¿Qué?

Después de que Magnolia oyera lo que dijo Ricardo, se quedó boquiabierta.

¿Por qué este hombre había vuelto a decir tonterías?

¿Estaba él para ser su apoyo?

Ella parpadeó, —señor Vargas, si hubiera sabido que usted tenía esta actitud, ¡definitivamente no habría pasado tres años tan duros!

—No es tarde para saberlo.

La mirada del hombre era oscura, y el significado de sus palabras ya era obvio.

Magnolia vio sus ojos, los latidos de su corazón se aceleraron bastante de manera incontrolable, no importaba como lo mirara, era muy guapo Ricardo.

El tono de Ricardo era plano, —Tampoco tienes que contestar ahora, puedo darte tiempo para que lo pienses.

Ella volvió rápidamente en sí y contestó, —señor Vargas, tu amor tardío no significa nada.

Cuando terminó de hablar, el rostro del hombre se ensombreció.

Habló con los dientes apretados, —Magnolia, ¿tienes que hablar así?

Él ya lo había dejado tan claro y le había prometido tantas cosas, ¿ella seguía sin estar dispuesta?

Mostró una mirada