Cuando Shawn vio que Solomon se comportaba ya como un matón, sabía que le sería imposible razonar con él respecto a este asunto.

Así que su expresión se fue calmando mientras preguntaba: "Señor Star, ¿cómo quieres resolver este asunto? Dímelo directamente".

Solomon miró a Shawn, luego a Marianne, y resopló fríamente mientras decía: "Señor Long, no digas que no soy amistoso o poco razonable. Sé que tu hija no hizo ninguna movida en contra de los miembros de la Orden de la Estrella, y sé que no hizo nada para herir a mi ahijado, Dillion. Así que solo tienes que desembolsar diez millones de dólares para tenerla de vuelta".

"¡¿Diez millones de dólares?!", gritó Shawn, como si alguien le hubiera pisado la cola. "Señor Star, ¿acaso no te equivocas? Fuiste el que dijo que mi hija no había hecho nada. ¡¿No crees que estás pidiendo demasiado al querer llevarse diez millones de dólares por nada?!".

Solomon se burló: "¿Por qué? Señor Long, unos simples diez millones de dólares no deberían ser