Leonardo no le quedo de otra que invitar a sus invitadas a quedarse después de lo que confesaron, el ritual solo se hace durante luna llena y sus hijos deben estar presente para lo de la sangre. Se quiso oponer a esto pero no le queda otra opción ya que el poder debe ser distribuido o podría morir almacenando tanto, suspira por quinta vez mirando el techo de la habitación.
—¿Pasa algo? —pregunta la loba mirándolo desde el tocador, Leonardo esta tan metido en su cabeza que no responde, Kara se pone de pie y sube a la cama para posicionarse sobre el alfa—, Leo, te estoy hablando.
—¿Qué decías?
—¿Qué si sucede algo malo?
—No, —murmura llevando su mano a su cadera y hacer que se acueste sobre su cuerpo—¿Cómo va con lo de los sangrados?
—Se han detenido, creo que debería ir con el médico para que verifique como va todo eso, —este asiente de acuerdo con ella.
—¿No duchamos?
—Acabo de hacerlo, ve solo, —se mueve hasta quedar en la cam
—Bueno Kara todo anda perfecto, tus trompas están restablecida y ahora eres una mujer fértil nuevamente, —anuncia mirándola con una sonrisa. —Eso es bueno, le quiero pedir que no comente nada con el alfa ¿puedo contar con su discreción? —cuestiona ganando una mirada confundida por el hombre. —No entiendo porque quiere ocultarle esto ha el alfa. —Porque si quedo en cinta me gustaría que sea sorpresa para él, —el medico abre su boca en una ‘‘O’’ —Ahora comprendo, entonces puede confiar en que no diré nada y será secreto médico y paciente. Kara agradece para retirarse de allí donde fuera del centro médico la espera su escolta, no quiso tener uno pero el alfa nunca se quedaría tranquilo sino llevara alguien cuidándola. Sube a la camioneta y en pocos minutos ya está cruzando la puerta de la mansión, suspira observando el murmullo de personas que organizan la coronación de Leonardo, ya la loba está enterada de todo lo que ha pasado y sabe qu
—¿En serio? —pregunta Astrid alzando su cabeza del pecho del león que acaricia su cintura después de una larga sección de sexo. —Nunca bromeo, —murmura—. Quiero que vengas conmigo a la coronación de mi padre. Según me comentaron abra un baile estilo a la antigua, no tengo a quien más invitar así que debes venir conmigo, —el león miente ya que si tiene más chicas que invitar o que están interesadas en ir a esa fiesta con él pero en ese momento Enzo solo quiere que Astrid sea su acompañante. —No quiero ir a un evento de leones y lobo. —También vendrán vampiros y brujas, —le recuerda, Astrid rueda los ojos—. No hagas que te folle hasta convencerte. —¿Resuelves todo con tu polla? —Contigo si, —sonríe pícaro. —Siempre estaré encantado de hacerte susceptible mientras te estas corriendo con mi polla enterrada hasta tus entrañas, —Astrid sabe que este no miente. —Está bien voy a ir contigo, pero no me dejes sola. —Lo prometo, —se mueve
Grande limosinas fueron llegando a la casa del alfa Marchetti, vampiros, brujos, lobos y leones de distintos lugares del mundo llegaron con un propósito: conocer al rey, Kara por otro recibe los últimos toques en su rostro y su imagen es digna de cuento de hadas.—Te vez como la reina—, anuncia Tamara con una amplia sonrisa.—Es la reina—. Le recuerda Tania.—Estoy muy nerviosa, no quiero defraudar a Leonardo. —juega con sus dedos y muerde de manera compulsiva su labio inferior que por suerte no lleva ningún labial que pueda machar sus dientes.—No lo harás.—Concuerdo con Tamara, solo con verte de esa manera se sentirá el hombre más afortunado de todo, —Kara sonríe sin mostrar sus dientes sintiéndose honrada por tenerlas allí siempre.—Ustedes también están hermosas, espero esos hombres valoren este hermos
—Nuestras fuerzas están con ustedes, rey y reina, —una pareja joven hace una reverencia a ellos después de pronunciar esas palabras—. Nuestro aquelarre es uno de lo más antiguo y por derecho nos corresponde enviar uno de nuestros brujos a servirles con su magia y lealtad. —No es necesario. —Es un honor para nosotros que lo acepte, —trata de persuadirlo. —Es cierto rey alfa—, Petrova le da el visto bueno y este no le queda de otra que aceptar lo que ellos ofrecen—. Con un brujo cerca estarás prevenido de cualquier cosa que quiera atacarte, —comenta la mujer después de que la pareja se marcha. —Todo lo que funcione como ayuda extra servirá, —murmura Leonardo observando a las personas conversar de manera despreocupada «Tal vez esto de ser rey si funcione bien» es lo que pasa por su cabeza en ese momento, Kara por otro lado aprieta su mano cuando ve a su hermano acercarse a ellos. —Rey, reina, —hace una reverencia porque sus ganas de abrazar a su
—Cada día estas débil juguete, —acaricia su cabeza mientras el chico esta postrado en el suelo con un collar en su garganta y la correa siendo sujetada por Dereck—. Me divierte la fragilidad humana a la que te sometes.—Ya no me importa lo que hagas conmigo… —susurra sin fuerza.Tantos años al lado de ese demente ha roto su esperanza de vivir, ya lo que más deseas el joven chico de piel pálida es morir y ser libre del monstruo que lo tiene cautivo.—Eres una escoria, te di la inmortalidad y así me pagas.Niega—Una inmortalidad a tu lado sería lo más asqueroso que pueda existir… —la mandíbula del vampiro se tensa y empuña la correa con fuerza para tirar de esta.En un rápido movimiento lo deja con el torso tocando el suelo mientras sus nalgas quedan en su regazo, su piel desnuda queda a su disposici&oacut
—¿Qué? —cuestiona el alfa mirando a la loba sin entender lo que acaba de decir.—Escucha, —este agudiza sus sentidos escuchando más allá de su casa, gritos de niños, gruñido y humanos gritando.—Nos atacan.Su mandíbula se tensa al igual que todo su cuerpo, enseguida toma el pantalón de chándal para poder cubrir su desnude, Kara baja de la encimera y el alfa toma su mano.—¿Qué vamos hacer?—Tu nada cachorrita, mantente segura en mi oficina, —la lleva arrastras hasta esta y la mira por varios segundos—. No salgas de aquí.—Tengo miedo.—Iré por Dantes, —Kara asiente y Leonardo va hasta la habitación de su pequeño hijo que está dormido, muy lejos de todo lo que está sucediendo fuera.—PapáSusurra adormilado.&mdas
—El momento indicado para atacar es ahora, —anuncia el vampiro que llevo a cabo la excursión a la manada del alfa Marchetti—. Todos esos leones y lobos están en su semana de apareamiento y la manada está débil por eso.—Excelente información ¿Cuántos vampiros necesitamos para acabar con ese alfa rey?Dereck sonríe ampliamente esperando respuesta, ya que su momento ha llegado.—Deberíamos llevar unos treinta, creo que seremos suficiente contra el alfa, supongo que sus hijos no están y eso hará más fácil acabar con él.—Me uniré a este ataque y seré yo el que termine su asquerosa vida, me gustaría ver su rostro cuando muera, —hace una seña para que salgan de la biblioteca dejándolo con el joven chico que nunca aleja de su lado—. Quiero que sepas que si muero, te dejare buena fort
Cuando Leonardo siente que su vida está a punto de terminar solo piensa en Kara y en todo el sufrimiento que le causara su muerte a su amada, recuerda cada momento que ha vivido a su lado, esas emociones que le provoco la primera vez al tenerla frente a él.El rostro de la loba fue un fuerte temblor en su cuerpo a pesar de que no demostró emoción alguna cuando la conoció. Fue lo más tierno que vislumbro, cara de ángel que quería consumir con su oscuridad, pero ella solo lo consumió a él con su luz.Lo hizo cambiar, lo volvió bueno para ella y no quería nada más que protegerla a toda costa, es su pilar, su fuerza para levantarse día tras día y liderar una manada que nunca quiso tener.Su consciencia vuelve cuando su cuerpo cae al suelo y el aire vuelve a entrar de golpe en sus pulmones, frente a este yace tirado el vampiro con sus ojos abiertos de par en par a