Daniel.-Ahora resulta que me he convertido la pera de boxeo de la familia Doman, solo falta que Eliana también me golpee, voy directo a la cocina para ponerme hielo, cuando llego veo a Derek solo con un pantalón de chándal, un helado y sirope de caramelo en la mano, lo interesante es que no le veo en la mano una cuchara y sonriendo con picardía, se gira y al verme se le borra la sonrisa.— Pero ¡¿Y ahora quién te golpeó?! –Preguntó dejando sus cosas en la encimera se acercó al refrigerador sacando una bolsa de hielo.— Emily, estábamos hablando de las condiciones de nuestro “matrimonio” ella sugirió que cada uno hiciera su vida como quisiera sin entrometernos y…— Y tú solo abriste la boca y lo estropeaste –Casi lo fulmino con la mirada.— Solo le dije que debía comportarse, que no pensará de manera inmediata en salir con alguien y ¡Pum! golpe a puño cerrado en mi cara y todavía sentía ardor por la bofetada que me dio su mamá.— No puedes seguir así, tiene sentido que cada quien teng
Emily.-Pues el quedarme sola anoche resultó bien aunque extrañaba a mi hijo siento que necesitaba ese momento a solas, desde hoy llevaría las cosas con calma haría el intento de no discutir y evitaría los problemas y las discusiones.— Hola amiga buen día –Anna entró con una gran sonrisa en su rostro, tenía el aspecto de una lechuga fresca.— Buen día, te ves bien— Sí el día está precioso ¿No crees?— Parece que tinker bell te poseyó –Soltó una carcajada.— Vine a hablar contigo sobre la boda –Fruncí mis cejas.— ¿La boda?— ¡Claro Emily tu boda! Mira pensé que podríamos hacerla aquí en el jardín y— Anna, Annna ¡Detente! No habrá ninguna boda, Daniel y yo nos casaremos en el juzgado con testigos y listo, esto no es un matrimonio normal ¿Qué te sucede? –Expresé con irritación.— Amiga lo siento, es solo que pensé que…— Pues no sé qué hayas pensado, Anna no crea que esto va a terminar como tú y Derek, el que hayas tenido tu cuento de hadas no significa que yo también lo tendré dejar
Daniel.-Amanecer con Diogo durmiendo a mi lado fue la mayor alegría que tuve que desde hace mucho tiempo no tenía, nos lavamos los dientes juntos incluso me pidió que le pudiera un poco de mi crema para afeitar y un poco de mi loción.Pensé que ese sueño de ser padre había muerto en mí, pero este pequeño es como si me hiciera renacer y querer en mi vida lo que en el pasado siempre quise una familia.Llevé a Diogo con Nora y los hijos de Derek hasta la sala de juegos, ella les había servido el desayuno a todos y fui en busca de Emily para conversar.— ¡TÚ! –Derek caminaba furioso hacía a mí, con Anna corriendo detrás de él. –Acabo de ordenar que tus ganancias de la empresa no se te depositen ni este ni los próximos dos meses. –La loca de tu futura esposa se acaba de llevar ¡MI AUTO!— ¿Cuál de todos? –Le pregunté.— El nuevo –Susurró Anna, cerré los ojos ese auto Derek casi ni lo manejaba y ese auto apenas solo dos meses que había salido al mercado.— Si esa loca le hace algo a mi car
Vanessa.-Había llegado el momento de presentar a mi futuro esposo ante el consejo, estaba ansiosa por verle la cara al viejo morboso de Massimo cuando vea que su bastardo apoya mi liderazgo.Leandro realmente lo odia, con el riesgo de que pudiera traicionarme le informé que él podía convertirse en el líder de la organización, pero eso significaría ponerse en mi contra, pero lo he tratado como un hombre llenándolo de afecto, consintiéndolo y utilizando mis tácticas en la cama, es igual de lujurioso que su asqueroso padre y solo con eso se arrodilló jurándome su lealtad absoluta. Solo me pidió una cosa ayudarlo a vengarse de su padre lo cual el voy a conceder.— ¿Estás listo? –Me acerqué acariciando su pecho, dejando un beso en su mejilla.— Más que listo mi reina, hagamos que le dé un infarto a ese desgraciado –Sonreí satisfecha.Entré a la sala donde ya se encontraba reunido el consejo, Massimo me miraba con atención hoy me había colocado un corsés que realzaba mis pechos, sus ojos m
Emily.-Un trueno me hizo despertar sobre exaltándome miré hacía la ventana estaba oscuro y llovía a cantaros, me giré y a mi lado estaba Daniel dormido se veía tan sereno, suspiré restregando mi rostro ¿Fui una estúpida al entregarme a él? Fije mi mirada en el techo nunca lo dejé de amar y volví a entregarme como siempre lo hice con amor.La pregunta es ¿Lo habrá hecho como una medida de venganza? ¿Querrá humillarme de nuevo? ¿Qué pasará ahora? Nos casaremos, viviremos juntos con Diogo, creo que hoy cometí el peor error, me levanté lentamente sin despertarlo y salí de la habitación sobre el suelo vi su sudadera y me la coloqué, me senté en el sofá por una parte me arrepentía, pero por la otra estaba feliz de volverlo a sentir.Fui a la cocina por un vaso de agua sentir el líquido frío recorriendo mi garganta una clara sensación de que lo que sucedió no fue un sueño, sus manos envolvieron mi cintura.— Mi ropa siempre te vio mejor en ti –Susurró en mi oído acariciando mi muslo. –Las v
Daniel.-Aún sigo sin poder creer lo que hice, pero volver a tenerla entre mis brazos me devolvió a la vida era lo que necesitaba ya no podía negarlo más, acaricié su espalda sonriendo. El día amaneció lluvioso un clima excelente para quedarse en cama justo así como nos encontrábamos, pero el sonido del timbre rompió el momento.— ¿Sonó el timbre? –Preguntó con la voz adormilada, besé la punta de su nariz sonriendo.— Espera aquí veré quién es –Salí de la cama poniéndome solo los pantalones, restregando mis ojos, no vi por la mirilla antes de abrir, cuando lo hice estaba mi amigo, mirándome de arriba abajo. – ¿Qué quieres?— Después de una noche de sexo de reconciliación ¿Amaneces con ese humor? ¿Perdiste facultades o qué? Anna envió esto y de mi parte ¡Gracias y de nada! Les compré el desayuno -Le arranqué la bolsa y la maleta de las manos antes que dijera cualquier estupidez y le cerré la puerta en la cara. –Vuelvo a repetir de nada, abre la puerta –Lo hice cruzándome de brazos. –An
Emily.- Me sentía en la nubes había vuelto con el hombre de mi vida, nunca lo dejé de amar y fue glorioso saber que nunca me dejó de amar, que ninguna mujer logró ocupar mi lugar ni borrar las huellas que dejé en su vida, en su piel, me reafirmó que solo yo soy su dueña así como él lo es de mí.Deseábamos alargar esta mini luna de miel, pero teníamos obligaciones y yo extrañaba mucho a mi niño, íbamos en la camioneta tomados de la mano como dos adolescentes enamorados, aunque para ser sinceros así nos sentíamos.— Cuando lleguemos déjame a mi hablar con mi madre ¿Si?— Cielo, vamos a enfrentarla juntos –Besó mis dedos sonriendo. –Juntos hablaremos con ella no le temo— ¿En serio? –Pregunté un poco divertida.— Te voy a castigar –Amenazó con voz tan sensual.La mansión de Derek se abrió paso frente a nosotros, habíamos llegado justo en la hora del desayuno, todos estarían reunidos, estaba un poco nerviosa, sabía que mi madre no se iba a tomar bien que haya vuelto con Daniel, suspiré c
Vanessa.-Nunca pensé que estar comprometida en matrimonio me traería tanta satisfacción, el consejo había aceptado a mi futuro marido obligando a Massimo a iniciar los preparativos de mi ceremonia, el viejo estaba a punto de caérsele el cuero de la cara.Los negocios iban bien y Leandro estaba cada día más idiotizado por mí, pero aún era muy pronto para contarle mis planes en contra de Daniel, no quería arriesgar mi suerte lo necesitaba, perdidamente loco por mí antes hacerlo parte de mis planes.— Signora— Valentino –Saludé a mi asistente.— Tiene que ver esto –Alcé la mirada frunciendo mi ceño, me extendió un folder.— Te ves muy serio, me preocupas –Desvió su mirada a la carpeta que acababa de darme, la abrí y comencé a leerla detenidamente mis ojos se abrieron como platos la información me dejó en shock. – ¿Está confirmada está información?— Si señora se encontraron los registros— ¿Él lo sabe? –Mi respiración se agitó.— Todo parece indicar que no –Me respondió Valentino seren