La mansión de los Smith se alzaba imponente ante nosotros, iluminada por cientos de luces que destacaban su arquitectura clásica y elegante. Al bajar del auto, sentí un nudo en el estómago. La magnitud de lo que estaba a punto de hacer me golpeó de lleno.Ethan me ofreció su brazo, y aunque mi corazón latía con fuerza, lo tomé con firmeza. Caminamos juntos hacia la entrada, donde un mayordomo nos recibió con una reverencia.—Bienvenidos, señor Smith, señorita—dijo con una voz educada y profesional.—Gracias, James—respondió Ethan, asintiendo con la cabeza.Entramos en el vestíbulo, y de inmediato, todas las miradas se volvieron hacia nosotros. Sentí el peso de las miradas curiosas y expectantes, y me esforcé por mantener una expresión serena. Ethan me apretó el brazo ligeramente, como si quisiera transmitirme su apoyo.—Recuerda, solo tienes que seguirme la corriente—susurró Ethan en mi oído—. Todo saldrá bien.Asentí, tratando de calmar mis nervios. La sala principal estaba llena de
Mientras Miraba la portada de las noticias de chisme no pude evitar que mi seño se frunciera, después del espectáculo que había montado Dahia haciéndose pasar como la víctima, los tabloides también hablaban de la sorprendente entrevista exclusiva que está había dado esa misma noche. Dahia se sentó frente a la cámara, su expresión serena pero decidida. El periodista ajustó su micrófono y le dio una señal para comenzar. —Gracias por estar con nosotros, Dahia—dijo el periodista—. Sabemos que esta es una situación difícil para ti, pero apreciamos que hayas decidido compartir tu historia. Dahia asintió, tomando un respiro profundo antes de hablar. —Gracias a ustedes por darme esta oportunidad—comenzó—. Creo que es importante que la verdad salga a la luz. El periodista se inclinó hacia adelante, mostrando interés. —¿Puedes contarnos qué sucedió realmente entre tú y Ethan? Dahia miró directamente a la cámara, sus ojos llenos de determinación. —Ethan me engañó—dijo con firmeza—. No s
Ethan se encontraba frente a una multitud de periodistas, cámaras y micrófonos. La tensión en el aire era palpable. Emily estaba a su lado, su expresión serena pero alerta. —Gracias a todos por venir—comenzó Ethan, su voz firme—. Hoy, quiero aclarar algunas cosas y revelar la verdad sobre mi relación con Dahia. Los murmullos llenaron la sala mientras los periodistas se preparaban para tomar notas. —Hace poco, Dahia dio una entrevista en la que me acusó de ser infiel y manipulador—continuó Ethan—. Pero lo que no mencionó es que ella misma me fue infiel con Dael, en nuestra propia casa y en nuestra propia cama. Un murmullo de sorpresa recorrió la sala. Ethan hizo una señal, y en la pantalla detrás de él aparecieron imágenes de Dahia y Dael juntos, claramente en la casa de la pareja. Las imágenes mostraban a los dos en situaciones comprometedoras, dejando poco a la imaginación. Los periodistas comenzaron a lanzar preguntas al unísono, sus voces llenas de incredulidad y curiosida
La noche había caído sobre la ciudad, y la lujosa casa en las afueras estaba envuelta en un silencio inquietante. Dahia, Dael y Lourdes se habían retirado a sus habitaciones, pero ninguno de ellos podía dormir. La mente de cada uno estaba ocupada con los detalles del plan que habían trazado.A la mañana siguiente, Lourdes se levantó temprano y se dirigió a su estudio. Abrió un cajón secreto en su escritorio y sacó un pequeño cuaderno de cuero. En él, tenía anotados los nombres y contactos de personas influyentes en la prensa. Tomó su teléfono y comenzó a hacer llamadas.Mientras tanto, Dahia y Dael se reunieron en la cocina. Dael estaba preparando café mientras Dahia revisaba algunos documentos.—¿Estás segura de que esto es lo correcto? —preguntó Dael, su voz llena de preocupación.El y su familia eran una de las más influyentes de la ciudad, pero sabía que ya no podía dar vuelta atrás, Aunque también sabía que no quebada mucho tiempo para que su relación con Dahia Terminada.Está mu
Ethan estaba sentado en su oficina, revisando los documentos que su investigador privado había conseguido. Había algo en esos papeles que no cuadraba, una conexión que aún no lograba ver. Emily entró en la habitación, su rostro reflejando la misma preocupación.—¿Alguna novedad? —preguntó Emily, sentándose frente a él.Ethan negó con la cabeza.—Todavía no, pero siento que estamos cerca. Hay algo en estos documentos que nos dará la pista que necesitamos —dijo Ethan, su voz llena de determinación.Mientras tanto, en la casa de las afueras, Lourdes, Dahia y Dael estaban ultimando los detalles del golpe final. Lourdes había conseguido el contrato que Ethan había firmado años atrás y estaba lista para hacerlo público.—Esto lo destruirá por completo —dijo Lourdes, con una sonrisa fría.Dahia y Dael asintieron, sabiendo que estaban a punto de lograr su venganza.Esa noche, Ethan y Emily decidieron revisar los documentos una vez más. De repente, Emily notó algo.—Espera, Ethan. Mira esto —d
Ethan estaba en su oficina, revisando los últimos informes financieros, cuando su asistente entró apresuradamente. —Señor, tiene que ver esto —dijo, entregándole una copia del periódico del día. Ethan tomó el periódico y su corazón se hundió al leer el titular. “Escándalo en el Imperio de Ethan” “Contratos Incumplidos y Transacciones Sospechosas”. El artículo detallaba una serie de acusaciones basadas en documentos filtrados que comprometían seriamente su integridad y la de su empresa. Emily, quien estaba saliendo desde su lugar de trabajo, estaba revisando la nota informativa que hablaba sobre el escándalo del imperio Smith. Sin duda alguna para Emily, toda la causante de los problemas de Ethan era su hermanastra Dahia. Desde que ella se había salido con la suya con Dael, todo últimamente le estaba saliendo mal a Ethan. No lo pensó dos veces y fue directo a la parada de autobuses, para dirigirse a la oficina de Ethan. Ella seguía pensando que todo era culpa de Dahia, después d
Lourdes estaba en su despacho, revisando los últimos detalles de su plan, cuando recibió una llamada urgente de uno de sus contactos en la prensa. —Lourdes, tenemos un problema. Sebastián ha sido descubierto y está dispuesto a testificar contra nosotros —dijo el contacto, su voz llena de preocupación. Lourdes sintió que la ira comenzaba a hervir dentro de ella. Colgó el teléfono y llamó a Dahia y Dael para que se reunieran con ella de inmediato. —¿Qué sucede, madre? —preguntó Dahia al entrar en el despacho, notando la expresión furiosa de Lourdes. —Sebastián nos ha traicionado. Ethan lo descubrió y ahora está dispuesto a testificar en nuestra contra —dijo Lourdes, su voz temblando de rabia. Dael apretó los puños, su rostro reflejando la misma ira. —¿Cómo pudo hacer esto? Pensé que estaba de nuestro lado —dijo Dael. Lourdes se levantó de su silla y comenzó a caminar de un lado a otro, sus tacones resonando en el suelo de mármol. —Sebastián siempre ha sido un oportunista.
Etha y Emily sabían que tenían que actuar rápido. Con las pruebas en mano, comenzaron a planear cómo exponer a Lourdes, Dahia y Dael. sin poner en riesgo su propia seguridad. Decidieron contactar a un periodista de confianza que pudiera ayudarles a publicar la historia de manera segura y efectiva.Mientras tanto, Lourdes y Dahia estaban ocupadas con su propia campaña para desacreditar a Sebastián. Lourdes había movilizado a varios periodistas y les había proporcionado información comprometedora sobre Sebastián, asegurándose de que la historia se difundiera ampliamente.—Tenemos que asegurarnos de que Sebastián no tenga ninguna credibilidad cuando intente testificar contra nosotros —dijo Lourdes, su voz llena de determinación.Dahia asintió, lista para seguir adelante con el plan. Pero sabía que el tiempo estaba en su contra.Esa noche, Ethan y Emily se reunieron con el periodista en un café discreto. Le entregaron todos los documentos y le explicaron la situación.—Necesitamos que est