantarte.

-Lo haré, gracias por escucharme... -pero no recibió respuesta alguna.

Durante varios minutos se queda allí, pensativa, mirando a la nada misma... ¿Qué rayos está pasando aquí? ¿Fue solo ella la que sintió esa tensión sexual entre ambos? ¿A que se refirió con que Roger había sido un imbecil en dejarla ir? Se está volviendo loca, había venido a la cocina para tener un poco más de claridad en sus pensamientos y sucedió todo lo contrario, sino puede sacarse la imagen de Daniel con su torso desnudo, de su cabeza, y el tacto de su piel de sus dedos, será imposible dormir, a menos que se tome una ducha bien fría.

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Hola mis queridos lectores, se está poniendo picante la cosa entre los dos... ¿Qué piensan que pasará? Se dejaran llevar por esa tension sexual qué existe entre ellos?

Les mando un beso grande ❤️❤️ no se olviden de seguirme en mis redes sociales.

Y de ponerle me gusta a esta historia, muchas gracias por su apuro ❤️❤️