—¡Mami, mami! ¡Mírame! —Como puedo, giro la cabeza para ver a mi pequeña bola de sol caminar hacia mí con su inmaculado vestido blanco, adornado con una delicada cinta rosa en su cintura y sus zapatillas en ambas manos. Su cabello oscuro ahora tenía delicadas ondas y una diadema de flores blancas y rosas. Estaba tan adorable que casi me echaba a llorar— ¿Me veo bonita?El estilista detiene su labor en mi cabello y me permite visualizar mejor a mi niña. Tomo una de sus manos y hago que dé una vuelta, logrando que su vestido se armara aún más. Realmente adorable.—Te ves hermosa, cariño... Ven para ayudarte a poner los zapatos. —Liv sonríe y toma mi mano. Caminamos unos pasos y nos sentamos en uno de los sofás que estaban en la antigua habitación de Logan. Con cuidado, levanto su inmaculado vestido y le pongo sus zapatillas— Ahora tienes que prometerme que no correrás ni te ensuciarás hasta después de la boda, ¿sí?—Sí, mami. —Me responde con esa misma sonrisa que dejaba al descubierto
—Felicidades, Logan. —Una pareja de jóvenes, supongo que amigos de Logan, sonreían de oreja a oreja y a su vez, abrazaban al pelinegro. Había demasiadas personas que no conocía: familiares lejanos de los Walker, amigos, socios, inversores... En fin, era un poco abrumador, pero lo sobrellevaba lo mejor que podía— A usted también, señora Walker. Está muy hermosa.Señora Walker... ¡Guau! Oficialmente era la esposa de Logan Walker.Después de tantas cosas, tanto dolor y resentimiento, finalmente habíamos logrado superar todo y perdonarnos. Ahora solo nos quedaba ser felices con nuestra hija y el bebé que venía en camino, quien, sorprendentemente, no me había provocado ningún malestar durante la ceremonia ni aquí en la recepción. Todo era perfecto; nadie podría arruinar la felicidad absoluta que estaba sintiendo en estos momentos.—Me gusta cómo suena eso... Señora Walker. —Bromea Logan una vez que nos quedamos solos. Habíamos estado saludando a los invitados por más de media hora. Liv s
—¿Ahora viviremos todos en otra casa, mami? —Los enormes y oscuros ojos de Liv escudriñaban mi alma. Siempre curiosa por saber más.—Así es, pequeña. ¿Recuerdas la casa a la que nos llevó papá la otra vez? —Ella asiente— Allí es donde viviremos ahora.—¡Genial! —Exclama emocionada y baila al ritmo de la alegre sonata que resonaba por todo el lugar— ¿Y cuándo podremos ver a mi hermanito? ¿Falta mucho para que venga a jugar conmigo?Sonrío ante su tierna expresión llena de confusión sobre el tema. Aún no había sido capaz de tocar ese asunto con ella; me parecía que aún era muy pequeña, pero sabía que debía explicárselo muy pronto, por su propia seguridad y conocimiento.—Tu hermanito o hermanita está creciendo aquí. —Llevo mis manos a mi pequeña barriga, oculta por mi vestido de noche corte A rosa pálido. Ya me había cambiado mi hermoso vestido de novia más que todo por comodidad y porque Logan me había dicho que pronto nos iríamos— Se va a quedar aquí por un tiempo hasta que se haga gr
—¿Estás ebria? —Logan suspira, mirando a la castaña tambaleándose de un lado a otro, apenas pudiéndose mantener en pie.Sin esperar, desabrocho el cinturón y salgo del auto. Logan se gira de golpe y me mira con ojos bien abiertos. Haylee también me observa y abre la boca, haciendo un gesto de burla y creo que un poco de decepción.¿Por qué está actuando de este modo?—Oh, mira quién es. —Apunta hacia mí y se ríe— ¡Es la mujer que arruinó mi vida!—Haylee... Déjame ayudarte, no estás en condiciones... —Intenta mediar Logan, pero ella niega con la cabeza.—Yo debería haberme casado contigo, Logan. ¿Qué fue lo que hice mal? —De pronto su voz se corta y todo se vuelve mucho más incómodo. Ni Logan ni yo sabíamos cómo actuar o qué decir— ¿Fue porque no quería tener hijos? ¡Yo te iba a dar los que quisieras!—Basta, Haylee, esto no te hace ningún bien. —La detiene Logan y, de una, corta el espacio entre ambos, sosteniéndola entre sus brazos y evitando que cayera al suelo— No estás pensando,
—No digas eso, pequeño ángel. —Logan salta a responder, con miedo de que esta discusión llegara a mucho más, arruinando todo— Hemos luchado demasiado para llegar a este punto, no vamos a separarnos jamás.—Logan, eso depende de ti... Yo siempre he dado todo de mí en esta relación, pero tú solo me das el cincuenta, a veces el sesenta por ciento, y eso no me sirve. —Suspiro cansada y hastiada del tema— Mira, a mí no me interesa que seas un protector en mi vida, siempre he sabido defenderme sola, pero... ¿Sabes? Es lindo saber que siempre estarás ahí para defenderme aunque no lo necesite, por muy insignificante que parezca la situación... Y cuando se trata de Haylee, no veo tu instinto de protección del que siempre alardeas y eso cansa... Me agota tener que esperar cada día el momento en el que finalmente me darás mi lugar. No lo hiciste en aquel tiempo y tampoco lo hiciste hoy.Eso basta para mantenerlo callado un largo rato, pensando en todo lo que había dicho. Creo que nunca habíamos
—Buenos días, esposa mía. —Me sobresalto un poco cuando un par de manos envuelven mi cintura, pero me calmo al escuchar su voz y respirar su olor natural. Logan besaba con picardía mi hombro semidesnudo y luego apoyaba su barbilla en él— Te extrañé al despertar.Sonrío extasiada por su atención y me inclino hacia su pecho, sintiendo su calidez recorrer mi cuerpo. La brisa despeinaba levemente mi cabello, pero se sentía delicioso. Apenas estaba amaneciendo, pero desde este lugar, todo se veía perfecto. Logan había escogido un excelente lugar para nuestra mini luna de miel.—Quería prepararte el desayuno, pero no me dejaron. —Giro un poco la cabeza para verlo y hago un puchero que lo hace reír— No me dejan hacer nada.—Solo están siguiendo órdenes, amor. —Logan estampa un beso en mi mejilla derecha— ¿Eso es café?Bajo la mirada hacia la taza en mis manos.—No, es jugo de manzana. —Bebo un sorbo de mi jugo y Logan se tranquiliza al ver que no estoy haciendo caso omiso a mi dieta— Por cie
—¡Mami! —Liv corría eufórica hacia mí. Me agacho y extiendo mis brazos para poder atraparla justo a tiempo en un abrazo que estuve anhelando todo este tiempo. Puede que solo haya sido un fin de semana, pero seguía sin acostumbrarme a tener a mi pequeña lejos de mí.—Mi niña hermosa, ¿te divertiste? —Ella se separa y asiente con una enorme sonrisa en su rostro. Sus ojos brillaban como dos estrellas— ¿Te portaste bien?—¡Sí!—Esa es mi niña. —Choco los cinco con ella y vuelvo a abrazarla un poco más. Cuando nos separamos, extiendo mi brazo hacia un lado para tomar una pequeña bolsa con un regalo que compré para ella— Te traje esto.Sus ojos se iluminan de una manera que podrían alumbrar un estadio completo, cosa que me hace sonreír.—¡Gracias, mami! —Toma su regalo y, sin siquiera abrirlo, me da otro abrazo. Luego ve a Logan y se aparta de mí para poder abrazarlo, aún con la bolsa de regalo en su mano— También te extrañé, papá.—¿Sí? —Ella asiente y pone sus pequeñas manos alrededor del
—¿Te sientes bien, amor? —Despego la mirada de mi comida y la fijo en los ojos oscuros y confusos de mi esposo. Arquea una ceja y me mira como si intentara saber qué me estaba pasando— Has estado callada desde que llegaste.¿De verdad no va a decirme nada sobre la visita de Haylee? ¿Me lo ocultará? Esto es ridículo; no puedo vivir pensando en eso. Logan y yo estábamos casados y confiaba en que él sabría respetarme como su esposa.Suspiro y niego con la cabeza, intentando ignorar todo el tema.—Estoy bien... Solo estoy un poco cansada, ya sabes... El viaje y todo eso.—¿Segura? —Asiento y devuelvo mi atención completa a la comida, aunque, con franqueza, no tenía nada de apetito. Logan me había pedido pollo a la plancha con vegetales y jugo, y para nuestra hija, nuggets de pollo y papas fritas. Ella estaba contenta de poder comer eso, pero yo no podía siquiera beber un sorbo de mi jugo. Eso no pasa desapercibido para mi esposo.—Larissa...—¡Estoy bien, Logan! —Sin querer exploto contra