Jen SaldañaMiamiLa pregunta tenía validez, desde que pasó lo que habia pasado con Lupita en la comida preferimos ya no acercarnos más a la celebración. Para qué, si ella iba a seguir con sus reclamos y sugerir no sé cuántas cosas más. Los demás podían empezar a dudar y era lo que no queríamos.–Sí, lo que pasa que Jacob tenía que irse a dormir temprano a su casa. Él trabaja también hoy y con la desvelada del sábado él quería descansar temprano.Pues me pensaba que sería lo normal, muchas personas tenían que presentarse a trabajar los lunes, era algo de lo que tenía que hablar con Jacob, no sabía qué hacía, ni en que trabajaba.–Entiendo, ¿Sabes Jen? Vas a perdonarme, lo que te voy a decir. Pero no me creo mucho eso de tu relación con ese muchacho.Lo dicho por Luz Mary, me hizo tragar saliva de prisa y muy angustiada. Esperaba de verdad que esta venida a tomar el sol no fuera para decirme que ella sabía que todo esto era una farsa. Que tenía pruebas y que ya no debía seguir mintiend
Jacob GarcíaMiamiJen estaba muy callada, aun cuando ya nos encontrábamos solos. La abracé con ternura y la tuve así en mis brazos, dándole la oportunidad de que fuera ella quién me dijera que era lo que le pasaba y al ver que no lo hacía, yo empecé a hablarle.—Jen, ¿Que tienes preciosa? Te noto muy triste.—Nada Jacob, pensaba que será mejor decir a toda mi familia que esto de nosotros es una farsa. Además Luz Mary sospecha, mi cuñada es la mujer más inteligente que conozco y ella no me cree nada lo nuestro, me lo estuvo diciendo.—Ya Jen, no te pongas así. Hasta tus padres se han creído que somos novios y los demás tendrán que creerlo tarde o temprano.—No Jacob, ve lo que dijo Lupita en la casa de mi tío Porfirio. Creo que es mejor que yo asuma mi verdad y esa es que estoy sola.—No Jen, es en serio cuando te digo que me gustas y mucho. Que quisiera que nos podamos conocer más y esto que empezó como un montaje termine siendo real.—Tu también me gustas y mucho Jacob, pero no tene
Jen SaldañaMiamiEse mismo día luego de ver a Jacob regresé a la clínica veterinaria y ahí estaban Dulce y Emiliano con sus caras curiosas, supongo que querían saber ¿Por qué me fue a llevar Jacob? Claro nadie se habia esperado que apareciera de repente.–Con razón dejaste a tu guapa cuñada sola en la playa – Se burló Emiliano – Me hubieras avisado para ir a hacerle compañía.Si mi cuñada se enteraba de lo que decía Emiliano de ella, sería capaz de jalarle las orejas y darle un par de nalgadas. Luz Mary era muy seria y si a mi hermano lo tenía bien checado imagínense como se pondría al saber de las locuras de mi amigo.–Yo no sabía que iba a llegar Jacob allá y la verdad no sé ya que hacer con él – Dije desanimada.Lo que me habia dicho me rondaba la cabeza, pero hasta ahí. Ya quería que se terminara toda esta farsa y si él estaría apareciendo de vez en cuando agrandaría más la mentira, pues cuando se regresara toda mi familia ya no habría más necesidad de que viniera.–Haz lo que cu
Jen SaldañaMiami–Sí, por favor. Ahora voy, gracias Dulce – Le respondió Emiliano.–Ve a atender a tu paciente, mientras revisaré y le cambiaré las vendas a “veneno” – Le dije a Emiliano.–Gracias, Jen. – Salió a ver a su paciente.Fui a revisar a veneno y estaba mucho mejor que esa mañana que tuvimos que sondearlo porque se obstruyó de las vías urinarias y por eso tendría que pasar la noche ahí en la veterinaria. Le di unas caricias y un beso en su cabeza felina, era un gatito hermoso y lamentaba mucho que estuviera sufriendo, pero al menos dándole cariño podía reconfortarlo un poco.Le cambié las vendas y lo curé y luego Dulce me ayudó un rato a acompañarlo ya que se desocupó de bañar a sus pacientes. Luego se volvió a ir y me quedé sola de nuevo.–Jen, ya es hora de comer. Se acaba de ir mi paciente – Dijo Emiliano – Yo creo que pedimos algo, para más tarde ir un rato a nuestras casas.–Estoy de acuerdo, dile a Dulce que encargue lo que quieran. A mí me da lo mismo, con el hambre
Jen SaldañaMiamiJacob me abrazó y me besó efusivamente, yo no sé porque motivo me dejé arrastrar por él y terminamos haciendo todo un espectáculo delante de mi mamá que estaba fascinada por mi “relación” con Jacob. Estaba más entusiasmada y se moriría de la pena cuando se enterara de la verdad, eso era lo que más me afligía el haber tenido que mentirle. No era mi intensión, pero lo tuve que hacer.–Buenas tardes, veo que interrumpo algo – La voz de mi papá hizo que nos separáramos, pero a la de ya – Jen, ¿Qué clase de espectáculo es éste?Me quedé quieta en mi sitio, no podía ni ver a mi papá a los ojos, así que me quedé tal cual. Jacob se puso delante de mí, como protegiéndome y se lo agradecía aunque mi papa nunca ha sido de pegarnos ni a mis hermanos ni a mí. Nos castigaba con prohibirnos las cosas, como los videos juegos o los celulares, pero nunca habia usado la violencia contra nosotros.–Buenas tardes señor Pancho – Lo saludó Jacob – Todo es mi culpa, tenía muchas ganas de ve
Jacob GarcíaMiamiLuego de dejar a Jen, esa tarde en la veterinaria su padre me llevó con él a un lugar dónde pudiéramos hablar lejos de Jen y de Melanie. Se le veía molesto por lo que acababa de ver en su casa entre Jen y yo y debí suponer que así sería. Las personas provenientes de países latinos solían ser demasiado conservadoras. Pues sus costumbres eran muy diferentes.Llegamos a una zona en la playa y Don Pancho se estacionó. Ahí bajamos y caminamos en la playa un poco para alejarnos de los turistas y después comenzó el interrogatorio. Bueno tengo que reconocer que era algo que me temía y de seguro yo lo habia provocado antes de tiempo.–Dígame jovencito de hombre a hombre ¿Qué intenciones tiene con mi hija? Yo no estoy para nada de acuerdo con lo que me encontré llegando a mi casa, hace rato –Me preguntó Don Pancho –Además tengo un pollito que comerme con usted y después ya me tocará comerlo con Jennifer.Nada más de decirme que nos íbamos a comer un pollito, mi corazón se ace
Jacob García Miami –Está viéndose lento, jovencito, ya se estarán casando mis nietos los hijos de Ethan y Luz Mary antes que ustedes dos y eso sí que no y le diré algo de una buena vez Jacob o toma en serio a mi hija y formalizan lo más pronto posible o mejor deje de quitarle el tiempo y retírese, para que ella pueda conocer a otro muchacho con quién hacer vida. El reloj biológico de una mujer camina y no se detiene. A esas alturas de la plática Don Pancho ya me estaba cayendo mal, obviamente era un señor del siglo pasado y eso me hacía entender más a Jen. La presión de su familia era por demás inmensa y no había manera de calmarla. Además Jen era muy joven y hoy en día las mujeres tienen hijos hasta después de los 30 ¿Qué prisa tenía este señor? Traté de entenderlo y de no decirle nada que fuera a empeorar las cosas. –Hagamos algo Don Pancho, ¿Cuánto tiempo cree usted poder darme para definir bien las cosas con Jen? – Le pregunté tomando en cuenta su opinión y por supuesto, su nec
Jacob GarcíaMiami–Jacob, tenemos que hablar muy seriamente, hijo.Me encontraba arreglando mi maleta, me iría al departamento de Christoph por unos días ya que él estaría en un torneo en Australia y me quedaría a cuidárselo. Mi padre estaba muy molesto por eso, pero para mí era importante ya que estaría cerca de Jen y hoy necesitaba el espacio para la cena que tendríamos.–Dime, papá. ––Veo que ya no tienes mucho interés en la franquicia que abriremos en el sur del país, te he notado bastante disperso de tus responsabilidades.Mi padre Mijaíl Smirnoff, era un magnate de la rama de la salud, con una variedad de clínicas de especialidades. Y como yo me habia decidido por el cuidado de los animales, estábamos negociando unos terrenos precisamente en el sur del país, para montar una de las clínicas más prestigiosas a nivel mundial, pero estaba centrado en otras cosas, lo admitía, Jen era mi prioridad en estos momentos.–No es eso padre, en cuanto regrese Christoph de su torneo me pongo