Henry no logró obtener una respuesta y se limitó a conducir hasta la sede de Farmacéutica Pureza.

Cuando llegaron, los empleados de Farmacéutica Pureza ya habían salido del trabajo y todo el edificio estaba completamente oscuro.

“James, son casi las diez y no queda nadie. ¿Por qué no volvemos mañana?”.

“¿Qué mañana? Dirígete a la fábrica de Farmacéutica Pureza”.

“De acuerdo”.

Henry se dio la vuelta y fue a la fábrica de Farmacéutica Pureza.

La fábrica estaba ubicada en los suburbios y estaba bastante lejos.

Mientras se dirigían a la fábrica, Jake ya había reunido a mil hombres y trescientas excavadoras que se dirigían allí.

Jake también tenía otra identidad como el doctor prodigio de Cansington, Jay Fallon.

Era imposible para él no conocer a Farmacéutica Pureza ya que controlaba la red de inteligencia clandestina.

Farmacéutica Pureza tenía muchos accionistas, incluido un alto funcionario del departamento legal.

Sin embargo, los verdaderos dueños de la compañía eran Grupo Com