Narrado por DanteEl amanecer se filtra a través de los árboles, tiñendo todo con un tono dorado. A mi alrededor, la manada se prepara para lo inevitable: una nueva batalla. Los guerreros afilan sus armas, los mensajeros trazan rutas, y los sanadores organizan sus hierbas, conscientes de que pronto las necesitarán. El peso de la decisión que debo tomar me oprime el pecho, como si llevara un yunque atado al alma.—Ataca primero, Dante. Es la única forma de asegurar nuestra ventaja —dice Liam, uno de mis guerreros más cercanos, mientras golpea su espada contra una piedra para afilarla.Sé que tiene razón. En la guerra, quien golpea primero tiene más posibilidades de ganar. Pero esta no es una simple pelea por territorio. Si lanzamos un ataque precipitado, las consecuencias podrían ser catastróficas. Cada vida perdida será una marca en mi conciencia.Me aparto del bullicio del campamento y encuentro a Scarlett en nuestra tienda, inclinada sobre
Narrado por ScarlettEl frío se filtra hasta mis huesos mientras intento moverme en la estrecha celda de piedra. Mis manos están atadas a la espalda, y cada respiración es un esfuerzo doloroso. La misión no salió como planeábamos. Dante y yo pensamos que un pequeño grupo podría infiltrarse en el campamento enemigo para obtener información clave, pero caímos en su trampa. Ahora estoy aquí, sola, rodeada por enemigos, con la cabeza llena de dudas y una creciente sensación de que algo más grande se oculta bajo la superficie.Las promesas que creí firmes —la lealtad entre manadas, el amor inquebrantable de Dante, la paz como un destino posible— empiezan a desmoronarse, y cada segundo que paso en esta celda parece empujarme más lejos de la persona que solía ser.Horas o tal vez días después, la puerta chirría y se abre, dejando entrar una ráfaga de viento frío. Un hombre entra con una sonrisa burlona en el rostro. Lo reconozco: es Kael, uno de los líderes más influyentes de la manada enemi
Narrado por DanteEl aire de la noche es espeso, cargado de tensión. Mis músculos están tensos, mi lobo a punto de estallar, pero debo mantener el control. Scarlett está en sus manos, y la sola idea de que puedan lastimarla me consume. No puedo permitir que el miedo me paralice. Respiro hondo, forzando a mi cuerpo a mantenerse enfocado mientras nos preparamos para la incursión.—Dante, si atacamos así, ellos van a responder con todo —advierte Liam, su voz grave.No me importa. No voy a esperar ni un segundo más. Scarlett está allí, prisionera, y no hay nada ni nadie que me impida traerla de vuelta. La razón se desvanece bajo el peso de la rabia que se agita en mi pecho.—Si alguno se interpone, lo destruimos. No vamos a darles tregua.El bosque es un susurro constante mientras avanzamos, cada paso medido y silencioso. La luna llena ilumina apenas lo suficiente para ver nuestras sombras moverse entre los árboles. Mi equipo, disciplinado y letal, me sigue sin cuestionar. Saben que hoy n
Narrado por ScarlettEl aire nocturno está cargado de incertidumbre mientras camino hacia el punto de encuentro acordado. No puedo evitar sentir cómo mi corazón late con fuerza en mi pecho. Si Dante descubre esto, no solo traicionaré su confianza, sino que también pondré en peligro todo lo que hemos construido. Pero algo en mí me dice que no podemos seguir por el mismo camino. La guerra no es la respuesta.Me detengo al borde de un claro oculto entre los árboles y espero en silencio. La luna, alta y brillante en el cielo, parece juzgar mis acciones. Sé que estoy cruzando una línea peligrosa, pero no veo otra opción.—Pensé que no vendrías.La voz llega desde las sombras. Es Nathan, el líder de uno de los grupos rebeldes. Su figura emerge lentamente de la oscuridad, y su presencia es tan imponente como recordaba. Alto, con ojos afilados y una calma peligrosa en cada movimiento. Nathan siempre ha sido una figura complicada: enemigo para Dante, pero alguien que comparte mi visión de un f
Narrado por DanteEl frío de la mañana se clava en mis huesos mientras me siento solo en la cima de la colina, observando el campamento desde arriba. La guerra no ha dado tregua. Cada victoria parece vacía, cada derrota una losa más sobre mi espalda. Los guerreros que me seguían con lealtad inquebrantable ahora me miran con dudas en los ojos. Puedo sentirlo en sus susurros, en los silencios cuando entro en una habitación. Se preguntan si soy el líder que necesitan… y, por primera vez, yo también lo hago.La sensación de fracaso se adhiere a mi piel como un veneno. La presión de proteger a mi manada es un peso que cada día se vuelve más insoportable. Me habían preparado para liderar, para tomar decisiones difíciles. Pero nadie me enseñó cómo soportar las miradas de aquellos que creían en mí cuando empiezan a cuestionarme.Me levanto de la roca y desciendo lentamente hacia el campamento. Los guerreros están reunidos alrededor de una hoguera, sus voces bajas, casi susurrantes. Cuando me
Narrado por DanteEl viento frío corta como un cuchillo mientras me abro paso hacia la tienda donde Scarlett me espera. Mi mente es un torbellino de pensamientos oscuros desde que descubrí la verdad: Scarlett ha estado reuniéndose con los rebeldes, a mis espaldas. Durante días, he ignorado las señales que me gritaban que algo estaba mal. Ahora lo sé con certeza, y cada paso que doy hacia ella es una mezcla de rabia y decepción.Cuando entro, ella me espera con la misma calma peligrosa que precede a una tormenta. Su expresión es serena, pero puedo ver el cansancio en sus ojos. Un cansancio que no es solo físico, sino emocional. Sabe que la confrontación es inevitable.—¿Por qué? —es lo único que logro decir, mi voz baja pero cargada de tensión.Scarlett no se sorprende. Ella esperaba este momento.—No es lo que crees, Dante —responde, cruzando los brazos como si así pudiera protegerse del peso de mis palabras.—Entonces explícame qué es, porque me parece bastante claro. Te reuniste con
Narrador: ScarlettLa noche es fría, y la brisa parece susurrar advertencias que me hielan la piel. Estoy sola, sentada al borde del risco donde tantas veces vine a pensar en silencio. Las estrellas brillan sobre mí, pero su luz no es suficiente para disipar la oscuridad que se cierne sobre mi alma. Mi orden me ha dado una elección clara: apartarme de Dante y cumplir mi juramento, o convertirme en una fugitiva, traicionar mi linaje y arriesgarlo todo.El peso de la decisión me asfixia. Todo lo que he sido, lo que he aprendido, lo que he jurado proteger… se desmorona ante la certeza de lo que siento por Dante. No puedo ignorar nuestra conexión, ni negar que su causa es también la mía. Elijah no solo amenaza su manada; amenaza la paz que ambas manadas podrían alcanzar. Y lo más doloroso es saber que, si elijo a Dante, ya no habrá marcha atrás. Seré una traidora a los ojos de mi orden.Siento sus pasos detrás de mí antes de que hable.—Scarlett —dice
Narrador: Dante El aire en la cueva del consejo es sofocante, cargado de resentimiento, desconfianza y miedo. Los líderes de ambas manadas se sientan en silencio, sus miradas duras y sospechosas, cada uno esperando que el otro haga el primer movimiento. Scarlett y yo estamos en el centro, llevando el peso de una misión que, si falla, marcará el fin de todos nosotros. Convocar esta reunión fue arriesgado, pero no tenemos otra opción. Elijah avanza rápidamente, y solo unidos podremos enfrentarlo. —Gracias por venir —empiezo, manteniendo la voz firme, aunque siento la tensión retorcer mis entrañas—. Sabemos que las heridas aún están abiertas y que la confianza es escasa, pero si no dejamos atrás nuestras diferencias, ninguno de nosotros sobrevivirá. Los murmullos llenan la cueva como un eco amenazante. El Alfa de la manada del este, Gregor, me lanza una mirada escéptica. —¿Unirnos a ustedes? Después de todo lo que ha pasado, ¿esperas que simplemente olvidemos los ataques y la traici