—No me sorprende tu respuesta, es tan básica y simple... —Me mira de arriba a abajo con burla— Como tú.Ruedo los ojos por lo infantil que estaba siendo. En primer lugar, ¿qué diablos estaba haciendo aquí? ¿Por qué el equipo de seguridad la había dejado entrar?—¿Qué quieres? Estoy ocupada. —Ni siquiera me iba a molestar en ser amable. Ella no lo vale.—¿No vas a ofrecerme una taza de té? —Pregunta, pero no le respondo. Eso la hace reír— Te advierto que la razón por la que vine aquí amerita una conversación bastante larga, así que... Linda, tráeme una taza de té. Ya sabes cómo me gusta.Abro la boca, indignada de que estuviera dando órdenes en mi propia casa.—Linda no va a traerte nada. —La detengo de inmediato— Ni siquiera sé por qué te dejaron entrar.—Fácil, cariño... Logan se los permitió. —La miro confundida— ¿Qué? ¿Acaso no te llamó diciendo que vendría dentro de poco?¿Qué?—¿Tú cómo lo sabes?Esa pregunta la hacía reír una vez más. Mi corazón se acelera y algo dentro de mí m
—Por favor, Larissa, perdóname... Yo no quise... —Una voz rota que aún no lograba distinguir bien me hablaba. Por más que intentaba, no podía abrir los ojos— Por favor, despierta.Logan...¿Por qué no puedo abrir los ojos? Ya no tengo sueño. ¿Por qué se está disculpando? ¿Qué pasa?—¿Aún no despierta? —Una nueva voz llega a mis oídos y de inmediato la reconozco. Era Evan.Él también estaba aquí.—No, ha estado dormida por horas.—¿En qué diablos estabas pensando, Walker? —Lo riñe mi mejor amigo y este suelta un suspiro pesado. Logan...La primera voz era de Logan— ¿Para esto querías casarte con Larissa? Te advertí que si no seguías confiando en ella no la ilusionaras. ¡Joder, la mandaste al hospital!No, él no lo hizo. Fue Haylee.—Tal vez si ustedes no hubieran hecho cosas tan cuestionables, yo no habría malinterpretado las cosas. No me culpes por algo que ustedes ocasionaron.—¡¿Acaso no se te ocurrió ir a mi casa a preguntarme o al menos a Larissa?! —Ya basta ustedes dos. —También
—¿Aún siguen peleados?Aria me ayudaba a sentarme en la cama para después pasarme la bandeja con mi desayuno. Se sienta a mi lado y me sonríe con cariño.—Ni siquiera nos hemos hablado. —Comento en voz baja, fingiendo que nada de esto me estaba afectando. Cuatro días más habían pasado y las cosas solo empeoraban entre Logan y yo. Él no me presionaba y se había mantenido a mi lado cuidándome y cuidando de Liv, era el encargado de llevarla a clases y a sus entrenamientos. A veces trabajaba un poco desde casa, pero en general nunca salía de la habitación, siempre observándome y esperando a que necesitara algo de él. Aunque durante todos estos días me había negado a dirigirle la palabra.Y como todo estaba raro entre los dos, Aria había decidido venir para que yo tuviera una persona con quién hablar.Al menos…—Sé que lo que te voy a decir va a sonar obvio, pero tarde o temprano tendrán que tocar el tema de Haylee. —Me confronta. Yo asiento en silencio y tomo un poco de mi ensalada de fre
¿Cómo comienzo? ¿Qué podría decirle? ¿Le grito y lo insulto diciéndole que me engañó después de que me juró amor eterno? ¿Eso arreglaría las cosas? ¿Me haría sentir mejor? A este punto no lo sé... La verdad es que no lo sé. Estaba furiosa, decepcionada. Quería gritarle e incluso golpearle el rostro, pero sabía que más dolor del que yo estaba sintiendo, no lo sentiría jamás. De nuevo estaba en el hueco en el que estuve hace seis años. Volví a cometer el mismo error. Me dejé llevar por una fantasía adolescente y olvidé que la realidad existía. Dejé que Logan entrara en mi vida de nuevo de una forma bastante cuestionable, dejé que me embarazara como si nunca en mi vida hubiera escuchado sobre los métodos anticonceptivos. No conforme con eso, acepté casarme con él, le creí cada vez que me dijo que me amaría incondicionalmente y que envejeceríamos juntos. Ignoré todas las advertencias, me creí la protagonista de un romance de película, ¿al final para qué? Mira en dónde ac
—¿Divorcio? —Asiento como si no me doliera hablar de eso y tomo de mi jugo de naranja. Ni siquiera su sabor ácido me hacía cosquillas en la boca.Estos días no había sido capaz de sentir algo.—¿No crees que estás exagerando, Larissa? Aria, dile algo.Miro a mis dos amigos y me fuerzo a sonreírles un poco, rezando internamente para que no me bombardearan con preguntas que ni yo sabía cómo responder. Habían pasado dos caóticas semanas en las que muchas cosas habían cambiado. Ni siquiera sabía por dónde iniciar. Quizás podría comenzar con que Logan se había opuesto firmemente a mi idea del divorcio, alegando que esto era algo que podíamos solucionar y que no iba a dejar ir a su familia tan fácil. Luego de eso, me pidió que no insistiera más y me dejó tranquila en mi habitación. No volví a verlo hasta la mañana siguiente cuando trajo a Liv de vuelta a casa. Intenté varias veces volver a tocar el tema, pero Logan siempre me evitaba y huía.Estaba reacio a divorciarse, pero yo seguía
Logan¿Por qué sigo haciendo estas cosas? ¿No se supone que esta sería una nueva oportunidad para ser feliz? Arriesgué toda mi vida para obtener lo que más había anhelado, ¿entonces por qué lo arruino en la primera oportunidad que se me presentaba? Nada de esto era culpa de Larissa; ella nunca hizo algo que mereciera lo que le hice. Me ocultó algo, sí, pero jamás me faltó el respeto, ni a nuestra promesa. En cambio, yo... Aún podía recordar perfectamente cómo, preso de la rabia, fui a ver a Haylee y cómo ella, con sus palabras y sus pruebas maquilladas, me terminaron de cegar, además de que casi me tomé toda su licorera. Casi cometiendo el peor error de mi vida. Tenía a Haylee encima, desnudándome, besándome e intentando que yo la tocara, que volviera a hacerla mía, pero cuando los recuerdos de mi boda con Larissa me golpearon y me regresaron un poco de cordura, de inmediato la alejé de mí, diciéndole que nunca podría estar con otra mujer que no fuera mi esposa. Luego de eso
LoganCamino lenta y temblorosamente por la sala de mi casa. Todo estaba a oscuras y en silencio total. No me sentía bien. Mi cabeza daba vueltas y solo tenía ganas de vomitar.Me siento una basura, me siento sucio... Me siento una completa mierda. ¿Qué fue lo que hice? ¡¿Qué demonios fue lo que hice todo este tiempo?! ¿Cómo fui tan ciego? ¿Cómo no pude ver a la maldita persona que estaba a mi lado? Me dejé cegar, me dejé manejar a su completo antojo. Todo este tiempo... ¡Dios! ¡Maldita sea! Con el mismo paso tembloroso, llego hasta mi oficina y, al llegar a mi licorera, tomo un vaso y mi botella de bourbon, ya por la mitad. Últimamente, se había convertido en mi mejor amigo para desestresarme y pensar mejor las cosas. Cuando Larissa estuvo de reposo y me quería lejos de su lado, fue mi único compañero... además de Thomas y del idiota de Park. Ese idiota. ¡Maldición! Lleno mi vaso por la mitad y bebo todo el contenido de golpe. Mi garganta se quemaba con aquel líquido ámba
Larissa—¡Larissa, espera! —Sin prestarle atención a la voz detrás de mí, me apresuro a entrar en el auto rumbo a la comisaría. Por ahora, me tranquilizaba que Liv estuviera siendo vigilada por sus abuelos, quienes, al enterarse de lo que había pasado, se apresuraron a nuestra casa para cerciorarse de que estaba bien. No lo estoy.A todos les preocupaba que tuviera una nueva crisis… Y supongo que Logan también tuvo que haberles avisado. Es por esa misma razón que ahora estoy en el auto junto a Evan, bajo una lluvia torrencial, para poder ir junto a mi esposo. Puede que estuviera enojada como el infierno con él, pero aun así seguía siendo mi esposo y, por muchos errores que cometiera, él no se merecía esta jugarreta sucia de Haylee. ¿Logan agrediendo a esa mujer? Él podía ser un idiota de primera categoría, pero jamás, jamás sería agresivo con una mujer. Podía apostar mi vida a ello.Logan no hizo nada de lo que se le acusaba. —¿Ahora te gustan los presidiarios? —bromea Evan mie