Al cabo de unos minutos, ya me encuentro totalmente lista para salir por fin con mis amigos Emelie y Carlos. Lamentablemente tengo que tener detrás de mi acompañándome todo el tiempo a este chico que ya ha comenzado a fastidiarme un poco sin embargo hago mi mayor esfuerzo para poder ignorar por completo su existencia e intento hacer que no me afecte en lo absoluto. Vamos en silencio, aunque el va detrás de mi, a veces cuando pasamos por lugares, o mejor dicho, frente a tiendas donde tienen espejos camino un poco más lento para asegurarme de su reflejo, y efectivamente, su reflejo no se ve, nada más aparezco yo sola. Quisiera sentir que estoy caminando sola. Pero tal parece que no podré nunca más. Es ocasiones me hace algunas preguntas y quiero abstenerme por completo de responder por que todo me parece demasiado absurdo pero al parecer le parece muy entretenido preguntarme sin parar tantas estupideces. Pero por supuesto que voy a seguir ignorando todo lo que me diga por que nada más
¿Acaso la vida misma era cierta? ¿Y si todo lo que vemos a nuestro alrededor es simplemente una imaginación? O una simulación que está guiada por otras personas o por unos seres superiores a nosotros que hacen lo posible para tenernos bajo una burbuja con nuestro propio ecosistema. ¿Y si solamente están protegiéndolo todo de algo mucho más allá que no nos imaginamos en lo absoluto? —Vaya. Enserio que puedes llegar a pensar en muchas cosas que ni siquiera yo mismo me he cuestionado, ¡y hey! Estoy muerto, puede salir de la tierra si así lo deseo para visitar a otros planetas y créeme que jamás había pensado en nada de lo que pensaste ahorita. Y de nuevo mis pensamientos se ven completamente interrumpidos por una sola persona en este planeta capaz de leer mi mente sin necesidad de estar tan cerca de mi, inclusive estando a cien millas de distancia el uno del otro es capaz de escuchar todo lo que estoy pensando. Pero bueno, decido ignorarlo para seguir con mi caminata para encontrarme
A pesar de que Owen tenía perfectamente claro de mi parte que no podía hacer nada contra nadie y que tampoco tenía el derecho de molestarme por que se lo pedí de diferentes maneras y millones de veces, aun así se sintió con todo el derecho de iniciar una guerra de comida en la cual todos íbamos a terminar perdiendo, por el simple hecho de que en lo absoluto podía decirle a esos chicos de la mesa de enfrente que no había sido Carlos quien les lanzó las papas fritas si no un fantasma, o peor aún, un ángel de la guarda. Solamente iban a reírse en mi cara o quizás iban a internarse en un hospital psiquiátrico. En el momento que veo que uno de los chicos de aquella mesa se levanta ahí es cuando comienzo a preocuparme seriamente por la vida de Carlos. Es un chico muy alto y corpulento que tiene aspecto de que con un solo puñetazo podría matar a cualquiera, así que me hago casi bolita en mi asiento y Carlos traga grueso cuando ese chico se acerca por fin con una mirada de evidente enojo. C
—¡Toma esto, poste con patas!—le grito al moreno al mismo tiempo que tomo entre mis manos otro puñado de spaguetti con extra de salsa pero fue mucho más rápido que yo y se se agachó para que la pasta no cubriera su rostro. A cambio de eso bañé de salsa a una pobre señora que estaba allí tranquilamente comiéndose una dona. La señora nos mira con enojo y se levanta de la mesa y se retira del lugar. Creí que haría algún problema pero en realidad solamente tomó sus cosas y se fue. Que extraño, ¿no parece eso muy raro? Que solamente se haya ido así como así. Pero bueno, en fin. El caso principal no es ese, de hecho es otro muy distinto. Mi sexto sentido dice que hay que lanzarle más spaguetti por que si no no puedo estar en paz conmigo misma, necesito lanzarle más pasta. Pero el chico parece que practica ballet por que da unos saltos demasiado artísticos y se ve que es demasiado ágil cada vez que le lanzamos algo sabe como evadirlo por completo. Vaya, nos ha salido bastante mal todo el
Así que después de haber pasado por semejante situación, tomo una respiración profunda para regular mi pulso por que esta algo acelerado a pesar de que toda la situación ya pasó y no hay nada más que pueda hacer. El desespero y la confusión aún permanecen en mi cuerpo pero de a poco va desapareciendo y tomando cada vez menos fuerza. En ocasiones nos creemos que somos invencibles pero la verdadera historia es que por supuesto que no lo somos, a veces podemos ser algo débiles sin darnos cuenta por que cuando más invencibles e inmortales nos sentimos es cuando más cosas nos suceden. Con esto no quiero decir que hay que sentirnos todo el tiempo débiles y que siempre vamos a tener una debilidad en frente de nosotros pero si tener claro que no son indestructibles. Somos vulnerables en ocasiones y hay que aceptarlo. —¿Estas bien?—me pregunta Owen con la mirada preocupada y el ceño medianamente fruncido pero no le hago mucho caso ya que Carlos, Emelie y Mike me observan y no puedo hacer nin
Al terminar la discusión con Emelie, ha decidido dejar de hablarme un buen rato. Solo se ha dedicado a ignorarme durante lo que resta de la tarde por alguna razón desconocida. Su carácter es tan fuerte y su firme decisión de no hablarme hasta que su molestia cese es impenetrable e indudablemente absurda. Si, es algo absurso que me deje de hablar por un chico. Un chico cuya mirada ni siquiera está puesta sobre ella, un chico al cual no conoce en lo absoluto y solo ha tenido la dicha de verlo unas cuantas veces. Pero ella se pone en ese modo de "es mío, que nadie lo mire" y está muy mal. ¿Que le sucede cuando un chico no le corresponde? Se convierte en una persona totalmente diferente a como es en realidad y solamente busca excusas para poder tratar mal a quienes quiere cuando se encuentra en su nivel máximo de frustración. -Haley, ¡no entiendes nada! Me gusta demasiado Mike. Intento contener mi molestia e irritabilidad solamente para que no nos gritemos de nuevo, pero me está colma
NARRADOR OMNISCIENTE -Su sobrina ha estado teniendo alucionaciones desde que su padre falleció-le indica uno de los doctores a Amy, la tía de Haley-. O eso pensamos, pero necesitamos más información de su parte. ¿Ha notado algún comportamiento extraño de su sobrina ultimamente?Amy asiente con la cabeza y suelta un largo suspiro. -Sí, lo he notado. A veces habla sola y cuando le pregunto con quién solo me dice que está hablando con su angel guardián. También la he visto mirar por la ventana y susurrar cosas, pero no tengo idea de que. Quiero ayudarla pero no tengo idea de como. Una vez me intenté acercar y casi me deja sin brazo, doc-. le enseña su antebrazo donde claramente tiene una enorme mordida humana y comienzan a aparecer los moretones.El doctor frunce el ceño al ver la herida de Amy y le pasa una receta.-Lo mejor es que la ingresemos en el hospital por unos días. Necesitamos hacerle unos exámenes más profundos y ver si podemos encontrar la causa de sus alucinaciones. Tal v
Era una noche oscura, muy fría, estaba el cielo nublado y además estaba lloviendo demasiado fuerte. Paula estaba embarazada de su sexto hijo, fue un embarazo realmente bastante complicado, porque la madre sufría de hipertensión arterial, y gracias a un diagnóstico realizado posteriormente, le notificaron a Paula que ya no podría tener más hijos, porque eso afectaría directamente a su salud, y que existe el riesgo del 60% de que sufra un paro, también existía el riesgo de abortar espontáneamente a su sexto hijo. Hace apenas 1 año Paula había tenido un hijo, el que apenas duro respirando unos segundos. Este había nacido con problemas de salud desconocidos, ningún doctor se atrevía a dar un diagnóstico verdadero del estado de salud. Esa noche Paula al conocer la noticia, sufrió un colapso mental que la obligo a estar días internada en un hospital.Todos estos problemas tenían que sufrir la familia Freud causaban una gran impresión, que saturaba el ambiente de intranquilidad. Estos probl