Lejos de allí, en un departamento lúgubre en el centro de la ciudad, una mujer mira las noticias, llena de furia porque su Gerard ha sido acusado…

-Seguro fue esa puerca, maldit@ oportunista, pero ya vas a ver – toma una fotografía de Luz, enfocada desde lejos, tomada de la mano de Rafael -. Mientras mi pobre primo se moría por ti, tú andabas de paseo con tu amante. Seguro ese hijo ni siquiera es de Gerard…

Toma un abrecartas y con él apuñala la fotografía. Luego lo tira al bote de basura y la quema.

-Tengo que deshacerme de ti, pero ahora estoy sola. Ni siquiera mi tía me quiere ver, todo por tu culpa, porque vio tu cara de niña estúpida… ¡Estúpida!

Deja caer todo lo que tiene el escritorio y luego se tira de rodillas al suelo, llorando con el rostro entre las manos.

-Me corrió… por tu culpa, porque tenías que l