Katherine
Años después
_ ¡ELIZABETH! _ golpee la puerta _ vamos, despierta, llegarás tarde a la reunión de trabajo.
Mi mejor amiga Elizabeth tendría una entrevista de trabajo muy importante, este era el ultimátum de su padre respecto a su situación, o iba a esta entrevista o simplemente contraer un matrimonio arreglado para establecer una alianza empresarial a favor de la prosperidad de su familia.
_ ¡Elizabeth! Si no te levantas en este momento voy a tumbar la puerta, lo juro por lo más sagrado que hay.
_ Hola Katherine _ saludó su hermano Nain _ creo que primero despiertas a los vecinos antes de a mi adorada hermanita.
_ Eso veremos _ tomé impulso hacía atrás _ por favor apártate, tumbaré la puerta.
Nain se hizo a un lado, tomé impulso y alce mi pierna lo suficientemente alto para poder tumbar la puerta, en lo que estaba llegando fue abierta.
_ ¿Qué es el escándalo? _ Elizabeth abrió sus ojos _ ¡KATHERINE, NO!
Terminé por darle la patada a Elizabeth, ambas quedamos tumbadas en el suelo, al ver la situación bochornosa en la que nos encontrábamos terminamos riendo, no quería que mi amiga se casará por imposición si no por amor, sabía que eran las medidas desesperadas que tenía su padre para que ella tomara en serio su futuro, sin embargo no deseaba arriesgarme.
_ Ve a vestirte, se te va a hacer tarde para ir a trabajar, no puedes continuar así.
Elizabeth se preparó en un corto tiempo, no tuvimos tiempo para comer, solamente tomamos un jugo.
_ Demonios Kathy, ¿Por qué no me despertaste?
_ ¿Es en serio? Prácticamente iba a tumbar la puerta, pero no te digo nada, vamos y apresúrate.
Elizabeth llegó justo a tiempo a la entrevista de trabajo, sentía que el alma me iba a abandonar el cuerpo, todo fue un corre corre desde la mañana. Salí de la enorme empresa en la que mi amiga iba a ser entrevistada, miré que había un puesto de comida callejera así que me acerqué para comprar algo, al ver mi cartera me di cuenta que solamente tenía cinco dólares en monedas, demonios, necesitaba conseguir trabajo muy pronto o terminaría por morir de inanición.
_ Por favor deme un café y un pan tostado.
El vendedor me atendió y me fui a sentar a una fuente que se encontraba cerca, mientras soplaba mi café miré que un carro andaba dando vueltas, todo mundo simplemente seguía con su rutina y nadie se daba cuenta de ese pequeño detalle, quise ignorarlo pero algo dentro de mí simplemente me decía que no lo hiciera. De repente el auto se detuvo y dos hombres se acercaron a una niña que se encontraba sola, me levanté en el momento que miré que los tipos se la estaban llevando a la fuerza.
_ ¡Hey, suelten a esa niña!
Salí corriendo lo más rápido que pude, el carro en el momento que se miró atrapado arrancó dejando a uno de los malhechores fuera y era justo el que cargaba con la pequeña, él comenzó a correr desesperadamente, tomé el café y se lo arroje pero no le pude dar, le tiré el pan tostado logrando aturdirlo un poco, a pesar de esto no se detenía así que cuando me cansé decidí tomar una bicicleta que se encontraba a la disposición en el local donde compré mi desayuno, también tomé un cucharón, empecé a perseguirlo, en el momento que el tipo vio que estaba por alcanzarlo terminó por dejar a la nena a un lado y salió corriendo, a pesar de eso no quise dejarlo pasar y terminé siguiéndolo con la mala suerte de que caí en un basurero debido a la velocidad con la que iba, salí de ahí y le grite a la policía para que llegará, luego fui donde la niña quién se encontraba temblando de miedo.
_ Shh, tranquila _ acaricié su espalda _ todo va a estar bien.
En eso una señora sumamente elegante salió corriendo en mi dirección, un chófer iba detrás de ella, la niña no me soltó en ningún momento, temblaba por lo que había pasado.
_ ¡Katrien!
La niña miró a la señora y solo en ese momento fue que me soltó, en el momento que miré que el secuestrador había sido capturado por la policía salí corriendo para darles la paliza de su vida.
_ Son unos desgraciados, ¿Acaso es tan difícil trabajar? Es cierto que la situación no es para nada fácil pero querer secuestrar a una pequeña, sólo un bastardo lo hace.
La policía llegó juntó con el resto de los secuestradores, la señora hizo una llamada que cuando finalizó se acercó a mí.
_ Muchas gracias señorita, si no hubiera sido por usted, mi pequeña nieta estaría en manos de unas personas sin escrúpulos _ ella miró mi ropa _ por Dios se encuentra demasiado sucia, ¿Qué puedo hacer por usted?
_ No tiene que agradecer, solamente tenga más cuidado con su nieta, me tengo que ir.
Recogí mi cartera del suelo, en lo que caminaba fui detenida por la mano de la señora, ella me extendió un fajo de billetes sumamente considerable mientras me pedía que lo tomará debido al gesto heroíco que había hecho.
_ No _ alejé el fajo de billetes _ por favor no me ofenda de esa forma, es lo que cualquier persona decente haría, si me disculpa tengo que irme, mi amiga está en una entrevista de trabajo y no debe tardar en salir _ ella me preguntó dónde era la entrevista de Eli _ está en la corporación Reed, me tengo que ir.
Salí corriendo rumbo a la empresa, Reed corporation era una de las más prósperas en Toronto, se trataba de una casa de subastas que trataba con pinturas de valor incalculable, poco a poco se fue abriendo pasó en este sitio, cualquiera que pudiera trabajar ahí tenía las puertas abiertas de cualquier sitio a nivel nacional. Llegué al edificio, en el momento que lo hice miré que Elizabeth venía saliendo de la entrevista de trabajo, ella me buscó a varios lados y en el momento que me miró pude ver que sus ojos se cristalizaron de una forma tan grande que no tardaron en llorar, me acerqué a ella preguntándole qué había pasado.
Elizabeth estaba llorando, ella decía palabras inentendibles para mí, le pedí que se calmará y me dijera detenidamente qué había pasado para que las pusieran así.
_ El hombre que me entrevisto es el mismísimo demonio, solamente porque me equivoque en dos pinturas me dijo que solamente era un desperdicio de oxígeno y espacio en este mundo, que mejor me casara con un hombre viejo que me mantuviera ya que solamente para eso somos buenas.
En el momento que me dijo eso me quedé helada, nadie se iba a atrever a atacar de esa forma a Elizabeth y quedaría entero, entré a la empresa con mi mejor amiga en mano pero dos hombres nos detuvieron.
_ ¿Qué necesitan? _ dijo uno de los hombres gigantes delante de mí _ ¿Tienen cita con alguien?
_ Despeja mi camino, tu jefe o quién sea que sea ese tipo se atrevió a ofender a mi amiga, no lo dejaré entero.
Los hombres nos tomaron como si fuéramos sacos de papa y de esta forma nos sacaron a la calle, en el momento que nos lanzaron de trasero se escuchó una voz femenina que dejó petrificados a los guaruras de la empresa.
_ ¿Esas son formas de tratar a una dama? Exijo que se disculpen, si no lo hacen considérense despedidos.
Los hombres se disculparon con nosotros e incluso nos levantaron como si fuéramos lo más precioso que había, ellos simplemente se dieron la vuelta y entraron a la empresa como si volver a ver atrás significaba morir de la manera más horrible del mundo.
_ ¿Se encuentran bien?
En el momento que miré a la persona que había sido nuestra salvadora me sorprendí, la señora que minutos antes salve a su nieta se encontraba delante mío, la niña al verme salió corriendo a mi lado muy contenta, la cargué ya que me parecía una pequeña muy adorable.
_ ¿Qué sucede? ¿Por qué las botaron de esa manera de la empresa?
Le contamos lo que había sucedido, la señora se puso roja de cólera hasta las orejas, ella entró a la empresa mientras pisaba de manera firme, todos los presentes de ahí la miraban sorprendidos, ¿Quién es ella? Nadie se atrevía a interferir en su camino, solamente despejaban donde pasaba.
_ Una pregunta _ ella se detuvo y nosotras quedamos varadas de golpe _ la persona que te entrevistó ¿Cómo se llamaba?
_ El señor Reed _ dijo Elizabeth _ ¿Acaso lo conoce?
_ ¿Si lo conozco? Claro que lo conozco y muy bien, yo limpié el trasero de ese maleducado…
La señora subió al elevador hecha una furia, la niña tomaba mi mano como si ya estuviera acostumbrada a verla de esa forma, nos invitó a subir y la seguimos, salimos del elevador y nos sorprendimos al encontrar a un hombre sumamente apuesto. _ Mamá _ dijo con voz ronca y masculina _ ¿Qué haces aquí? El hombre delante de nosotros era muy imponente, la temperatura bajó gradualmente y de repente se sentía un frío demasiado grande. Él era tan atractivo que tuve que frotar mis ojos dos veces para ver si no veía un espejismo, los ojos eran de color celeste, cabello castaño, barba semipoblada, media aproximadamente 1.90 y tenía la piel bronceada levemente. _ Hola Alexei, vengo a resolver un pequeño inconveniente con Liam, ya sabes como es él. _ Si, bueno, me tengo que ir, n
_ Me alegra saber que mi pequeña hija tiene el empleo, así tu papá ya no seguirá de terco en querer casarte con alguien que no sea digno de ti._ Si, cambiando de tema mamá, ¿Cómo fue que consiguieron la entrevista de trabajo en esa empresa? Por lo que le escuchó decir a papá, ellos tienen un estatus social más alto que el de nosotros._ Fue gracias a tu hermano, Liam perdió una apuesta con él y el trato fue que te daría una entrevista si acaso perdía, como puedes ver sucedió así._ ¿Qué iba a pasar si Nain perdía la apuesta? ¿Qué le iba a dar a cambio? ¿Acaso era yo?_ Claro que no, no digas estupideces, tu hermano jam
Alexei estaba tan molesto que se podía sentir como si estuviéramos en la antesala del infierno, él se acercó a la pintura que estaba dañada y palideció al verla de esa forma. _ Toma tus cosas y vete _ dijo sin ver a la mujer _ eres una incompetente. _ Pero Alexei, es un error, el primero que cometo, por favor no me corras. La mujer tomó la mano de Alexei pero él la tiró sin ningún remordimiento, Eli de repente soltó una risita baja que hizo que ese demonio la viera
_ Pero yo no quiero hablar con él, es un idiota que solamente se las da porque tiene varios ceros en su cuenta de ahorro, lo detesto._ Vamos Kathy, si no te conviniera no estuviera llamando, al señor hielo le gusto tu trabajo, ven de una jodida vez.Colgué y moví mi trasero lo más rápido que pude a la casa de subastas, al llegar entré casi sin aire, subí todos los pisos finalmente estaba frente a la puerta del ceo.Toqué la puerta y una voz masculina me hizo pasar, al abrir pude sentir que pesaba demasiado, era madera pura después de todo._ Por favor tomé asiento señorita Katherine _ él me miró con unos lentes puestos _ necesito hablar con usted.Me sent&
_ ¿Realmente lo mataría decir un cumplido? Vine así ya que me pidió que me vistiera de manera diferente y así lo hice, además no creo que me vea como una prostituta, estoy sexi sin caer en lo vulgar, no diga que es una casa de subastas decente porque estoy casi segura que en estos momentos su querido hermanito se acuesta con la secretaria que le fue asignada.La secretaria suprimió su risita de los oídos de Alexei, él se encontraba rojo, solo que no sabía si era de cólera o vergüenza. _ Mi hermano se encuentra trabajando arduamente así que no diga tonterías, él es un hombre muy competente. _ También la secretaria trabaja arduamente, no es fácil llevarse un pene hasta el fondo de la garganta. _ No tiene evidencias así que deje de decir estupideces y póngase a trabajar. _ ¿Quiere que lo pruebe? Muy bien, si en este momento la secretaria de su hermano le encuentra haciendo esto, me va a dar empleo aquí, si me equivoco le haré la restauración del cuadro de San Antonio completament
Al llegar el final de la jornada fui con Eli a mi casa,porque me llamo para visitarla._ ¿Y bien? ¿Cómo vas con la pintura? _ Bastante bien, de hecho tengo trabajo de planta gracias a una apuesta que hice con Alexei. _Se lo conte todo a Eli. _ Por cierto, hay que festejar lo de tu nuevo trabajo, vamos a ir a la discoteca en un rato, no acepto un no como respuesta. Asentí, hoy era viernes así que no tenía que preocuparme por el trabajo. pero ella no encontró nada que pudiera usar para ir a la discoteca. _ Iremos de compras _ sacó su tarjeta de crédito _ papá me la había cancelado pero en cuanto se dio cuenta que tenía trabajo se puso tan contento que terminó por levantar el castigo. En el vocabulario de Elizabeth no existía la palabra no cuando se trataba de gastar en mí. Me tomó de la mano y me llevó a uno de los centros comerciales más exclusivos de Toronto. _ Prueba esto, estoy segura que te quedará muy bien. Eli me dio un vestido plateado bastante escotado de la espalda y
La tensión en sus músculos fue muy fuerte, desató su corbata, esperó pacientemente a ver que pasaban, las chicas después de unos minutos se levantaron y salieron, fue en ese momento que los tipos aprovecharon en verter un líquido en unos cócteles que pidieron._ Por un demonio _ se acercó a Liam _ vámonos de aquí, despide a esa chica y te vienes conmigo en este preciso instante.Liam se sorprendió al escuchar las palabras que su hermano le dijo en el oído, no quiso discutir y le dio a la chica para el taxi. Empezó a seguir a su hermano, él pasaba entre la multitud pero no era nada fácil pasar.En el momento que Alexei llegó donde las empleadas de su casa de subastas maldijo al ver que las dos tomaron unos cócteles._ Escucha, hazte cargó de la señorita Harris, yo me encargaré de la otra, esos bastardos las drogaron y no debe de tardar en hacer efecto la droga, hay que informar a Vlad lo que pasó y que se encargué de llamar a la policía._ Muy bien hermano, lo que digas.Los hermanos Re
_ Los doctores están haciendo análisis pero no descubren qué es lo que tiene, en la mañana ella no despertaba, al tocarla se sentía muy helada así que decidí traerla al hospital junto con mamá. Katherine miró que la señora Miriam junto al padre de Eli y Nain llegaron de prisa, en el momento que se acercaron, Kathy se hincó delante de los tres, tomó la pierna de la mamá de su mejor amiga y pidió perdón. _ Katherine ...Hija, levántate de ahí, no es culpa tuya lo que le pasó a Eli, vamos, ponte en pie, no es tú culpa _ habló el padre de Eli. _ Hasta que no me perdonen no me voy a levantar de aquí, se supone que tengo que cuidar de Elizabeth pero no fue así, tanta culpa tienen esos desgraciados de haber drogado a mi Eli, como yo por haber confiado en unos desconocidos. _ Escucha Katherine _ habló la señora Miriam _ no te vamos a perdonar porque no hay nada por lo cual otorgar el perdón, durante muchos años le has demostrado a mi hija lo mucho que la quieres por quién es y no por lo que