El mensaje escrito con sangre dejó a Cuarto Creciente en estado de alerta máxima. Los guerreros reforzaban las defensas, mientras Aria hacía todo lo posible por mantener la calma entre los miembros de la manada. Sin embargo, el peso de la inminente batalla se sentía en cada rincón del territorio. Esa noche, cada lobo se enfrentaría a sus miedos y decidiría qué tipo de fuerza llevaría al conflicto que se avecinaba.Thane, después de recibir atención médica por sus heridas, se encontró con Aria en el claro central. Su expresión estaba endurecida, pero sus ojos reflejaban preocupación.Aria:“¿Qué crees que significa el mensaje? ¿‘La luna se alzará para consumir la luz’?”Thane cruzó los brazos, su voz grave.Thane:“Kael no es solo un alfa hambriento de poder. Está obsesionado con destruir todo lo que Cuarto Creciente representa. La luz… somos nosotros. Quiere aplastar nuestra esperanza.”Dentro de Aria, Selene gruñía suavemente, impulsándola a mantenerse fuerte.Selene:“No puede consu
Mientras el amanecer se extendía sobre Cuarto Creciente y la amenaza de Kael se hacía más real, Aria cerró los ojos y buscó dentro de sí una fuerza que no había utilizado en mucho tiempo. Como Luna de la manada y compañera de Raiden, compartían un vínculo profundo, uno que trascendía las palabras. En momentos de necesidad, podían comunicarse a través de sus lobos internos, un regalo raro que pocos alfas y lunas poseían.Aria respiró profundamente, sintiendo la presencia de Selene dentro de ella. Se centró en la imagen de Raiden, en la fuerza de su vínculo y en el amor que los unía. La conexión era débil al principio, como un hilo que se estiraba a través de la distancia, pero pronto escuchó su voz, baja y llena de tensión.Raiden (telepáticamente):“Aria… ¿qué sucede?”Las palabras de Raiden llenaron su mente, y Aria sintió una ola de alivio al escuchar su voz. Dentro de ella, Selene rugió suavemente.Selene:“Finalmente. Lo necesitamos ahora más que nunca.”Aria (telepáticamente):“K
El claro de Cuarto Creciente se convirtió en un campo de batalla bajo la luz de la luna. Los rugidos, aullidos y el choque de cuerpos llenaban el aire mientras los lobos de Kael y los defensores de Cuarto Creciente se enfrentaban en una lucha brutal. Cada miembro de la manada sabía lo que estaba en juego: su hogar, sus familias y su libertad.Aria se mantuvo firme en el centro del claro, su postura erguida y sus ojos brillando con la intensidad de Selene. Kael, imponente, avanzó hacia ella con una sonrisa burlona, mientras sus lobos oscuros se arremolinaban a su alrededor.Kael:“Siempre admiré tu determinación, Aria. Pero la determinación sin fuerza es inútil.”Aria:“¿Y qué te queda a ti, Kael? Una manada construida sobre el miedo y la traición no es fuerza. Es debilidad.”Kael gruñó, su voz cargada de ira.Kael:“Veamos cuánto tiempo puedes mantener esa postura antes de caer.”Dentro de ella, Selene rugió con fuerza.Selene:“No lo temas. Estamos hechas para esto.”Kael atacó, movi
Tras la retirada de Kael y su manada, Cuarto Creciente disfrutó de un breve momento de calma. Sin embargo, el descubrimiento del símbolo de Luna Oscura marcaba el inicio de un nuevo conflicto. La presencia de Ciara, el Lobo Escarlata, ahora era más crucial que nunca, ya que su sabiduría ancestral podría ser la clave para entender la amenaza que se cernía sobre ellos.En el salón principal, Raiden, Aria, Amir, Laila, y Gabriel se reunieron junto a Ciara para discutir el significado del símbolo. La atmósfera era tensa, y las miradas se centraban en el lobo escarlata.Ciara (mentalmente):“El símbolo de Luna Oscura no es solo un recordatorio del pasado. Es un llamado a los aliados de Kael, una señal de que está listo para reclamar lo que cree que es suyo.”Aria frunció el ceño, mientras Selene rugía dentro de ella.Selene:“Sabíamos que no se detendría. Pero esta vez, no lucharemos solos.”Raiden:“Si es un llamado, significa que Kael está reuniendo fuerzas. ¿Cuánto tiempo tenemos antes
Tras la retirada de Kael y su manada, Cuarto Creciente disfrutó de un breve momento de calma. Sin embargo, el descubrimiento del símbolo de Luna Oscura marcaba el inicio de un nuevo conflicto. La presencia de Ciara, el Lobo Escarlata, ahora era más crucial que nunca, ya que su sabiduría ancestral podría ser la clave para entender la amenaza que se cernía sobre ellos.En el salón principal, Raiden, Aria, Amir, Laila, y Gabriel se reunieron junto a Ciara para discutir el significado del símbolo. La atmósfera era tensa, y las miradas se centraban en el lobo escarlata.Ciara (mentalmente):“El símbolo de Luna Oscura no es solo un recordatorio del pasado. Es un llamado a los aliados de Kael, una señal de que está listo para reclamar lo que cree que es suyo.”Aria frunció el ceño, mientras Selene rugía dentro de ella.Selene:“Sabíamos que no se detendría. Pero esta vez, no lucharemos solos.”Raiden:“Si es un llamado, significa que Kael está reuniendo fuerzas. ¿Cuánto tiempo tenemos antes
La tensión en Cuarto Creciente se sentía como una tormenta al borde de estallar. Las palabras del lobo mensajero resonaban en la mente de cada miembro de la manada: “Entreguen a Laila o destruyo todo lo que aman.” Pero en lugar de sembrar miedo, el mensaje de Kael había unido a la manada con una determinación renovada.En el salón principal, Laila estaba de pie frente a Raiden, Aria y los líderes de la manada. Sus ojos brillaban con la intensidad de alguien que cargaba con un peso inmenso, pero no estaba dispuesta a retroceder.Laila:“No voy a huir. Si Kael cree que puede destruirnos solo por lo que llevo en mi sangre, está equivocado.”Raiden la observó con orgullo, aunque dentro de él, Fenrir gruñía con preocupación.Fenrir:“Es valiente, pero joven. No permitas que la lleven al centro del peligro.”Raiden (pensando):“Lo sé, pero no puedo quitarle su voz. Ella es parte de esta batalla.”Aria, que había permanecido en silencio hasta ahora, dio un paso adelante, su voz firme.Aria:
El equipo liderado por Raiden y Aria se dirigía hacia el territorio de Luna Oscura, un lugar cargado de historia y peligro. La misión era clara: recuperar el orbe antes de que Kael pudiera reclamarlo. Sin embargo, esta vez, cada paso debía ser calculado; la seguridad de Cuarto Creciente y el destino de la manada dependían de ello.Antes de partir, Raiden reunió a Thane, Darius, y algunos guerreros de confianza para garantizar que las gemelas estarían protegidas. En el salón principal, Thane inclinó la cabeza en señal de respeto.Thane:“No se preocupen por la manada. Mantendremos todo bajo control.”Aria miró a sus pequeñas, Alma y Luz, que estaban abrazadas en un rincón, aún demasiado jóvenes para entender completamente lo que sucedía. Se arrodilló junto a ellas, acariciándoles el cabello.Aria:“Me voy por un tiempo, pero volveré pronto. Darius y Thane estarán aquí para cuidarlas.”Gabriel, que observaba desde un lado, apretó los puños con una mezcla de determinación e inquietud. De
El destello del orbe iluminó la sala del templo con un resplandor cegador, deteniendo la batalla en un instante. Los lobos de ambas manadas quedaron inmóviles, como si el tiempo mismo se hubiera detenido. Gabriel estaba en el centro, su pequeña figura bañada en una luz intensa que emanaba del orbe. Los ojos de Kael, llenos de furia y sorpresa, se clavaron en el joven mientras Raiden y Aria se movían instintivamente hacia él.Laila, aún recuperándose de la intensidad del enfrentamiento, sintió una conexión extraña con el orbe. Dentro de ella, Nyra habló con urgencia.Nyra:“Ese poder no debería ser tocado por nadie tan joven. Pero siente la pureza en su corazón, Laila. Esto no es un accidente.”Laila avanzó unos pasos, sus ojos brillando con una mezcla de preocupación y determinación. A su lado, Ciara se mantenía firme, observando el fenómeno con una calma tensa.Laila:“Gabriel, ¿qué estás haciendo? Esto no es para ti.”Gabriel, con el rostro iluminado por la luz, giró lentamente haci