En ese momento, otro sonido, ronco pero claro, cortó el silencio. "¿Por qué lloras? La luz de la luna es tan hermosa, y es raro que te lleve a dar un paseo..."

"mmh...", quiero decir que quería ver el paisaje de la pradera, no... ¡Ah..." No esperaba que Lucio la empujara repentinamente con fuerza mientras el caballo brincaba, haciendo que un gemido escapara de sus labios. Luego vinieron una serie de gemidos y suspiros. A medida que los baches se volvían más intensos, ella no se preocupaba por dónde estaban. Comenzó a gemir más y más fuerte, a veces subiendo y bajando, hasta que su rostro se volvió rojo de vergüenza.

En ese momento, los dos estaban a caballo. La ropa del hombre estaba intacta, pero la mujer estaba completamente desnuda, todo su cuerpo abrazado por el hombre. Inicialmente cara a cara, los brazos del hombre estaban alrededor de sus piernas dobladas mientras ella se aferraba al cuello del hombre con ambas manos. Con los movimientos del caballo, el rebote era diferente a c