FREYA

Toda mi espalda ardía con cada exhalación, pero no me importaba en lo más mínimo. Estaba cojeando hasta la carpa militar donde estaban reunidos todos los tenientes de nuestros ejércitos. Donde me esperaban tanto Fitz como los demás.

Para Amateur estaré inconsciente en mi habitación como todos los demás que sucumbieron a los látigos de castigo; pero yo tenía que avisarles. Debía decirles que el nombramiento está cerca.

Deben estar preparados para cualquier ataque de ese lugar. Mientras más bajas evite, mejor.

Los soldados que me vieron caminando se paralizaron por completo, rostros drenados de color al ver mi rostro de nuevo. Para mu