El lugar estaba abarrotado por los amigos de Arya y Ayden. Era la última reunión antes de las bodas.
El diez de enero era la tan afamada boda del abogado famoso Daniel Cheng con su prometida Cathy Nichols. Era un evento muy conocido, ya que él era hijo de uno de los mejores abogados de la gran manzana y su fama le precedía. Daniel no quería vivir bajo la sombra de su padre, por eso, y gracias a la ayuda de su amigo, al regalarle una propiedad en Nueva York podrá fundar su propio despacho legal.
Al inicio su padre no estaba de acuerdo, sin embargo, todos sabían que era su hermano Jimmy Cheng, quien se quedaría con el legado que su padre había construido para ellos.
Para Daniel Cheng eso estaba bien. Quería crear algo por si solo. Lejos del yugo de su padre y hermano. Además, estaba el hecho que no se decía, pero que toda su familia pensaba, ¿cómo es posible que se ca
Los días habían pasado. La boda de Diego y Cathy estaba en ciernes. Ya no hubo ningún avistamiento de drones sobrevolando el lugar y Arya estaba desesperada por volver a trabajar.—Ya mañana debemos presentarnos en el hospital —anuncia Arya a Ayden—. Robín y yo queremos ir al departamento a buscar nuestras pertenencias si no te importa.—Claro, nosotros los acompañamos —anuncia Ayden poniéndose de pie desde el sofá—. ¡Aryehn, vamos con mamá! —llama a su hijo quien jugaba con unos legos.—¡¿Al parque?! —pregunta este emocionado.Ahí es dónde Arya se percata que tienen días que no salen de la propiedad.—¿Te gustaría ir? —pregunta Arya.—¡Sí, sí, sí! —dice el niño dando saltitos emocionados.Ayden mira de mala g
Todo estaba listo para la boda. Olivia había aceptado acompañarlos para cuidar de Aryehn, en dado caso de que quisieran bailar.La ceremonia fue en una antigua iglesia, de dónde la familia de Daniel era miembro y la cual estuvo preciosa. Ayden se mantuvo de pie todo el tiempo junto a Daniel, ya que era su padrino de honor. Cathy había elegido a una de sus amigas como su madrina, tanto ella como Ayden tuvieron que salir juntos de la iglesia luego de la ceremonia religiosa.Arya se pudo dar cuenta que la mujer, amiga de Cathy, se sentía cohibida de tener a un hombre tan apuesto a su lado. Y no es para menos, Ayden es guapísimo por dónde lo mires, aunque Arya no se enamoró precisamente por eso. En parte sí, obviamente. Es imposible ignorar su hermosa masculinidad.Sebas y Bea habían permanecido junto a Arya todo el tiempo. Robín estaba junto a Olivia y el pequeño Aryehn, a quien ya había adoptado como su sobrino.El traslado al Plaza Hotel estuvo a cargo de John y los guardaespaldas. Los
La boda estaba en su apogeo cuando decidieron marcharse. Aryehn se había dormido y Ayden se sentía cansado. A pesar de que la boda era hermosa, él debía seguir con sus planes para el día siguiente.—Robín volverá a casa con Sebas y Bea. Dejarán a Olivia de paso en su casa —informa Arya tomada del brazo de su amado—. Podemos volver sin preocupaciones.Ambos fueron trasladados por John a la casa de los Emory. Al llegar, recostaron al pequeño en su recámara y ellos se fueron a la de Ayden.—Si te parece, me gustaría dormir con el niño, así no te hago sentir incómodo —declara ella preocupada por Ayden.—Estos días has sido evasiva… ya comencé a ir a terapia —informa él con la expectativa de que pronto puedan estar juntos—. Si gustas podemos dormir abrazados… Yo sin playera.—¡Que ofertón! Me quedo entonces —responde animada haciendo reír a Ayden.—Bien, eso es genial, de haber sabido te hago ofertas toda la semana —refiere abrazándola—. Hoy te ves más preciosa de lo usual.Arya sonríe y
Arya no podía creer lo que oía de los labios de Ayden. Su madrastra había abusado de él por un largo tiempo sin que su padre siquiera se diera cuenta de lo que sucedía bajo sus narices. Ella se siente impotente por él. Le duele que un niño haya tenido que pasar por eso.Sin embargo, las preguntas cruzan por su mente… ¿Cómo logró someterlo cuando fue adolescente?, ¿su madrastra le habrá hecho lo mismo a Mark?Su corazón se conmueve por ambos.Ayden le relata como es que comenzaron las cosas. Nota mental, ahora siente desconfianza de dejar a su hijo con cualquiera.—¿Intentaste decírselo a tu padre? —pregunta ella mientras lo toma de las manos.Ambos yacen sentados sobre la cama. La líbido se ha ido por la ventana y ahora solo quedan las confesiones.—Sí, cuando recién comenzó… que
Ayden había decidido ignorar completamente a su hermano. No quería gastar sus energías en andar rogándole para que se uniera a su cruzada de mantenerlos a todos a salvo. Mark siempre fue un maldito con él.No había querido contarle nada a Arya sobre lo que pasó entre ambos cuando eran niños. Ya suficientes traumas tenía con lo que había pasado con su madrastra y le pesaba que Arya se hiciera un pésimo concepto de Mark por ello.En muchas ocasiones él le había pedido que se mantuviera alejada de Mark, pero era casi imposible. Ella le había tomado una especie de cariño que él no lograba comprender, respetaba eso hasta cierto punto, porque sabía que su medio hermano había sido mal influenciado por su difunta madre. Se sentía con paz mientras no intimaran demasiado, o mejor dicho, más de lo normal.Arya y Robín se h
Arya terminó su turno junto a Robín y ambos fueron trasladados a casa de Ayden inmediatamente. Arya quería llegar dónde su pequeño, lo extrañaba. Su guardaespaldas, Harry Staton, iba delante del todoterreno y de conductor iba otro de los guardaespaldas.—Harry, vamos a la panadería que está cerca de la casa de Ayden —pide Arya.—Señora, el señor Emory, ha pedido explícitamente que la llevemos directo a la compañía —anuncia Harry.—¿Qué? Él no me ha dicho nada —refiere ella molesta porque él no le dijo directamente y revisa el teléfono para comprobar que no le haya llamado o dejado un mensaje.Harry no responde nada, no quiere meterse en problemas y ella se da cuenta de que, efectivamente, Ayden no le dijo nada.—Tendré que llamar a Olivia.Arya saca su teléfono y
Cuando Arya subió al todoterreno inmediatamente Robín comenzó a interrogarla.—¿Ya me dirás que pasó?, ¿o me seguirás manteniendo en ascuas? —inquiere con ansiedad su amigo.—En la casa te digo —advierte Arya señalando a los guardaespaldas. Ella no sabe que tanto saben o no saben ellos.La idea de que alguien la está siguiendo es escalofriante.Si bien, Ayden dice que Jeff no es el culpable, ella no puede pensar en nadie más que no sea él. Tampoco quiere hacerse ideas en la cabeza, pero a su vez no quiere vivir preocupada, suponiendo en sí es o no su hermano.—Harry, llévanos a Rikers —informa Arya a su guardaespaldas.—¡¿A Rikers?! —inquiere Robín asustado.—Tengo que informarle al señor Emory antes —dice Harry
—De acuerdo, yo te haré saber todo lo que sepa —dice Jeff por su honor.—Gracias, tenemos que irnos —se pone de pie y Robín la sigue.—¿Quién eres? —pregunta Jeff con curiosidad al mirar al amigo de su hermana.Puede notar el temor en su mirada y en su semblante.—Es mi amigo, es como otro hermano para mi Jeff —revela Arya y aunque Robín siente orgullo en esas palabras, Jeff entiende que él no fue un mejor hermano para ella—. Es mi colega, Robín Evans.—Mucho gusto, Jeff —saluda Robín, no olvidando la cortesía.—El gusto es mío, me alegra saber que mi hermanita tiene a alguien que cuide de ella afuera. Ella solía ser muy ingenua, por lo que he visto eso ha quedado en el pasado —explica Jeff reconociendo las agallas que tiene su hermana últimamente.No es la misma que é