ElizabethNo estoy segura si podré cumplir con mi parte del trato. Al ver al señor Ronald, todo mi cuerpo comenzó a temblar por el miedo al ser descubierta. Su mirada se posa sobre mí, no puedo evitar incomodarme, siento como si pudiera ver a través de mí, un conocedor de la verdad. Se acercó a mí, extendió su mano, con una gran sonrisa.-¡Bienvenida a la familia Elizabeth! Me dijo.¿Ya lo sabrá? Me pregunto... forzando una sonrisa asentí ante su comentario.El parecido con su hijo es mucho, en excepción de sus ojos amarillentos, y la enorme cicatriz en su rostro.Me acerqué a Afred, quién tenía una gran sonrisa. Sé que si convencemos a su padre de nuestro compromiso habré cumplido el trato con éxito.Solo tengo que relajarme, hacer de cuenta de que soy su esposa, su verdadera esposa. Marchamos a la sala principal, estoy a punto de sentarme cuando Alfred, me toma de la cintura y me sienta sobre él. Lo miré con desaprobación, porque me sentí avergonzada, intenté hacerme a un lado, p
La tome entre mis brazos, para poder acercarla, su cuerpo esta pegado al mío, y su dulce aroma está nublando mi razón... Acaricio su cabello con delicadeza, mientras una sonrisa se dibuja en mi rostro porque sé que me desea, puedo sentirlo, sus señales son muy clara, después de todo es muy difícil resistirse a mí.Tengo a todas las hembras que quiero, pero con ella las cosas son diferentes, la diosa de la luna la ha guiado hasta mí y será la afortunada de llevar a mi hijo en su vientre.Se aleja de mí... me mira a los ojos, sé que es lo que quiere, todo su cuerpo me lo pide a gritos.-Temí que algo le sucediera, había muchos lobos... escuché gritos y temí lo peor. Me dijo apenada.Yo sonreí, por qué aún no tiene idea con quién está hablando, y esta es mi oportunidad.-No hay un ser en la tierra que pueda enfrentarme, desgarraría toda su carne por el simple hecho de intentarlo. Sonrió ante mi comentario, ella también lo hace, eso sin duda -Pero eso lobos son enormes, no creo que pued
El lugar era inhóspito, cómo se atreve a cobrar por este tipo de vivienda, debería de ser demolido por completo.Llamé a la puerta, rápidamente me habló una joven de cabello rojizo que imaginé era la prima de Elizabeth.-¡Buenos días!, estaba por presentarme, pero aparentemente no hubo necesidad.-Señor Alfred, es un honor tenerlo aquí... Elizabeth no ha regresado. Me dijo, puedo notar como su pulso se acelera. Haré uso de mis encantos para lograr mi objetivo, necesito información sobre el infeliz que se atrevió a tocar lo que es mío.-Lo sé, respondí,- he venido por Alex, Elizabeth no podrá llegar a tiempo. -Bueno, iré a preparar sus cosas. Dijo con una gran sonrisa, el niño estaba jugando con un auto, me acerqué a él para observarlo.-Oye cría, ¿cuál es la habitación de tu madre?, le pregunté, tuve que insistir con la pregunta porque aparentemente las crías humanas no son muy perceptivas. Él me señaló con el dedo indicando la ubicación, luego siguió enfocado en su pequeño auto, me
Cuando vi el mensaje de Abril diciendo que el guapote de mi jefe había ido por Alex me enfurecí. No tiene derecho a invadir mi espacio, muchos menos tomar a mi niño, ¿quién se cree que es?Cuando lo vi ingresar arremetí contra él, no puede pasarme por alto. Pero luego la voz de Alex me devolvió la tranquilidad.Fulminé con la mirada a Arthur olvidando por completo quién era.Fui hasta la sala donde está Matthew jugando, luego su padre ingresó de manera sorpresiva.-¿Y este niño? Sonrió y acarició su cabeza. -Es mi hijo, respondí sin problema, y en ese momento me sentí una mirada amenazadora, de mi esposo de mentira.Él no hizo ningún comentario, pero la expresión de su rostro cambio de manera sorpresiva, Alfred estaba parado en el pasillo mirándome con desaprobación.Sin mencionar ninguna palabra ingresaron al despacho, seguido de eso se empezaron a escuchar gritos. Matthew y Alex marcharon a la sala de juego, mientras yo aproveché para acercarme a la puerta. -¡NO PUEDES CONTINUAR C
Observo desde la sala a Alfred, quién se veía hermoso con ese traje azul, aunque imagino que se vería mejor sin él, me ruborizo solo con mis pensamientos.Al parecer notó mi mirada y sonrió al verme, tomó su teléfono y toda esa aura de alegría que llevaba consigo se desvaneció en el aire.-¡Prepárense para partir!, ordenó a sus hombres, quienes sin demora subieron a la cajonera de la camioneta, Alfred tomó el volante y piso el acelerador a fondo como si el asunto se tratara de vida o muerte, ¿lo era?.Me preguntó en qué estará involucrado, ¿será parte de una red de narcotráfico?, o quizás pertenece a una mafia, pensé notado que no sé nada sobre él.¿Realmente confío Alfred?, me pregunté, y la respuesta, fue no del todo, hay muchas cosas oscuras a su alrededor, que no estoy segura si quiero saber. Lo único que sé de él es solo lo que vi en los periódicos y en las entrevistas, cuando vine para la propuesta de trabajo en medio del bosque, jamás creí que se trataría de él, de hecho no pen
Llegué a casa algo abrumado por lo que acababa de escuchar, pero todos esos pensamientos se esfumaron cuando la vi.Elizabeth estaba esperándome en la sala con los brazos cruzados, eso me recordó a mi querida madre.-Puedes explicarme, qué es lo que sucede. Unaspersonas han venido desesperada hasta aquí pidiendo ayuda. ¡Hay gente muerta Alfred! Y tú sales corriendo sin decir nada, dime, ¿estamos en peligro?, necesito saber la verdad. Exigió.-Te he dicho que estarás a salvo cerca de mí, por lo tanto, así será... eso siempre y cuando respetes lo que te he dicho en un inicio, no te alejes de aquí.-Pero, tengo una vida afuera...-No. Tienes una vida aquí, junto a mí. -Tenemos un contrato, me recordó y veo como da pasos hacia atrás al verme acercándome a ella.-Eres mi Luna, no puedes irte de aquí... el contrato dice que te quedarás junto a mí por el resto de tu vida. Le respondí con una sonrisa en mi rostro, y la veo como se encoge de hombros, luego su mirada se vuelve sería, pero tem
Desperté temprano, fui a entrenar un rato mientras escucho un poco de heavy metal. Hoy no iré al mundo de los humanos por qué tengo asunto que no puede esperar aquí.Cecilia me envió toda la información que le pedí sobre Elizabeth y su familia, cada detalle, cada movimiento, cada novio, quiero saber todo sobre ella.Salí de gimnasio me dí una ducha, luego marché hacía mi habitación a buscar algo de ropa. Elizabeth aún dormía abrazada junto a su cria, un gruñido se me escapa. ¡Estúpido niño!Tomé un jean azul una remera negra y zapatillas del mismo color.Avisé a Zack que nos reuniríamos en mi despacho junto a Francisco, Jeremy y Michael para hablar sobre el ataque de anoche.Me senté en el despacho mientras firmo un par de documentos. Pedí a Carmen que me trajera un café, y que enviara a la niñera con urgencia. Le advertí que se encargará de cuidar a las dos crías, que por ningún razón lo quería ver frente a mí, solo en el caso que yo lo ordene.Zack junto al resto ingresaron a mi de
No sé de dónde saca valor para cuestionarme. Eso me provoca terribles ganas de azotarla, ¡sin ropa claro!.Estoy repasando el informe, pero llama mi atención el no encontrar nada sobre su hijo.-Debo irme Alfred. Escucho decir.-¿Quién es el padre de la cría? pregunté sin más.-Yo... no lo sé, respondió temerosa, la observó con seriedad.-¡Déjame ponerte en contexto Elizabeth!...Los lobos contamos con grandes capacidades sensoriales, desde aquí puedo oir a gran distancia,puedo oler... Mmmm, ¡tu hueles exquisita!, puedo percibir tus miedos y también SÉ CUANDO ALGUIEN MIENTE, asi que, ¡no te atrevas! ¿Lo has comprendido? Ella asintió y eso me alegra porque la paciencia no es lo mío.-El padre era un granjero, se llamaba Ronni, es lo que recuerdo, pero jamás lo conocí.-Explícate... le dije elevando una ceja. -Quiero saber todo.-De acuerdo.-Cuando llegué a Irlanda, fui parte del servicio voluntario para ayudar a las personas, ahí conocí a una hermosa mujer llamada Rapsody, me hice mu