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El Alfa de los Castleville

-Señor, tengo algo que mostrarle... Interrumpió Zack, pero mi mente está en otro lado.

-¿Que sucede? preguntó preocupado.

-¡¡La he encontrado Zack!! respondí confundido.

-¿A tu luna? ¡¡eso es fantástico! respondió, pero aún no le he contado que es una simple humana.

-No te veo saltando en una pata. ¿qué sucede?

-Es humana... respondí cabizbajo. No tengo drama en sincerarme con él, por la confianza que tenemos. Sé que le encanta que le dé la oportunidad de hablar... y aquí viene su sermón.

-¡Eso no tiene nada de malo!... la has encontrado y es lo más importante, por fin la manada estará completa, es lo único que te faltaba.

-¿Qué insinuas con ese comentario? ¿Acaso no soy suficiente?

-Jamás dije eso Octavio, pero una manada necesita a su Luna. ¿Es fea? me preguntó con dificultad.

-Ja ja ja, No para nada, es deliciosa... pero no me siento preparado para una relación, además, no tengo paciencia no sobrevivirá a mí.

-Tú no sobrevivirás sin ella... ¡no tienes opción!

El hijo de Tom no puede ser tu heredero, regalarlas el trono a lo Fooster. ¡Mira ésto!

Me dijo Zack enseñándome una imagen.

-Ese es Tom, ¿qué hace con los Mowglit? respondí sorprendido.

-Son hermanos, por alguna razón decidió vivir con los Mowglit, pero aún así sigue siendo un Fooster. Matthew es su sobrino y lo está buscando. Sabes que Patrick ancía tu puesto hace siglos, si descubre que tú lo tienes...

-¿¿Por qué no me lo has dicho antes?? respondí exaltado.

-No fui yo quien lo descubrió sino, Francisco... acabo de enterarme.

-¡Eso cambia las cosas!

-Ahora, es momento de dejar tu necedad y habla con tu luna. Me dijo con una sonrisa maliciosa por qué sabe lo que significa para mí.

No tengo tiempo que perder, sé que Elizabeth piensa irse por la tarde, no lo puedo permitir.

Conducí a toda velocidad, para detenerla aunque nosé qué decirle, ni cómo comenzar... pero ya veré.

-¿Qué diablo hace aquiii? detuve el auto a ver a una mujer parada en la calle.

-¡Señor Alfred! me saludo mi luna y estoy molesto por haber desobedecido mi orden.

-¡Sube! le dije, y lo único que pensé en ese momento fue en castigarla. Estaba molesto por qué nadie en la tierra se ha atrevido a desafiarme.

-¿A dónde vas? le pregunté con esfuerzo, y pude sentir el olor a Juan. ¡Esto es inaceptable!

no pude evitar mirarla con rabia y el colmillo se quiere escapar para desgarrar la carne de ese maldito.

-¡Voy a la casa de una amiga!

-¿Por qué? te he dicho que te quedes.

-Si y se lo agradezco mucho, pero hable con mi amiga para que me ayude a volver a casa.

Quéeee ¿es una broma? detuve el auto de repente, estoy tan molesto y su comentario fue como una cachetada.

Trate de relajarme antes de responder...

-¿Te irás sin siguiera darme la oportunidad? respondí... y Jack quería tomar el control de mí.

-¡Nnoo ppueedeess dejarnnooss! Hablo Jack y eso la asustó.

-¿Q...quée eres tú? preguntó asustada, yo la mire y trabe las puertas del auto.

-¡Soy lo que has venido a buscar Luna!.

-¿Qué? ¡déjame bajarme! ¡abre la puerta! gritaba con desesperación.

-¡Lo siento mucho Elizabeth! Apreté el acelerador, camino a una propiedad que tengo.

-¡Detente! ¡me compórtare! ¡por favor!

La mire y sonreí de lado... ¡es hermosa! y tiene carácter como su alfa.

Me detuve en una de mi propiedades, porque necesito hablar con ella, y llegar a un acuerdo.

-¡Baja del auto! le ordené, pero ella insiste en desafiarme.

-¡No lo haré! ¿qué es este lugar? ¿vas a matarme? me preguntó con lágrimas en los ojos.

-Ja ja ja, ¡Si, ha llegado tu hora!... le dije y ella empezó a suplicarme. ¡Al fin nos estamos entendiendo! sonreí.

Abrí su puerta, y la tome entre mis brazos mientras ellas pataleaba.

-¡Ya! ¡cálmate! solo hablaremos. Le dije.

Ingresamos a la mansión, ésta es un poco más pequeña, es el lugar al que vengo cuando quiero estar solo... sin ninguna interrupción.

La baje al sofa y sus hermosos ojos verdes observaba cada movimiento con temor.

-¿Por qué me has traído aquí? preguntó molesta. Es bella hasta con su ceño fruncido.

Sus delgadas manos acomoda su ropa, y se ve tan hermosa con los pelos desparramados.

-¿A qué has venido a Irlanda?

-¡Ya te lo he dicho! me respondió molesta.

-Pero...¿por qué aquí? insistí.

-Eso es asunto mío... déjame salir de aquí por favor, no diré nada. Yo levanté una ceja, y no necesite palabras para que obedeciera.

Se encogió de brazo, la veo pensativa...-He pensado en este viaje desde hace mucho tiempo, he tenido sueños, es un hermoso país.

¿Ahora puedo irme?, me preguntó cómo si su palabra no significarán nada.

-¡¡La diosa de la luna te ha guiado hasta aquí!!, pensé en voz alta incrédulo por lo que acaba de escuchar, no puede haber tanta coincidencia.

-¿La diosa de la luna? respondió confundida.

-Sabes quién soy cierto... ¿? le pregunté, porque quizás ella sabe bien a lo que vino.

-Si, todos saben quién es usted... lo he visto en la tele. Sonreí al escuchar su comentario, porque notó que me desea.

-Siii... ¿Y qué más sabes sobre mí? le pregunté acercándome a ella.

Puedo notar como su pulso se acelera, sus ojos temeroso son esquivos en este momento. Se quedó en silencio por un momento, y estoy perdiendo la paciencia.

-¡¡HABLA LUNA!! ¿QUÉ ES LO QUE SABES? grité y ella tembló de miedo y corrió hacia un rincón.

-Yo no se nada señor, ingresé a la red oscura y fue ahí donde encontré la ubicación del empleo. Tuve mis dudas, pero lo necesitaba. Si éste es un plan de la mafia o algo por el estilo, quiero decirle que nose nada ni vi nada raro señor. Pero por favor no me mate. Me suplico y se puso de rodilla ante mí.

No pude evitar reírme... y no puedo desperdiciar está oportunidad.

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