Luka *recuerdos*:Maldita la reunión con los franceses, si había algo de lo que tenía ganas esa mañana, era de seguir durmiendo, ¡pero no, tenía esa importante reunión!Como era de esperarse mi humor era de los peores en los últimos años- Luka que cara traes- ¿Qué esperabas Renzo?, pasé una noche de mier*da- No solo tú- Me importa un rábano los demás, yo me siento fatal y tengo que reunirme con esta gente para cerrar un negocio- También puede matarlos, como hacías antes- No me des buenas ideas – me reíLa vedad su comentario me hizo gracia, si bien era cierto, antes era lo que más hacía, ya iban a hacer unos cinco años que no me dedicaba a esa parte del negocio.Como bien le dije, mi noche había estado fatal, no recordaba bien lo sucedido, sabía que bebí más de lo acostumbrado- Para esos están los buenos amigos- Hablando de buenos amigos, ¿qué hice anoche?- ¿A parte de beber hasta lo que no debías?- Exacto- ¿En verdad no recuerdas nada?- Tengo muchas lagunas y los recuerdo
Alicia:Y allí iba, de la mano de uno de mis custodios, camino al altar, para casarme con un hombre que no conocía. Solo lo había visto uno vez en mi vida y era bastante traumática. Aunque debo reconocer, que todos estos años he tenido las más variadas fantasías con él. Por momentos me generaba estremecimiento, aquellos ojos fijándose en los míos, mientras me descubría detrás de la cortina, como toda niña tonta me enamoré de él, tal es así que cuando me dejó en mi habitación, le dije que me casaría con él, solo que no creí que lo fuera hacer en realidad. Pero también lo odiaba por lo que me había hecho, sacarme de lo que yo consideraba mi hogar, y matar a mi padre, pues por muchos años lo creí, recién ahora me enteraba de la verdad.Cada paso que daba en la iglesia, retumbaba en mi cabeza, en un par de oportunidades estuve a punto de perder el equilibrio, pues mi cuerpo temblaba por completo.No había querido encontrarme con él cuando se hizo la unión por lo civil, no fui capaz de est
Luka:Luego de toda la fanfarria de la ceremonia religiosa, nos fuimos de la iglesia, no sin antes soportar una andanada de griterío felicitándonos y millones de flores sobre nuestra cabeza. Ya me dolía la cara de forzar la sonrisa, estaba deseando que ese día terminara de una buena vez y poder volver a mi amada rutina; pero aún quedaba el banquete, y ese sí, sería un martirio. Por fin llegamos al coche, ante la atenta mirada de todos los presentes, fui todo un caballero y la ayudé a subir en él. Luego, del otro lado, tuve que acomodar el enorme vestido que llevaba para poder subir yo también. En realidad no entiendo a los diseñadores, pues cuando la novia va camino a la iglesia vaya y pase, pero a la vuelta hay otro pasajero en el coche, deberían prever eso y dejarnos un espacio.Ella no me miraba, por más que me esforzara, no lo hacía, así que tomé su mano. Dio un brinco, creo que la asusté. Pero logré mi cometido, me miró. Le sonreí, traté de ser amable, pero creo que fui algo síni
Luka:Cuando le dije que iba a consumar el matrimonio, su rostro cambió de expresión y vi reflejado en sus ojos un brillo que no pude descifrar, esperaba terror, o al menos algo de miedo, pero en lugar de eso mantuvo sus ojos clavados en los míos y su mirada… pues no pude saber de qué iba. Así que la volteé para que quedara de espaldas a mí, sabía muy bien que su vestido se desabotonaba en la espalda, pues estuve toda la noche observándolo y planeando la forma de quitárselo de manera rápida. Pero no había manera rápida, una fila de interminables botones lo cerraban por detrás.Logré desabrochar los primeros, eso bastó para dejar al descubierto sus hombros, los acaricié y la sentí estremecer, continué un poco más, hasta deprenderlo por completo. Su espalda desnuda se presentó ante mí. La observé por unos segundos y deslicé su vestido hasta el suelo. Ahora solo vestida una braga de encaje y las medias de fantasía a media pierna, todo era de un blanco inmaculado, como ella. Corrí el mech
Narrador:Luka no iba a reconocerlo de inmediato, pero esa noche había dormido como pocas, o tal vez ninguna, en su vida. La calma lo envolvía y Alicia les hacía sentir un confort desconocido.Luego de impedir que la joven se levantara, él volvió a dormir y fue entonces que ella aprovechó la ocasión y se soltó de su agarre.Se dio una larga ducha, se puso la única muda de ropa que encontró, un conjunto deportivo y zapatillas, luego buscó la cocina, es que en la noche con los nervios no había tenido ocasión de ver donde estaba, además de que él la había llevado directamente al dormitorio, sin más preámbulos. Así que recorrió un poco el apartamento, era lujoso pero frío, se notaba que era de un soltero. Todo estaba colocado de manera exquisita, nada desentonaba, seguramente le hubiera pagado a un decorador para que lo amoblara. Una de las paredes era totalmente de cristal, y una gran puerta daba paso a la gigantesca terraza. Estaba en el piso 16 y la vista de la ciudad desde esa altura
Alicia:La noche había sido por demás intensa. Yo estaba acostumbrada a dormir sola, pero ahora lo hacía en sus brazos. No es novedad que no he estado tan íntimamente con nadie, así que su contacto me ponía más que nerviosa. Pero su aroma era tan exquisito que me tenía embriagada y su cuerpo tan cálido, que el contacto directo con su piel, casi me quemaba. Por momentos era dulce y considerado, pero también era muy déspota, casi un tirano. Eso hacía que mis sentimientos hacia él fueran contradictorios. Cuando al fin se durmió pude liberarme de su agarre, al levantarme lo destapé y pude observar con tranquilidad su cuerpo, era perfecto, mejor de lo que había imaginado, mi corazón se agitó y mi pelvis punzó. Así que volví a cubrirlo y me metí en el baño para darme una larga y fría ducha. Al salir continuaba dormido, así que me fui en busca de la cocina. Durante el desayuno me dijo varias cosas, una es que volvería a mi antigua casa, eso me llenó de alegría, pero luego habló de unas regla
Narrador:Luego de esa intensa conversación, ambos terminaron de prepararse para el largo viaje. Alicia evitaba mirar a Luka, pero él la observaba en silencio.- ¿Tienes todo ya? – la interrumpió- ¿Qué todo Luka?, si aquí solo tengo esta muda de ropa que por cierto no sé ni cómo llegó, y el vestido de novia- Yo la hice traer ayer en la tarde, pues sabía que necesitarías algo con que dormir y luego con que viajar, así que hable con Mariela y ella hizo los arreglos- ¿Y el resto de mis cosas?- Ya están en el avión, como ella no sabía que ibas a querer llevar y que no, le dije que empacara todo, ya luego tú descartarás lo que no quieras- ¿Hasta los peluches? – y sonrió- ¡Sobre todo los peluches! – Luka no puedo evitar reír – he gastado una fortuna todos estos años en ellos, seguro que si los vendes podrás comprarte un auto- Un auto… - repitió pensativa- Sí, ¿qué sucede?- Ni siquiera se conducir, obviamente no estaba en los planes del viejo que tuviera uno- Los planes que Don Pao
Narrador:Al aterrizar, Renzo se adelantó para hacer traer los coches, el que llevaría a la pareja y los dos escoltas.Alicia y Luka, permanecían en sus asientos mirándose sí, pero en total silencio. Luego de unos minutos, ingresó uno de los escoltas- Señor Gentile, los coches los aguardanLuka no respondió, solo le hizo una seña de que había escuchado y el guardia se retiró. Con sumo cuidado, Alicia desabrochó su cinturón y muy lentamente se puso de pie, pero Luka lo hizo con la rapidez que, cuando Alicia dio el paso, se chocó con él y apoyo las manos en su pecho- Disculpa Luka… - pero él no respondió y la quedó mirando, así que ella repitió- Disculpa…- Quiero besarte… - le soltó de golpe- ¿Qué? – preguntó muy sorprendida- Eso, que quiero besarte- Luka yo …- Pero quiero que seas tú la que me lo pida- ¿Eh?Se dio media vuelta y se dirigió a la puerta, ella permaneció inmóvil, al llegar a la boca de la escalera se dio vuelta y le dijo- Vamos Alicia, ya quiero llegar a casaSi