“Señora Lee, Señor Sullivan, estoy segura de que ustedes dos están al tanto de la situación actual de la Capital. La división de fuerzas se ha ido aclarando poco a poco. Varias facciones han empezado a actuar, y casi todas las familias importantes y los antiguos artistas marciales han tomado posiciones”.

Yasmine miró a Maxine y dijo en voz baja: “¿Es la razón por la que has pedido reunirte con nosotros para convencernos de que elijamos un bando? Escuché que no dudaste en pedir la ayuda del Rey para estabilizar tu posición como cabeza de familia de Caden”.

“Ja, ¿el Rey?”.

Maxine soltó una risa ligera al decir: “El Rey actual no es más que una marioneta. Aunque ha establecido su propio círculo de poder durante su reinado, no tiene el poder para estabilizar mi posición como cabeza de familia. Alguien más me ayudó”.

“¿Quién?”,

preguntaron Yasmine y Zaiden al unísono.

Maxine respondió con calma: “La Secta Celestial”.

Los dos se levantaron al mismo tiempo y exclamaron: “¿La Secta Cele