Thea miró a Zavier con cara de desconcierto y preguntó: “Señor Zavier, ¿el Señor Caden se reunió con usted en privado?”.

“¿Eh?”.

Zavier se quedó perplejo mientras miraba a Thea.

¿Podría ser que Thea aún no conociera la identidad de James?

¿Quién era ese Señor Caden del que hablaba?

¿Era James?

Tras quedarse momentáneamente aturdido, asintió con la cabeza. “Supongo que se puede decir eso”.

¡Uf!

Thea respiró hondo.

Como era de esperar, era el Señor Caden quien la ayudaba en secreto.

¿Qué había hecho ella para merecer esto?

“Siento haberme entrometido, Thea. Sé que soy indigno. Te juro que no volveré a molestarte”.

Al decir esto, miró a James.

Al ver que James seguía engullendo su comida, se quedó callado. Después de hacer una reverencia, se dio la vuelta para marcharse.

Los Callahan se quedaron boquiabiertos.

Gladys solo consiguió recobrar el sentido común cuando Zavier se marchó. “Es el misterioso Señor Caden otra vez. ¿Quién es exactamente? ¿Por qué Zavier está tan aterr