Capítulo veintidós
Dobla hacia un gigantesco centro comercial —Si claro, lo que tu digas mi irresistible. Ya llegamos asi que ve quitándote ese cinturón —él busca un estacionamiento y se parquea como todo un profecional, apaga el motor y desbloquea el bonito auto—a comer helado—mis ojos brillan con intensidad y desbloqueo rápido el cinturón.
Baja del auto y su teléfono suena, lo tomo, Amir abre mi puerta y le tiendo el móvil —Te están llamando—giro hacia él y espero que conteste.
Se da la vuelta y abre la llamada. Mis ojos escanean todo su tonificado cuerpo de arriba a abajo sobre esa fina y costosa ropa que lo deja ver como una super estrella inalcanzable, sus brazos, sus piernas, su espalda, su trasero, su cuello y ese cabello.
Dios mío, que papacito.
Cuelga y voltea hacia mí con una sonrisa—&iques
Capítulo veintitrésPov Amir Puedo sentir en enojo de cada uno de los participantes a mi al rededor, pero fuera de eso me encanta saber que Irina toma mi mano gustosa.Ya te perdí. Ruedo mis ojos ante el comentario de Eithan y gruño en respuesta al enorme escándalo que están haciendo un grupo de omegas y deltas sobre nuestra seguridad, al instante todos cierran la boca y agachan la cabeza en total sumisión —¿Realmente qué quieren que haga? Si no se protegen ustedes mismos, ¿Cómo pretenden que yo los cuide? Respeten lo que dicen los superiores en la manada porque ellos saben más que ustedes, y no es que los este llamando inferiores, pero deben comprender que ellos llevan órdenes directas de mi padre y ahora llevarán las mías,
Capítulo veinticuatroPov Amir Puedo sentir en enojo de cada uno de los participantes a mi al rededor, pero fuera de eso me encanta saber que Irina toma mi mano gustosa.Ya te perdí. Ruedo mis ojos ante el comentario de Eithan y gruño en respuesta al enorme escándalo que están haciendo un grupo de omegas y deltas sobre nuestra seguridad, al instante todos cierran la boca y agachan la cabeza en total sumisión —¿Realmente qué quieren que haga? Si no se protegen ustedes mismos, ¿Cómo pretenden que yo los cuide? Respeten lo que dicen los superiores en la manada porque ellos saben más que ustedes, y no es que los este llamando inferiores, pero deben comprender que ellos llevan órdenes directas de mi padre y ahora llevarán las mías, por lo tant
Capítulo veinticincoAprieto la mandíbula y agarro fuerte la cuchara en mi mano—realmente no quiero hablar de eso, ya te lo he dicho.—Es realmente importante que te cases con ella, no puedes tener amoríos imposibles ni mucho menos estar arriesgando a la manada—dejo la cuchara en el plato y lo observo directamente.—Dije que no quería hablar de eso.—¿Entonces cuando hablarás de eso, cuándo te la folles y luego la dejes por ahí tirada? Porque si es asi la casa es toda tuya por hoy—por mi columna pasa una ráfaga de calor y aprieto mi mandíbula.Tranquilo, Amir, tranquilo.No le contesto y me dedico a mirar a la dueña de mi vida a mi lado que juega con lo que tiene en su plato—Amir Dhall, no te lo vuelvo a re...—¡YA BASTA!—mi madre se levanta y g
Capítulo veintiséisPov IrinaCada beso lo recuerdo en mi mente como si fuera la mejor experiencia de mi vida y es que no me ha dado un beso cualquiera persona, no, me los ha dado Amir Dhall.El chico que cientos de chicas quieren.—¿Por que estás tan feliz mija? —sirvo mi plato de cornflake con efusividad —Y mira que tu solita te levantaste temprano, te bañaste y bajaste a tiempo, ¿te sientes bien? —asiento y busco la cuchara para mi plato.Como no me voy a sentir bien cuando dormí toda la noche pegada a un six pack y unos brazos relamente acogedores. Suspiro y llevo la primera cucharada de cereal a mi boca, debo comer rápido porque él pasará por mí en diez minutos.—Buenos días familia—dice mi papá al entrar por la puerta de la cocin
Capítulo veintisieteAaEl profesor hace una seña y sigue explicando su clase—Bien, decía que...Y así se pasa todo el día, la gente me mira de arriba a abajo a donde quiera que vaya, con Omar o sin Omar y estoy empezando a creer que casi todos son hombres-lobo por la forma en que me ven.Como si supieran lo mío con ojos azules.—¡Oye tú! —eso no es conmigo, Irina sigue—Tú—suspiro y me volteo.La hermana del mastodonte corre hacia mí—¿Si?—se detiene en frente mío —¿En qué puedo ayudarte? —ella me agarra de los hombros y me mete a uno de los salones vacíos del lugar—¿Eh, qué?—Necesito tu ayuda—junto mis cejas—Sí, la tuya—me suelta y da dos pasos hacia atrás.—Eh—miro h
Capítulo veintiocho(si quieres acción vete al capítulo 30 y luego regresa al 28)Pov Sra. SaraEstoy super enojada y no enojada con Wade.De igual forma, ¿qué mierda le pasa?Llevo casi dos días enteros de no hablarle desde que nos peleamos y en la casa ya todo el mundo lo sabe, hasta nana me ha preguntado por qué una pareja tan unida ahora está que ni siquiera se saludan el uno al otro.Pues la respuesta es fácil.Amir.A pesar de todo no entiendo por qué desea seguir casandolo con alguien que él no ama, se que es mi hijo y podría ponernos en riesgo con lo que él me dijo, pero es su vida, no la nuestra.Y aunque creo que me dijo la verdad, también sé que él me oculta algo, ese d&iacu
Capítulo veintinueve—Tienes que comer —asiente, me toma por los hombros y las piernas.—¿Te duele? —niego—Te llevaré a la cama asique debes ser fuerte ahora que te levantaré por si te duele algo— me alza haciendo tronar mis huesos y reprimo un grito de dolor, él aprieta el botón de ascensor y acerca su cara a la mía.Subo mi cabeza y él entiende el mensaje cuando pega sus labios con los míos haciendo una explocion de sabores en mi boca. Se despega de mí para entrar en el elevador y precionar el botón del tercer piso.Su perfil serio y preocupado es imponente y relamente tentador—¿Cómo le haces para verte tan sexy aún cuando apestas a alcohol? —me escanea y sale del ascensor, sonríe y camina hacia nuestro cuarto.—No lo sé, es un misterio, o
Capítulo treintaPov Irina**********************************Cada roce de su piel con mi piel arde y quema, una de mis manos exploran su ancha espalda mientras que la otra sube por su perfecto abdomen esculpido.—No hagas eso si no sabes lo que puedes provocar —Amir se separa un poco de mí y vuelve a su trabajo.Estimularme y besar mi cuello.De mis labios salen pequeños suspiros y cierro mis ojos.No puedo creer que alguien como él sea mi novio y mucho menos que me tome como suya.Por mi cuerpo empieza a pasar una electricidad hasta mi intimidad y cierro las piernas de golpe—¡Oh Dios! —él sigue con su trabajo y doy un fuerte jadeo.No puedo más.—Amir— gimo y tapa mi boca con una de sus manos, siento como sus