Llegaron a la residencia, subieron en el ascensor a la suite. Llegaron Fernando la tenía cargada en sus brazos, la llevo directo a su habitación para ponerla acostarse Al llegar a su habitación, ella no quiso acostarse, le pide a Fernando el favor de investigar el pasado de su madre y lo que pasó. Fernando aún no podía comprender, no sabía quién era la madre de Sheila Y qué pasó con ella. El Solo le pidió que le explicará y con que le cuente la historia completa _ Sheila, por favor explícame, ¿qué te dijo tu abuelo? ¿Qué fue lo que pasó con tu madre y que te puso en su estado? _ Mi abuelo, me dijo que estaba orgulloso, porque yo había cumplido el sueño de mi madre, había logrado estar en una pantalla. Mi madre anhelaba volver a estar en una pantalla de revista. Y cunado me vio en la Primera Plana en un panel de la noticia la calle. Supo que yo seguiría los rastros de madre!. _ Eso quiere decir, que tu madre ¿su sueño era ser famosa? _ No, ella ya era famosa, solo tenía el sueño
En este momento Dionisio estaba apareciendo con una tasa de té, para calmar los nervios. _ Dionisio, me acuerdo ver visto, una cadena en el cuello de Sheila, ¿lo ha visto? _ Sí, está aquí, el doctor se lo retiro. Está aquí en su bolsa!. Sheila corrió, abrió la bolsa, y vio el collar, un suspiro invadió su nervio y se sentó abrazando la cadena. _ Señorita, por favor tómese el té, cálmese primero, no le hagas daño a tu salud! Fernando insistió también. No podía creer lo que estaba pasando, Sheila estaba envuelta en una historia sobre el pasado de su madre. Pero su madre no es cualquiera. _ Señorita, escuché que le dijiste al señor que tu madre era muy famosa? Si madre era famosa debió ser muy hermosa, pues por lo menos debo conocerla cómo se llamaba?. En ese instante Sheila se tomó un sorbo de té y respondió a Dionisio. _ Mi madre es Dorothy François, era una diseñadora de joyas de Francia, ella era muy famosa, eso me dijo mi abuelo!. Se terminó la tasa de té y comenzó abril, la
_ Dionisio, creo que es mejor y vas y descansas - Mañana seguiremos con esto para aclarar todo _ dijo Fernando. _ Si, de acuerdo señor, me retiro buenas noches, señorita! _ Respondió el mayordomo. Después que Dionisio se marchara, Fernando estaba aún en la habitación de Sheila, se sentó en la cama, pensativo. Y le dijo a Sheila que se quedara aquí esta noche para que no vaya a cometer una locura. En unos momentos Sheila, se metió en la ducha, su cabeza le dolía, estaba pensando demasiando en lo que estaba pasando, ahora que conoce parte de la historia de su madre, no estaba calmada, su mente divagaba por todo lado, menos en presencia de lo que estaba ocurriendo ahora. Ella salió de la ducha, sin la toalla, su cuerpo estaba a todo el descubrimiento. Fernando estaba en la cama, mirando cuando ella salía de la ducha, para su sorpresa ella estaba sin nada, tal como su madre la trajo al mundo. Los ojos de Fernando brillaban, su corazón latía, su instinto estaba siendo seducido y deleit
Habían pasado horas, los dos descansan como dos bebes, recién nacido. Un momento el teléfono de Fernando sonó, era su detective le habían enviado información de lo que le dejo pendiente. _ Señor, tengo noticias!. _ ¿Qué hora es? _ Son las siente de la mañana señor, lamento despertarle de su sueño?!. _ Está bien nos vemos en la oficina.! _ De acuerdo señor!. Sheila se despertó al instante, cuando vio a Fernando bajarse de la cama. Dionisio tocó la puerta como de costumbre, despertarlo temprano, así estar al día, sobre todo ante de partir a sus empresas. Cuando fue a su habitación no estaba, se dirigió al de Sheila. _ Buenos días, mi señor, su café está listo!. __ Ahora bajo, gracias, Dionisio!. Sheila se miraba aún, era su segunda vez con él, ahora ella está completamente, asegurada de que Fernando la quiere, ahora el título de falsa novia para salvarse de la garra de Betty ya no valía. Se sentía oficialmente, ya novia de aquel, poderoso hombre de los negocios. Aunque le l
"Sí, es ella, wau que espléndida es"_ Es justo la belleza de las revistas, el CEO de Diamond desing tiene la belleza más deseada de todo Londres, que envidia. En la entrada también estaba llegando Lizbeth y Clarisa. Clarisa corrió a encontrarse con Sheila. _ Buenos días, señor! _ Buenos días, señorita!. Su voz estaba, temblorosa y agitada. _ Buenos días Clari, ¿cómo estás? Clarisa asintió con la cabeza que estaba bien, se sintió también que alguien la llamara con su nombre, pero cortado sonaba agradable. Lizbeth se paró en la recepción, sus labios pintado de rojo, eran hermoso y resaltante, pero nadie le presto atención. Porque el estilo de Sheila era de temporada. Como estaba vestida era para matar a cualquiera que la mirara, esa espalda fina, con ese lazo, el pelo recogido eran de infarto. De inmediato, algunas personas empezaron a tomar fotos, y a murmurar. Claro, las noticias nunca paran sea, que te ves espléndida o de muy mal gesto. Seria noticias. El chisme se esparció e
_ Creo que, el fallecimiento de su madre, tiene más secretos no revelados. La familia François sigue a cargo de la empresa en Francia, es una empresa muy prominente. _ Pero una familia así, porque ellos no se quedaron con Sheila! _ Señor, no fueron quien peleó con el abuelo para la custodia, fueron extraños amigos lejanos de la familia. _ Eso indica que el nacimiento de ella, causo grandes perdidas para la familia!. _ Si se puede concluir así, porque ella abandonó el mundo de fama para dedicar tiempo a su embarazo!. _ La familia estaba en contra del casamiento de los dos. en la boda no estuvo la familia de la madre. Eso indica que eran estricto y no estaban dispuestos a aceptar ese matrimonio. Ya que si la abandonan ellos pensaron, por falta de fondo ella volvería. Pero ella estableció una pequeña joyería en la familia Fernand. Después que ella murió. Años más Tarde, la joyería se fue a la banca rota, perdieron la casa y todo haya, se mudaron aquí en Londres. _ Me estoy pregunta
Sheila, estaba perdida en la foto de su madre, que ella miraba en la computadora. Entra Clarisa con una tasa de café. _ Señorita, le traigo una tasa de café. Sheila, la mira, una línea de lágrimas desbordan de sus hermosos ojos, y suena el teléfono de su oficina. _ Señorita, que tienes, ¿por qué estás llorando? Clarisa coge la llamada. Del otro lado de la línea está Fernando _ Clarisa comunícale a Sheila, que pase a mi oficina de inmediato. _ Si, señor. _ Señorita, el presidente la necesita en su oficina, dice que es urgente!. Sheila se limpia las lágrimas y se levanta en dirección a la oficina de Fernando. Clarisa, esta curiosa, quiere saber por qué la señorita miraba la foto, y sus ojos se llenaron de lágrimas. Ella mira la computadora y se sorprende ver la foto de la famosa diseñadora Dorothy, era una belleza inigualable, hermosa postura, sus joyas eran únicas. Clarisa, no entendía por qué Sheila lloraba. Para evitar cometario decidió, no decir nada a las chicas solo se mant
Corrieron uno en brazo de otros, dándose un uso de gran pasión, quien vio todo eso, fue Lizbeth quien tenía unos documentos para entregar. Las manos se le empezaron a temblar y se cayeron las carpetas asiendo un ruido en la puerta. Sheila, y Fernando percataron el ruido, pero no prestaron atención, sus besos era en el momento lo más apasionado para ambos. Con la cara llena de Vergüenza Lizbeth, corrió con los ojos lleno de lágrimas, dejando a lo demás en shock. "¿Qué le paso? "¿Y por qué llora ella ahora, será que le dijo algo feo al presidente y se enojó? ¿Qué fue lo que paso en la oficina del presidente? ¿Será que ella se le declaró y él la rechazo? Ellos tenían millones de preguntas, que solo Lizbeth podía responder, pero ella se trancó en su oficina llorando y maldiciendo. Sheila, bajo en unos momentos, pues la curiosidad de lo que le paso a Lizbeth tenía más tensión, había más rumores, en este instante Sheila se pescarto que la que estaba en la puerta era Lizbeth. Fuño la ceja