POV NOAH
Dos días después.
Escuché ruidos a mi alrededor que me hacían querer despertarme, fruncí mi ceño al darme cuenta que otra vez me había quedado dormido.
¿Y si ya había quedado ciego por completo?
M****a, ¿por qué tuve que dormirme?
Zeynep es la culpable, si no fuera tan cálida y su pecho no fuera tan cómodo no me hubiera dormido.
Pero, ¿A quién quería engañar? Amaba con mi alma que estuviéramos durmiendo juntos. Mi semblante cada vez estaba mucho mejor, poder dormir diariamente nueve horas estaba ayudando mucho en ello.
Salí de mis pensamientos cuando escuché una dulce voz cantar.
Estas son las mañanitas
Que cantaba el rey David
Hoy por ser día de tu santo
Te las cantamos a ti
Despierta, mi amor, despierta
Mira que ya amaneció
Ya los pajaritos cantan
POV NOAH Tragué fuerte e hice exactamente lo que había dicho mi hermosa esposa. Una adrenalina empezó a recorrerme mientras estaba sentado en aquella silla esperando. La ansiedad y ganas crecían cada vez más en mi interior, este era un gran regalo de cumpleaños y lo recordaría por siempre. Zeynep bailaba espectacular, la forma en que hacía mover su cuerpo era demasiado atrayente y excitante, tan excitante que debía calmarme o tendría una erección con solo recodar las veces en que la había visto bailar. Suspiré, intentando guardar la calma. Las personas a mi alrededor empezaron a sentarse y acomodarse. Busqué con la mirada a Emma, pero no estaba, al igual que Sofia y Mia. ¿Bailarían ellas también? Una melodía de flauta me sacó de mis pensamientos, estaba atento y a la expectativa de que saliera. —Vamos mi amada, hazlo —murmuré. Y como si me hubiera escuchado, salió por aquella puerta dejándonos a
Habíamos llegado hace varios minutos, nos encontrábamos dentro de la casa en donde había sucedido todo, era demasiado bella y constaba de tres niveles, su patio trasero sin duda era lo mejor, había una piscina y hermosos arboles al rededor. Amaría vivir en un lugar así. — ¿A quién esperamos? —pregunté, observando a mi alrededor. Un señor mayor nos había recibido y desaparecido al instante, no tenía la menor idea de a donde podría ir. Noah aprovechó y me dio un breve recorrido por toda la casa, ahora que ya había terminado de mostrármela, nos encontrábamos sentados en uno de los muebles de la sala. Se notaba ansioso, muy ansioso. Yo también lo estaba, no podía creer que después de tanto tiempo Noah podría saber la verdad de lo que sucedió. Teníamos que dejar su pasado atrás, él tenía que hacerlo y vivir el presente sin ninguna preocupación o rencor, pero antes, tenía que saberlo todo, todas sus preguntas tenían que ser resueltas. —A que
— Elena Lambert .Noah se tambaleó un poco sobre su lugar al escucharlo.—Amor —musité, sosteniéndolo.—Mu-Muchas gracias por la colaboración signori Valentino, saliendo se le dará lo acordado —este asintió empezando a irse—. Mas a delante lo contactaré, y tranquilo, el asesino de su hijo pagara por lo que hizo.Cuando ya nos encontrábamos solos, respiro profundo y se dispuso a salir de la casa también.—Noah —lo llamé, pero no se detuvo hasta que llegó a su automóvil.¿En qué momento lo habían traído hasta acá?—Cipriano te llevará a casa.—No.— ¿No? —se volteó, viéndome con una ceja alzada.—No pienso dejarte, así que no trates de alejarme —respondí seriamente.
Una semana. Había pasado una semana desde que supe que mis padres y Ömer estaban en Francia, una semana desde que la madre de Noah se comunicó con él y desde que Noah había desaparecido casi por completo. Cuando llegaba a dormir, yo ya lo estaba y cuando despertaba, él ya no se encontraba. Había días en que ni siquiera llegaba a dormir. Le enviaba cantidades de mensajes que nunca eran contestados. No sabía que pasaba y me estaba volviendo loca. Anna solo me dijo que había problemas. ¿Pero qué tipo de problemas? ¿tenía que ver con su trabajo? ¿conmigo? ¿qué? Mi prima se suponía que llegaría hoy, pero no se había comunicado y Noah no había dicho nada, pero... ¿Cómo lo haría si ni siquiera nos veíamos? Me sentía como la primera vez que llegue acá a Francia, sola y sin nadie. Todos seguían con sus rutinas diarias y yo aun no podía salir de la casa, pero estaba muy cansada de estar sola y sin poder hacer algo, me h
—Traeré a tu hermana sana y salva, lo prometo, Canım (querida) Lo miré dándome cuenta de que no mentía, sus palabras eran verdaderas, pero no creía en ellas en estos momentos. — ¿Recuerdas lo que le dijiste a Ömer en el hospital? —pregunté, el frunció su ceño viéndome confundido—. Tú controlas Francia, mandas aquí Noah, pero en Turquía lo hace él y su familia. ¿Cómo piensas entrar en un terreno totalmente desconocido para ti? Eso cambiaba completamente todo, incluso su promesa. Él no podría rescatar a mi prima de las manos de Ömer, solo yo podía. No dejaría que él se arriesgara, nunca me perdonaría que algo malo le pasara por mi culpa, era mi problema y tenía que buscar una solución sin que nadie saliera herido en el proceso. Cuando iba a responder, la puerta fue abierta y por ella entró Alexia. Ni siquiera había tocado. —Acaban de llamar, tus hombres encontraron la ubicación —sonrió, su mirada solo estaba en Noah, hacia como
POV NOAH—Hermanito —gritó viniendo hacia mí.Tomó impulso y se abalanzó.Por instinto, recordando las cantidades de veces que Sofia lo hacía, la atrapé, pero una vez me di cuenta lo que hice, la baje y me separe de ella.—No soy tu hermano —aclaré hostil.—Pero mi mami dijo que lo eres —comenté confundida, mientras su ceño se arrugaba.Antes de poder hablar, escuché como Emmadecía uno de sus tantos diálogos de películas.— ¿Tu mami? Es una tonta.— ¡EMMA! —gritaron mis padres al unisono.—Y dicen que yo soy la oveja negra ja.—Nadie es la oveja negra Ethan —aclaró Anna —. Noah y Zeynep vengan, Emmacuida a la niña.La seguimos hasta su oficina en total silencio. Ya casi podía imaginarm
POV NOAH—No había nadie aparte de nosotros en esa casa Noah, Elena no cometería el error de dejar que alguien aparte de nosotros entrara a esa casa.Fruncí mi ceño viéndola confundido.¿Qué era todo esto? ¿Acaso estaban jugando conmigo?— ¿Por qué tendría que creerte? —cuestioné.—Te dije que te contaría toda la verdad —se veía terriblemente sincera—.Te juro que no había nadie más en esa casa... ¿Cómo se llama aquel hombre?¿Sería bueno decírselo? ¿Y si todo era un plan de ella con Elena?—Valentino —respondí de todos modos. Le creería únicamente por esta vez.—Valentino —susurró pensativa, pasaron varios segundos hasta que agregó—. Así se l
Me quedé unos minutos más después de que Noah se fuera. Tenía que pensar en todo lo que estaba pasando a nuestro alrededor.Era como si nuestras vidas fueran dirigidas por una montaña rusa. En un momento estábamos bien, pero en el otro nos veníamos abajo con miles de problemas y situaciones nuevas que no sabíamos cómo afrontar. Solo tenía dieciocho y el veintidós, éramos unos jóvenes inexpertos y la vida se había encargado de darnos aún más peso de lo que posiblemente podríamos cargar, pero, aun no nos rendíamos, aun seguíamos de pie batallando con todo lo que se estaba viniendo, nos hacíamos los fuertes y aunque lo fuéramos, por dentro también temblábamos del miedo, de la preocupación.Noah cargaba con mucho peso entre sus hombros como para que yo le agregara uno más, mi hermana era mi problema,