Capítulo 2.
Absurdo.Tiempo atrás…Bruno.Estoy cansado de hacer todo lo que mis padres desean, desde pequeño nunca tuve la opción de decidir, pero esta vez no dejaría que nadie interceda en mis planes. No fui a la reunión de accionistas, eso sería un completo desastre del que deseo huir.—¿A dónde crees que vas con esa maleta?. —Mi hermano mayor Raúl siempre tenía que meterse en absolutamente todo.—Estoy harto de ser un clon de nuestro padre, no me gusta el rubro de los supermercados , y tampoco la cadena de hoteles. —Mi padre tenía pensado instruirme a fin de convertirme en gerente del primer negocio. Ya me obligó a estudiar finanzas, he cumplido con ello pero ya no más.—¡Eres un tonto Bruno!, no tienes ni idea de lo que significa vivir allá afuera, la vida no es fácil. —Sonrío con ironía—¿Lo dices porque viviste con tu madre en la miseria por más de diez años hasta que nuestro padre decidió hacerse cargo de ti?. —Raul es mi medio hermano, el primer hijo del entonces único heredero Harper, no planeaba hacerlo sentir mal, pero su papel de hermano mayor y consejos sobre lo que significa vivir sin lujos, ya los conocía de memoria, el suspira ante mis palabras. — Discúlpame, no quise…—Definitivamente no sabes nada, pero rogarás volver, esta no es la manera de alcanzar tus sueños, abandonando todo. ¿Y tu madre?, por lo que veo también planeas ignorarla. —Mi madre es una mujer sensible, sin embargo mientras no me apoye, mis opciones eran escasas.—Estoy dispuesto a afrontar lo que fuese, además Jimena me acompañará. —Raúl hace gestos con su rostro dándose por vencido.—De acuerdo, si es tu última palabra puedes marcharte, no recibirás ayuda alguna, nuestro padre fue muy claro, Bruno. —En verdad me quedé sin una sola moneda en los bolsillos, no tuve tiempo de quitar algo de dinero de una tarjeta, cuando lo intenté fue demasiado tarde.“Bloqueadas”. tan solo sonreí y llamé a Jimena, sabía que no me abandonaría, es mi novia desde hace más de dos años, la amo como no amaría a nadie más jamás, llegué hasta su departamento, pero la vi vestida informal, no estaba preparada como para partir junto a mi. Bajo mis maletas y me acerco para darle un beso en sus hermosos labios, ella apenas y me corresponde, sospeché que algo andaba mal.—Bruno, necesitamos hablar. —No dejó que pasara a su departamento, ella salió y nos quedamos allí frente a su puerta, reconocía esa expresión en su rostro, me daría malas noticias. —Pensé que estarías lista para irnos. —Ella apenas levanta su rostro para mirarme, ya conocía la respuesta, aunque mi corazón comenzó a darse cuenta de inmediato.—Acerca de ello, lo siento mucho Bruno, lo he pensado y no podré ir contigo, lo mejor es que ambos tomamos caminos separados a partir de ahora, yo ni siquiera se hervir agua, además planeo seguir estudiando. —Una risa amarga escapa de mi haciéndola guardar silencio.—Se supone que ambos trabajaríamos, solo necesitaré a un inversionista cuando mi proyecto esté finalizado, no sé cuanto tiempo dure, yo te amo Jimena. ¿Acaso no sientes lo mismo?. —Soy un hombre quien no derrama ni una sola lágrima, aunque por dentro esté rompiéndome en mil pedazos.—Bruno, te amo; simplemente lo que me pides es demasiado. No podré aguantar nada de eso, además mírate, ni siquiera tienes tu auto contigo. Puedes volver a tu casa, estoy segura que podrán disculparte. —Jimena toma mis manos, de inmediato la suelto, comprendí que con ella sería imposible, tal vez arrastrarla conmigo no fue buena idea, sería egoísta de mi parte.—Supongo que no me amas tanto como yo te amo a ti, triunfaré Jimena; te lo demostraré. —Ella no fue tras de mi, tampoco dudo un solo segundo, ahora con más razón triunfaría y volvería por ella para darle la vida que merece, ahora estaba completamente solo, recordé que el chofer de mi familia había mencionado una ciudad en donde podría encontrar departamentos baratos.Mi hermano mayor podría ser una copia exacta de mi padre, pero agradecí que haya dejado dinero en mi mochila, busqué la ubicación de esa ciudad, quedaba a unos cincuenta kilómetros de la capital del país, relativamente cerca. Menos mal el invierno no es tan duro en Paraguay, pude llegar cerca de las cuatro de la tarde, pero no encontraba ningún hospedaje disponible. Ni siquiera transcurrió un solo día y sentía desfallecer, mientras más caminaba, la zona me causaba incomodidad, pareciera que alguien vendría con un cuchillo para asaltarme, y no me equivoqué, escuche los gritos de una mujer, dudé en ir…«¡Por favor!, no puede hacerlo. ¡Que alguien me ayude!» — Esos gritos retumbaban en mi cabeza, retrocedí y fui a ver lo que sucedía. Un hombre sostenía con violencia a una mujer, a simple vista pareciera que intentaba abusar de ella, sería absurdo recordar de donde me armé de valor, cuando dimensione la situación, ya golpee al hombre, él respondió dándome un golpe fuerte en el rostro; entonces volví a golpearlo, para mi buena fortuna cayó al suelo, tomé de la mano a la joven y salimos corriendo, nos escondimos un momento hasta ya no visualizar al abusador.—Gra… gracias. —La joven respiraba agitada sosteniendo algo con fuerza. ——Ahora debes ir a denunciarlo, si intentó propasarse contigo, lo haría con cualquier otra mujer. —Acomodo mi abrigo a fin de caminar en mi incansable pero aburrida búsqueda.—No iré, ese hombre no quiso hacerme daño, pero estuvo a punto de matar a este pequeñito, es un cobarde idiota. —Ella sostenía con fuerza a una pequeña alimaña apenas visible.«Un perro…» ¿Un perro?, es imposible. —Arriesgue mi propia vida por ese asqueroso animal.—¿Todo ese drama por esa cosa?. ¡Acaso no ves cómo está mi rostro!. —Ella se quedó en silencio observando con lástima el moretón cerca de mi boca.—Es que él iba a lastimarlo lo he visto hacer este tipo de cosas con otros animales porque simplemente no los quiere, es un desalmado, no dejaría que eso ocurriera, y lo peor de todo es que aunque lo denuncie, nadie hace nada. Gracias. —Su explicación sencillamente me causó enfado.«No puedo echarme para atrás bajo ninguna circunstancia, aunque tal vez esto sea una señal bastante obvia»—Te pusiste a gritar como si tu vida hubiese estado en peligro. ¡Mi día no puede ser peor!. —Cuando fui a ayudar a esta mujer loca, tomaron mi maleta, apenas traía conmigo una mochila con unas cuantas cosas en ella. — Esto me pasa por ayudar a desconocidos en un barrio como este.—Lo siento, no sabía qué hacer, y comencé a gritar, si no llegabas el final hubiese sido diferente para este pequeño. —Doy un largo suspiro de autocompasión, este camino comenzó siendo un completo desastre, tal vez se trataba de una señal del destino.—¡Pues deja de intentar salvar al mundo!, ¡Maldición!, por si no te has dado cuenta, porque fui a ayudarte me robaron, ahora está anocheciendo y no he encontrado ningún lugar en donde quedarme. Traes mala suerte. —En ese instante me pongo de pie y camino en dirección a mi objetivo inicial.—Puedo ayudarte, hacia esta zona no encontrarás hospedaje, es mejor que vayas en la otra dirección. —Me señala el lado contrario de donde me dirigía, no le hago mucho caso, su aspecto desaliñado no me daba demasiada confianza.— No lo necesito, ya me has traído mala suerte, espero que no vuelvas a gritar como una loca simplemente por algo tan ridículo. —No volteo hacia ella, necesitaba encontrar donde quedarme, si durante el día las cosas se complicaron, e n la noche debe ser aún peor.—¡Sí que sabes quejarte!, tampoco pedí tu ayuda, pude habérmelas arreglado sola. — Sonrío ante su respuesta.—Acabas de decir lo contrario. ¿O ya lo olvidaste niñita?. —Quedo a apenas medio metro de ella, sus anteojos se habían roto, soy demasiado detallista, pude notar que los pegó con cinta adhesiva.—Tengo nombre, no me digas niñita; además tampoco me llevas tantos años. Bien, buena suerte y lo siento por lo que te han robado. —La observo marcharse, con esa cosa entre sus brazos.“Mi nombre es Ada, sea como sea gracias”. —La escucho apenas desde la distancia, sí que caminaba rápido, tras pensarlo un poco, finalmente hice caso a su consejo.Capítulo 3.Opciones.Ada.Al menos pude salvar a este animalito de las manos de ese monstruo, pero no lo hubiese logrado sin la ayuda de ese hombre, es tan guapo pero un completo arrogante, debe ser un engreído por su apariencia.¡Basta Ada!, deja de pensar en ese extraño, nunca más volverás a verlo. —Golpeo mis mejillas al llegar a casa, allí vivimos mi madre y yo, es una casa mediana. Mi padre viajó por trabajo a Europa, si no fuese por su trabajo no tendríamos esta casa, aunque últimamente nos dicen que no les está yendo muy bien, entonces decidimos rentar una habitación con salida al jardín, pero como vivimos solas, no hemos aceptado a nadie todavía.—Hija. ¿Dónde estabas?. —Escondo al perrito en mi habitación, casi no estoy en casa, por ello no tenemos mascotas.—Tuve clases de refuerzo en la universidad. —Respondo mientras de prisa cierro la puerta, voy hasta la mesa, la cena olía delicioso.—Ada, tienes que salir a divertirte de vez en cuando, nunca te he visto con ningún mucha
Capítulo 4.Mentiras.Bruno.Toda la noche pensé en el comentario de mi hermano, aún así la sola idea de cometer tal acto me hacían pensar en mil posibilidades, en solo un día me sentí perdido, tuve que aceptar vivir en un lugar poco cómodo, con un par de horas dormido me armé de valor para ir a visitarlo, hacía años que no lo veía porque siempre fue un viejo cascarrabias, terminó viviendo en un asilo. Raúl tiene razón, ninguna entidad crediticia me otorgaría algún préstamo, jamás trabajé y por cabeza dura lo dejé todo. Menos mal no vi a la chica llamada Ada, no sé el motivo, pero su presencia me hace sentir incómodo.—Buenos días Bruno. ¿Dormiste bien?. —Cuando pensé en escabullirme me la encuentro en la salida, creo que le gusto porque de lo contrario, no entiendo su amabilidad.–Buenos días, así es y ya voy de salida. —No conozco la ciudad, tal vez ella podría ayudarme. —Sabes cómo puedo llegar a este lugar. —Claro, también voy a la parada de autobuses, puedes venir conmigo si qui
Capítulo 5.Planes de conquista.Bruno.Cuando me retiré del asilo, seguí los carteles para volver hacia el barrio en el que me estaba quedando, la chica ni su madre me hablaron acerca del costo por haberme quedado, no tengo mucho dinero, conozco de automóviles y motocicletas además de las finanzas que tanto odiaba. Si quiero convencer a mi abuelo, necesito demostrarle que verdaderamente planeo triunfar con la idea de abrir mi propia empresa, aun no defino el rubro, pero sin duda tendrá que ver con la tecnología. Unas cuadras antes de llegar a la casa en donde me estaba hospedando, me encuentro con un anuncio, estaban buscando a un mecánico.—¿Tú qué puedes hacer?, o más bien qué sabes hacer. —El hombre se veía robusto, de unos treinta años aproximadamente, no soy fácil de convencer, he tenido ese anuncio allí y en las redes sociales por casi un mes, pero quienes se presentan ni siquiera son capaces de ensamblar una motocicleta.—Puedo hacerlo, eso es fácil; además puede ponerme a pru
Capítulo 6. Un paso más Ada. Debo enfocarme en la universidad, quiero asistir a una conferencia algo costosa y aún me falta la mitad del dinero para completarla, enseguida me aliste para ir al trabajo, el uniforme es algo incómodo porque el pantalón me quedaba muy ajustado, escribí a mi madre con respecto a nuestro inquilino y aunque lo haya dudado aceptó y todo gracias a su buena obra, en la tarde llevaría al cachorrito con su nueva familia, en casa durante el día no está nadie, lo deje solo todo este tiempo al pobrecillo. —¿De dónde lo sacaste?. —Me pregunta Celia, es mi mejor amiga, ella trabaja en una joyería medio tiempo, cuando nos encontramos siempre camina conmigo hasta el supermercado, eran unas quince cuadras, eso sería como unos quince kilómetros de caminata. —Es el perrito del que te hablé. —Acaricio la cabecita del pequeño. — El hijo del gerente de la tienda lo adoptará. —Sonrío. —¿Y ese héroe guapo del que inundaste mi W******p?, luego te quedaste callada pero volv
Capítulo 7.Conquista.Bruno.¿Por qué hablé de mis problemas con esta mujer?, ya estoy muy adentrado a mis planes de conquistarla, además tampoco me viene mal su ayuda con respecto a la renta de esa pequeña habitación en la que me hospedo, nadie sabe dónde estoy o lo que decidí hacer con mi vida, sería un secreto, de seguro mis padres inventaron alguna mentira para no sentir vergüenza alguna, desde esa noche y en los días siguientes trabajé con Joel en su taller de motocicletas, el dinero que ganaba allí no se comparaba siquiera a pagar una cena elegante, transcurrió el primer mes de mi nueva vida en la cual Jimena simplemente decidió no llamar o escribir, mi orgullo era muy grande como para ser yo quien decidiera buscarla. —Buenos días Ada. ¿Qué te parece si caminamos juntos?. —Cada mañana la acompañaba a la parada de autobuses y en las noches la esperaba para que no vuelva sola, aún así resultaba sumamente difícil conquistarla, no demostraba señales a las cuales estoy acostumbr
Capítulo 8.Examen.Ada.No pude dormir, parezco una adolescente enamorada, apenas y estudio para el examen de estadísticas, pero supongo que haber prestado atención en clases y estudiar con unos compañeros seria suficiente.—Hija, ven a desayunar, no puedes ir a un examen con el estómago vacío. —Mi madre preparó tostadas con queso y té con leche, no pude evitar pensar en Bruno, cada mañana le llevo té o café, pero nunca le di ni un pedazo de pan o alguna galleta.—Si, saldré enseguida así vuelvo a leer algo antes de entrar a clases. —Mastico rápidamente, aunque la verdad era que me apenaba mirar a mi madre, pronto le confesaría mi relación con nuestro inquilino, sin mencionar la desaparición de mi padre.—Estoy preocupada por tu padre, solo envía mensajes y no atiende las llamadas o videollamadas que le hago. ¿Crees que esté bien?. —Mi madre trabaja en una casa como ama de llaves, quiso volver a trabajar porque le aburría quedarse sola todo el día.—Si, sabes que en Estados Unidos n
Capítulo 9.Medio Hermano.Raúl.Nunca he sido ni siquiera parecido a mis hermanos, Bruno y Paulo nacieron en cunas de oro, iguales en carácter a mi padre, solo piensan en ellos y lo que les conviene, mi madre no proviene de una familia adinerada, según tengo entendido ella trabajaba para una de las tantas empresas de la familia Harper, el no la dejaba en paz, recuerdo que siempre la visitaba cuando yo seguía siendo pequeño, nos mudamos de casa un sin fin de veces hasta que cumplí quince años y mi vida dio un giro impensable, quedé huérfano a causa de una enfermedad terminal sufrida por mi única familia oficial en aquel entonces, con la cual lidiaba desde hace mucho tiempo. No fui bienvenido en la mansión por parte de mi nueva madrastra, ahora con mis treinta años puedo decir con seguridad haber ganado la batalla con respecto a la aceptación, estudie lo indicado por el respetado señor Harper, a diferencia de Bruno, me gusta dirigir los negocios, Paulo es un viajero sin remedio, dir
Capítulo 10. Dulce Mentira. Bruno. Ada es demasiado simple, no dejó de sonreír por algo tan sencillo como cenar en un lugar poco agradable, al menos había música y en ocasiones quedamos en silencio, lo extraño fue que no me sentí aburrido, ella no intentó aventurarse con preguntas que implicarán a mi familia o a mi pasado, pero cuando llegué listo como para descansar, recordé la última vez en la que fui a cenar con Jimena, ella llevaba un vestido en color terracota, se veía absolutamente hermosa, amaba verla todos los días, las ola idea de pensar en su decisión de no acompañarme, pero no la criticaba, su familia le hubiese dado la espalda, y traerla a vivir aquí conmigo me complicaría las cosas, se que lo lograré, cuando decidió dejarme la bloquee de mi teléfono celular, escucharla podría hacerme volver y acatar las órdenes de mis padres, porque de lo contrario me desheredarían; bebí hasta la madrugada, no acostumbraba a hacerlo en ese horario, pero mi vida se sentía miserable, no