25

Capítulo veinticinco 

Aprieto la mandíbula y agarro fuerte la cuchara en mi mano—realmente no quiero hablar de eso, ya te lo he dicho. 

—Es realmente importante que te cases con ella, no puedes tener amoríos imposibles ni mucho menos estar arriesgando a la manada—dejo la cuchara en el plato y lo observo directamente. 

—Dije que no quería hablar de eso. 

—¿Entonces cuando hablarás de eso, cuándo te la folles y luego la dejes por ahí tirada? Porque si es asi la casa es toda tuya por hoy—por mi columna pasa una ráfaga de calor y aprieto mi mandíbula. 

Tranquilo, Amir, tranquilo. 

No le contesto y me dedico a mirar a la dueña de mi vida a mi lado que juega con lo que tiene en su plato—Amir Dhall, no te lo vuelvo a re... 

—¡YA BASTA!—mi madre se levanta y g

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP