NICOLÁS COOPER.Escucho la puerta principal seguido de un:—¡Regresamos!Escucho como se cierra la puerta y después de unos segundos, mi melodía aparece en la cocina.—¿Estas cocinando?—Sí —le contesto mientras siento como me abraza desde atrás— ¿Por qué no me despertaste? Pude haberte acompañado.—No quería molestarte, además, se veía que dormías tan cómodamente —me dice y luego siento como se aleja—. Voy a ducharme, no tardo.Giro la cabeza rápidamente ante lo último.—¿No quieres compañía?—¿Y tardarme horas? No, gracias —me contesta—. Aunque... si cambio de opinión, te aviso.Me da un corto beso en los labios antes de darse la vuelta e irse.Apago la estufa y me quito el mandil antes de ir tras de ella.CAMERON LUNA.Meto la llave en la cerradura de la puerta del departamento al mismo tiempo que mi celular vibra por una nueva notificación. Observo mi celular y suspiro cuando veo que se trata de un like de una foto de Sarah conmigo, lo cual, no me gusta para nada, ya que lo ultim
ACACIA LUNA.—¿Esa no es Sarah?Mauricio y yo volteamos para ver a Sarah entrar a la cafetería y caminar al área de comida.—¿No dijiste qué Cameron y ella regresaban hoy en la tarde? —me cuestiona Mauricio.—Se supone que sí —le respondo.—Pudieron haber llegado más temprano, pero no tiene sentido que vengan a trabajar si tenían el día libre —comenta Armin.—Dejen eso de lado —habla Christa—, lo que realmente es raro es que no este con Cameron —me voltea a ver— ¿paso algo entre ellos?—No lo sé, no he hablado con mi hermano desde que se fue.—Ahorita se lo preguntamos a Sa... ¿A dónde va?Todos volteamos para ver a Sarah salir de la cafetería.—Ok, si ocurrió algo —comenta Christa—. Sarah nunca había hecho eso.—Le acabo de preguntar a Cameron en donde esta y me contesto que esta en su departamento —revela Mauricio.—¿Deberíamos de preguntar que es lo qué sucedió? —inquiere Armin.—Creo que lo mejor será que nos mantengamos al margen —les digo.—Yo ya me voy —dice Mauricio levantándo
ACACIA LUNA.—Estas un poco rara —me dice— ¿Ocurrió algo?Lo veo por un momento antes de regresar mi atención a mi café.—Nada —le respondo—. Solo que Cameron descubrió lo nuestro.Levanto la mirada para verlo y me encuentro con una expresión de sorpresa en su rostro.—¿Cómo..?—Regreso antes de su viaje y nos escucho el sábado en mi habitación haciendo... ya sabes que.—Oh, mierda —masculla.—Sí, eso mismo pensé cuando me lo dijo —le digo y después cubro mi rostro con mis manos—. No puedo creer que nos haya escuchado.—Pudo ser peor —me dice—. Si hubieras dejado la puerta abierta, también nos hubiera visto.—Si estas tratando de animarme, déjame decirte que no lo estas consiguiendo.—Bueno, por lo menos lo intente —me dice soltando una pequeña risa—. Solo no pienses en eso.—No puedo evitar hacerlo —le confieso—. Y sinceramente, no sé hasta cuando podre verlo a la cara sin recordar eso.—Bueno, puedes mudarte conmigo hasta que dejes de pensar en eso.—Esa no es una solución.—No, pe
ACACIA LUNA.Veo como Alex se acerca a mí.—Hola —me dice mientras yo lo sigo viendo sorprendida—. Cuanto tiempo, ¿podemos hablar?Lo sigo viendo perpleja.—¿Hola? Tierra llamando a Acacia, ¿me escuchas?Parpadeo y salgo de mi asombro.—Sí, lo siento —le digo—. Es que me sorprendí.—Sí, se noto —se sienta en la silla a lado mío— ¿Qué haces aquí?—Vine a desayunar con alguien.—¿Y dónde esta esa persona?—Salió un momento a atender una llamada —le digo y luego por la ventana busco a Nicolás hasta que lo encuentro—. De hecho, ahí esta.Señalo en donde se encuentra mi pareja, el cual, nos da la espalda.—¿No es tu hermano, verdad?—No, él ahora debe estar arreglándose para ir al trabajo.—¿Y cómo esta él? —me inquiere—. Hace años que no sé nada de ustedes.—Él esta bien.—¿Y tú?—También estoy bien.—Me alegra —me dice— ¿Y qué haces en Canadá?—Vivo y trabajo aquí —le contesto—. Y de hecho, Cameron también, ¿tú también vives aquí?—No, yo estoy aquí por un viaje de negocios.—Oh, ¿y cuán
ACACIA LUNA.—Aquí esta su café, señor Cooper.Veo discretamente como Alba se inclina más de lo normal a tal punto que por un momento puedo ver un poco de sus pechos.Aparto la mirada rápidamente y regreso mi atención a los documentos delante mío.No puedo creer que haya visto eso.—Señorita Luna —levanto la mirada para ver a Nico viendo unas cosas en su computadora—, no entiendo esta parte, ¿me la podría explicar, por favor?Me levanto de mi asiento al mismo tiempo que Alba sale de la oficina.—¿Qué es lo que no...? —veo lo que hay en la pantalla y luego lo veo a él— ¿Es en serio?Nicolás me sonríe antes de tomarme de la cintura y jalarme para hacer que termine sentada en su regazo.—No —le digo en voz baja mientras intento zafarme de su agarre y él se ríe con su cabeza oculta en mi cuello—. Estamos en el trabajo, alguien nos podría ver.—Estamos en mi oficina —me dice—. Nadie va a entrar aquí sin antes llamar a la puerta.—¿Pero y si...?—No te preocupes —siento como deja un beso en
NICOLAS COOPER.Veo como mi melodía se baja de mi, arregla su apariencia y sale de la oficina lo más rápido que puede, pero por mala suerte, para cuando reaccionó y salgo detrás suyo, ella ya se encuentra bajando por el elevador.Me doy la vuelta molesto y me dirijo a mi oficina, en dónde mis amigos están todavia en sus lugares sorprendidos.—¿¡Qué les pasa!? —cierro la puerta— ¿¡Por qué no tocaron antes!?—Creímos que estarías solo —contesta Leon.—Asi que no pensamos en tocar la puerta —añade Robert.—¿Desde cuándo se acuestan?Veo furioso a Michael mientras Leon y Roberto lo ven mal.—Ay, por favor —habla Michael—, ni me miren asi, ustedes también quieren saber eso.—Eso es lo de menos —dice Roberto.—Encontramos a nuestro amigo y jefe a punto de tener sexo con su traductora, ¿y en serio me dices que eso no importa? —No es que no importe si no que... ¿Por qué seguimos hablando de esto?—Es lo mismo que yo me preguntó —les digo enojado.Roberto levanta la manos en señal de paz mien
ACACIA LUNA. Relájate, Acacia, todo va a estar bien.Solo tienes que actuar normal.¡Tú puedes!El elevador se detiene y abre sus puertas.¿Lo malo?Quienes entran son nada más ni nada menos que Mancini y Gautier, quienes me ven brevemente antes de seguir con su conversación.Las puertas del elevador se cierran y no mucho después, ellos dejan de hablar y el elevador se queda en un silencio incómodo.¡AH, NO PUEDO!¡NECESITO SALIR DE AQUÍ!Me empiezo a impacientar y veo el número de pisos que vamos subiendo, hasta que por fin llegamos al último.Las puertas se abren y ellos salen primero y no mucho después lo hago yo, pero la diferencia es que camino más lento que ellos hasta que entran a una oficina y entonces empiezo a caminar a mi velocidad normal.Entro a mi oficina y apenas dejo mi bolso en mi escritorio cuando alguien llama a la puerta.—Adelante.La puerta se abre y por ella entra Alba con una expresión de molestia.—El señor Cooper te quiere en su oficina ahora —me informa—. N
NICOLÁS COOPER.Veo sorprendido a mi melodía antes de reaccionar.—Mate es la abreviación de soulmate —le revelo—, de donde venimos los chicos y yo a la persona con la que estas dispuesto a pasar el resto de tu vida de manera romántica se le dice mate.—¿De dónde vienen? —cuestiona confundida— ¿De dónde eres?—Soy de un pequeño pueblo a las afueras de Escocia —le revelo por lo cual ella me ve sorprendida—, es tan pequeño que no aparecen en los mapas, pero si existe.—Nunca me hubiera imaginado que fueras de Escocia.—Nadie se lo imagina —le revelo—, es algo que nunca digo al menos que me pregunten.—Aunque ahora que lo pienso tiene sentido —me dice confundiéndome—, cuando nos conocimos, me hablaste en escoces, pensé que lo hablabas perfectamente porque lo habías estudiado, no porque fuera tu idioma natal.—Hay muchas cosas de mi que te sorprenderán —le revelo.—¿Ah, sí? —asiento— ¿Cómo qué?Pienso un poco antes de contestar.—En el pueblo donde crecí, mis padres eran los lideres —me v