Cap. 15 Chica en llamas
Bertino recibió el impacto y cayó al suelo a varios metros. Rowena estaba impresionada por la reacción de Boris.

—¿Qué te pasa?

—No te acerques a ella.

—Boris, por favor.

Anabel miraba la escena impresionada.

—Ella es mía.

Bertino, molesto, se levantó del piso y le dijo molesto.

—¿Eso piensas?

—Es lo que te digo, debes de aprender a respetar lo que no te pertenece.

—Eres muy volátil, no quiero ser como tú —se sacudió—. No soy un animal que lucha por una presa.

Rowena les dijo entonces.

—Cálmense, la señora Keller los puede ver y molestarse por sus acciones.

Anabel tomó del brazo a su hermano.

—Tranquilo, Boris, ya entendió el mensaje.

Lo jaló hacia el interior de la casa y Bertino hizo una mueca, menudo legado le dejó su madre.

**

Anabel le dijo preocupada a su iracundo hermano.

—Debes de controlarte, no es bueno que demuestres debilidad por una mujer.

—Ella es mía.

—Lo sé, lo sé, no puedes atacar a todos los de la manada.

—Él no lo es —dijo con rabia.

—Lo será, lo será.

Enrietta bajó
La Pluma

Dios, qué situación, o sea, una persona murió asesinada y Rowena en medio de todo eso.

| Me gusta
Sigue leyendo este libro gratis
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Explora y lee buenas novelas sin costo
Miles de novelas gratis en BueNovela. ¡Descarga y lee en cualquier momento!
Lee libros gratis en la app
Escanea el código para leer en la APP