Jason conduce rápidamente su vehículo en dirección al lugar que Anish le ha indicado dónde podría estar Jack. Tras una semana de intensa búsqueda, luego de su extraña desaparición, tener luces del lugar en donde ya se ha ido a meter es un alivio para el hombre.

Al entrar a aquel suburbio, frunce el ceño porque no es un lugar apropiado para su hijo, es extraño. Sin embargo, va buscando el número de la casa y cuando al fin da con ella, se detiene y se sorprende aún más, ya que se encuentra con una casa aparentemente remodelada. Tiene un color celeste pastel bastante hermoso, con una entrada perfectamente cuidada y un jardín bellísimo.

Se baja del auto y camina hasta la puerta, llama varias veces a ella hasta que al fin escucha un gruñido tras la madera y reconoce a su hijo de inmediato.

Cuando la puerta se abre, Jack se queda mirando a su padre por algunos segundos, con la mirada perdida y como si no entendiera qué demonios está haciendo parado allí. Sin esperar más tiempo, Jason se afe