Alana estaba nerviosa por la mirada penetrante de Adriano. Lo miró con algo de miedo. No sabia como iba a tomar las exigencias que estaba dispuesta a decirle.
-Si, tengo más exigencias.
-Y se puede saber, ¿Cuáles son?
-Me va escuchar-
-La escucho- dijo Adriano cruzándose de brazos para escucharla. A pesar de ella , era lo que estuvo buscando durante meses, para proponerle matrimonio estaba demostrando ser una arpía igual que todas.
-Se que su principal objetivo al casarse es tener un hijo, pero todavía no estoy preparada para tener uno tan rápido.
-¿Qué no está preparada? ¡Tiene 23 años! ¡Por Dios! Yo creo que si esta preparada para tener un hijo y No creo que la edad sea un problema para uste- le dijo este cínicamente.
-No me estoy refiriendo a cuestiones de edad. Me refiero a que no aceptaré casarme con usted a menos que me prometa que no me forzará a estar con usted si no lo deseo.
La furia se encendió en los ojos azules de Adriano. No podría creer lo que estaba escuchando en aquella diminuta mujer, de por sir mal arreglada, con sus enormes suéter, faldas hasta la rodilla, lentes y zapatillas blanca, para él una mujer sin gusto de las que esta acostumbrado a estar.
-¡Yo JAMÁS HE FORZADO A UNA MUJER EN MI VIDA! Las que han querido estar conmigo a sido por placer y deseo. Pero aquí estamos hablando de matrimonio. Tengo entendido que usted es religiosa. Sabrá lo que significa consumar el matrimonio. ¡Oh me equivoco!.
Alana lo miraba firmemente sintió que le ardían las mejillas y un mechón de su pelo mojado cayó sobre sus ojos. Se apresuro acomodárselos para mirarlo fijamente de nuevo.
-Se perfectamente el significado. También se que existen muchos hombres que no dudan en imponer sus deseos antes que los de la mujer. Sin tener en cuenta lo que esta desea.
Su abuela la había educado a la manera antigua de sus religiones, que debemos ser devotas al hombres, y amas de casa pero ella no deseaba ser así. Deseaba ser escuchada y tener opinión con el hombre que amaba. Si este no la respetaba ni tomaba en cuenta sus deseos para que deseaba seguir a lado de un hombre así.
-No pretenda que me case con usted sabiendo que se negarà ha acostarse conmigo, si mi objetivo es darle un heredero a mi padre.
-No estoy diciendo que eso vaya a ser para siempre. Solo estoy solicitando tiempo para que me de tiempo ha acostumbrarme a usted.
Adriana la miro, seriamente no entendía el porque se estaba negando a tener relaciones inmediatamente.
-No esta pidiendo . Está exigiendo.
Este la miro incredulo porque aún no le cabia en la cabeza lo que esta pequeña diabla estaba tratando de exigirle.
-Bien, ¿Tiene alguna exigencias más?
Alana lo miro.
-Quiero Libertad, para trabajar, no estoy dispuesta a darle explicaciones de lo que haga. Así mismo, deseo terminar mi carrera universitaria de informática. ¿Còmo usted sabrá? No me dará las explicaciones de lo que usted haga. Son las mismas condiciones. Es decir si deseo ejercer mi profesión usted no se opondrá. Y lo más importante si nos separamos yo me quedo con la custodia de mi hijo.
-Bueno haber si lo he entendido- dijo con sarcasmo. Señalandole con sus dedos
1- No permanecerá en el rancho familiar.
2- Podra trabajar si así lo desea.
3-No compartirá mi cama hasta que usted lo desee.
4- Hará lo que le plazca sin que yo pueda abrir mi boca, así no este de acuerdo.
5- Y cinco usted se quedaría con la custodia del niño.
Ella le contesta- Si, eso resume mis exigencias y mis condiciones para casarme con usted.- termino de decir.
-¿Y usted pretende que yo acepte semejante locura?-
-Por supuesto que no, es por eso que mande a mi familia a rechazar su propuesta de matrimonio. Así no tendríamos que seguir discutiendo por lo mismo.
-¿No será que lo que quiere es evitar que nos casemos?
-Bueno, no tengo ningún apuro en casarme. Ni tampoco le veo una ventaja a este matrimonio.
La miro incredulo.
-¿Y el dinero que le puedo ofrecer que?
Alana lo miro furiosa.
-No me interesa, por mas atractivo que sea. Tal vez no podamos comprar joyas y ropas excesivas pero mi familia nos enseño a trabajar por lo que queramos. Aunque mi padre se fue y nos dejo a mis hermanas y a mi hemos salido adelante solas. Si me caso, estoy segura que no podre manejar mis ingresos como yo quiera.
- Entonces, me imagino esta será otra condición más- dijo con ironía.
-¿Qué gran idea?- Dijo sonriendo. Si, es otra de mis condiciones.
-Realmente el hombre que aceptase sus condiciones estaría loco.
-Ve, porque le digo que no puedo casarme con usted.- Es por eso, que se haga a la idea que no me casare nunca. Porque en esta vida no existe el hombre que quiera cumplir mis condiciones.
-Se equivoca. Aquí esta el hombre que acepte sus condiciones. Dijo que se casaría si yo aceptaba sus condiciones. Muy bien acepto. Creo que estoy loco por aceptar pero, esto de acuerdo- sonrio.
Alana lo miro con la boca abierta.
-En serio.
Adriano sonrio.
-¡Por supuesto! La cuestión, mi pequeña diabla- dijo este provocando un sonrojo en Alana pues nadie la había llamado como él. -Es cuanto tiempo estarás dispuesta a mantener tus exigencias una vez que seas mi esposa.
-Pero … de verdad no le importa en como gaste mi dinero?
-Alana, de verdad no sabes ¿Cón quien estas tratando?- le contesto. Me da igual que gastes tu dinero como te plazca. No tengo problema con eso.
-¿Y que hay de mi trabajo?
-Si, quieres trabajar puedes hacerlo.
-Y no me dejará abandonada en el rancho.
-Te llevare donde vaya.
-Bien ¿Y que hay de mi otra condición?
-Si, mi palabra es que no te forzare. Pero creo que debemos poner un limite de tiempo. Después de todo ese es el primordial motivo por el cual me estoy casando. ¿Cuánto tiempo necesitas para acostumbrarte a mi?
Alana incomoda le contesto.
-¿Siete meses?
-Estas loca. ¡Ni sueñes que te dare ese tiempo! Para meterte en mi cama.
-¿Tres meses?
Este negó.
-Dos meses
Adriano afirmo.
-Muy bien, dos meses-¡ Ves que puedo complacerte!.
-Y lo de quedarme con la custodia del niño.
-Eso lo tendremos que ver en el camino.
-No hay discusión. Jamás abandonare a mi hijo como lo hizo mi padre.
-Bien, pero la custodia seria compartida.
-Si llegamos a divorciarnos , que se haga un nuevo acuerdo mutuo. Estaría dispuesto usted de seguirlo a pie de la letra a pesar de todo. -Ella lo miro.
-Este afirmo.
-Pero no entiendo porque desea aceptar mis condiciones.
-Simplemente, pequeña diabla. Lograre lo que deseo de este matrimonio tarde o temprano. Te vere mañana para ultimar detalles de nuestra boda. Que te vaya bien.
Y así se marcho, dejando sorprendida ha la dulce de Alana que aún no podía creer que hubiera aceptado las condiciones que esta puso para casarse con él. Minutos más tarde, Adriano se marcho.
Alana desconcertada, comenzó a caminar hacia la casa de sus abuelos y su hermana deseaba hablar con ella.
Dos horas más tarde Adriano, recién salido del baño en la habitación de su rancho se acerco a la mesa, para llamar a uno de sus mejores amigos. Marco su numero y al primer tono le contestó la llamada
- ¡Hola!- respondío uno de sus amigos
- Hola, Diego.
- Hermano, Pudiste resolver el asunto que tenias pendiente. ¿Cómo ha salido todo? Me extrañaba que no hubieras llamado.
Adriano se amarro la toalla en la cintura para contestarle mejor a su amigo.
-Por supuesto, la pequeña diabla ha resultado un poco * dura* pero todo ha salido bien.
-Me alegro, eso quiere decir que podrás complacer a tu padre. Aunque no deberías involucrar a esa pobre chica en todo esto. Me parece demasiado buena persona para hacerla sufrir.
-Yo pensaba igual, pero luego de escucharla y las condiciones que puso me di cuenta que de tonta no tiene nada.- Salió al patio de la hacienda para ver a sus trabajador trabajando. Estos lo saludaron con respeto. -Ella sabe muy bien lo que quiere y le conviene. Y de tonta no tiene nada.
-Aun así… considero que …
-No puede sufrir cuando no va haber sentimiento alguno, no cuando alguien se casa por dinero como es su caso. Tendrá todo lo que le de la gana.
-Estás seguro.
-Si, y lo sabes bien.
-Bueno… tu sabrás pero no importa lo que te diga no me harás ni puto caso. Así esperemos que todo salga como deseas--- y , ¿dime necesitas un padrino?
-No. No quiero que la prensa se entere de nada, te seguirán. Y después será un problema para mi y ella. Lo que mas deseo es mantener en secreto esta boda, no olvides como ha sido mi vida.
-Por la tranquilidad de tu padre.
-En parte.- dijo este- Se que no he sido un gran hijo pero espero compensarle con un nieto pronto.
-De todas maneras, me alegro de no tener que asistir a esta boda. Portate bien con ella, Adriano. No eres un mal tipo y ella no es Paula.
Adriano sonrio mientras hablaba con su amigo. La vida le cambio desde que se separo de Paula. Jamás pensó ser el cuernudo de Europa por culpa de ella. Siempre creyó que ella lo amaba. Pero lo que mas le dolió fue enterarse que ella había abortado cinco hijos, dos de él y los otros de su amantes en turno. Todo para no arruinar su cuerpo.
¡ M*****a bruja!
-Hermano, -Lo saludo Nick
-Haz escuchado todo.- le dijo.
-Por supuesto, Diego. Tenia el telefono en altavoz. Nick decidío preguntarle a su amigo si estaba seguro de la decisión que estaba tomando, a pesar de todo tenia miedo que saliera lastimado nuevamente por culpa de otra mujer.
-¿Estas seguro de casarte?
-¡Si! Además vere como me divierto con ella.
-No me tomes el pelo. Tu no eres un mal tipo hermano. Estas lleno de rabia por lo que sucedió con tu ex y estoy de acuerdo con Diego. Espero que Alana logre cambiarte. Quizás te enamores de ella.
El semblante de Adriano cambio.
-Eso nunca va a suceder. – dijo entre dientes.
-No sueñen que eso sucederá, amigos. No cometeré el mismo error otra vez. Alana solo será la madre de mi hijo.
-Tan terco como siempre hermano. Haz lo que quieras pero no olvides quien eres- le recordó Nick. Estoy seguro que Alana es la mujer que necesitas en estos momentos. Además necesitas estar casado para ser el de antes.
Adriano sonrio con ironía-
-Estuve casado.
-Con una zorra, no una dama.
-Eso es cierto!- le dijo Diego apoyando a Nick.
-Esta vez, el amor no es una de las condiciones en mi matrimonio, ya me trataron como un pelele. Ahora será baja un matrimonio contractual. Y por favor, ¿Enamorarme? De esa mojigata. Dijo con sarcasmo. No me gustan las mujeres que se visten como abuelas. Y ella no es la excepción.
CAPITULO 4En Madrid mansión Lombardo se encontraba, el señor Adrian padre de Adriano, este reposaba en su habitación acostado, su hijo contrato los servicios de una enfermera privada para que tuviera los cuidados necesarios. Desde que cayó enfermo la relación entre ambos mejoro demasiado. Antes se peleaban entre ellos constantemente, pero todo fue porque no se atrevían hablar sobre sus miedos y el dolor que le causo la ausencia de Libia.La vida fue muy cruel para ambos, porque cambiaron en el camino perdiéndose. Lo bueno es que Dios le dio la oportunidad de corregir esos errores, aunque el dolor siempre iba estar. Este suspiro, su hijo desde que se reconciliaron decidió complacerlo con casarse y tener un nieto. Aunque consideraba que se estaba equivocando por tomar una decisión tan apresurada. Lo amaba demasiado para verlo sufrir de nuevo, y más cuando tuvo que interferir con la ambiciosa de su esposa que lo estaba engañando al punto de tratar de estafar
Mientras Alana pensaba en ¿Cómo cumplir sus objetivos? Lo que mas deseaba era poder cumplir el que más anhelaba ¿ Qué Adriano Lombardo volviera amar? Sera posible que logre conquistar su sueño de amor con él. Pero también desde lo mas profundo de su corazón anhelaba justicia para su hermana muerte. Desde el fondo de su corazón ella, sabia que alguien la había asesinado. El collar era la prueba de ese delito que no se pudo comprobar. Y ella estaba dispuesta a probarlo no le importaba el tiempo que le tomara aquello. Necesitaba llegar al fondo de la verdad. Y para eso era convertirse en la esposa de Adriano Lombardo puesto él estaba cerca, bien o mal de la mujer que pudo traer a su amante en las garras de su hermana. Tenia que enfrentar ese pasado aunque no le gustara.…..Un mes despuésAdriano Lombardo observaba a su nueva esposa. Desde aquél encuentro que tuvieron para acordar su matrimonio, no la busco mas. Puesto él tenia que atender cosas de la empresa en Madrid.
Alana no podía creer lo descarado que era su esposo. Había caído en su trampa sin proponérselo. Adriano miró con intensidad a su mujer y notó la acelerada respiración de su nueva esposa. -Usted…-¿Qué nunca te había besado de esa forma?- dijo sonriendo coquetamente.-Bueno, si.. pero me metió la lengua dentro de la boca.Adriano se echó a reír.-¡Por supuesto! Es un beso - dijo este sarcásticamente.-Pero con lengua…-¡Si!-Yo bueno…. Nunca me habían besado así.-¿Y se puede saber quien no te ha besado de esa manera antes?-Mi casi novio- le contesto.Adriano miró con una ceja alzada a su esposa ..¿Qué idiota no sabía besar bien?Casi novio, es o era.No, bueno solo era un pretendiente.Su esposo bufó enojado del idiota que había besado a su esposa. De pronto vio como su mujer, se puso roja como tomate, de lo apenada. Le pareció linda. También, interesante. Una sonrisa llena de satisfacción lleno su rostro.Adriano volvió a besar a su esposa de nuevo, le encan
Adriano se encontraba furioso, con su esposa. No podía creer lo manipuladora que era. Maldecía haber aceptado sus condiciones. Aun recordaba la discusión que habían tenido.Le presento a todo el personal que estaría atendiéndolos en su luna de miel, sus empleados al parecer congeniaron con ella, los trato con respeto cosa que su antigua ex mujer nunca hizo para ella solo eran para servirla. Si se dio cuenta que su nueva esposa era diferente a Paula; pero eso no le quitaba que se encontrara sumamente molesto y disgustado con ella. Todavía recordaba la discusión que habían tenido hace horas.Cuando entraron a la habitación esta miro que solo había una cama. Y allí empezó todo.-¿Qué te parece? - le preguntó-No- dijo con voz temblorosa puesto que no reparo que tendrían que dormir juntos en esos momentos.-¿Qué? -este alzó una ceja.-No voy a compartir cama contigo en este momento- le dijo.Este trato de mantenerse controlado con su irritable mujer, estaba realmente loca si pen
En la costa, se encontraba Adriano caminando por las playas había decidido salir para despejar la mente en estos momentos no quería ver a su pequeña Diabla. -¿Diga? – contestó su móvil -¿Cómo esta el recién casado?- le pregunto divertido Nick. Aday rodo los ojos de fastidio porque su amigo siempre sabia como ponerlo de cabezas cuando se lo proponía. -Déjate, de joder- Le dijo. No estoy de humor. -Huy por lo que veo la luna de miel, fue un fiasco. – se burlo su amigo. Tuvo mucho que ver aquella mujer que llamas esposa. Adriano se tocó la cabeza fastidiado. -Si supieras con lo que me salió entendieras que estoy muy cabreado. Nick sonrió. – No me digas, no tuviste lo miel. -Nick, no jodas. -Perdón hermano. – dijo este burlándose. Ahora con mas deseo conocer a tu esposita. Sabre lo encantadora que es por haberle negado sexo al gran Adriano Lombardo. -¡Idiota! -Ya en serio, no me digas que el gran Adriano Lombardo- dijo burlándose-No logro consumar su matrimoni
Minutos más tarde, Alana entró al salón en el que su esposo la estaba esperando.-Ya estoy lista- dijo con una sonrisa. Adriano la miró de arriba abajo - Tan mojigata como siempre- pensó.Llevaba una ropa seria y recatada, aunque eso era lo que quería de ella ¿No? Sí, la verdad se caso con ella por eso. No deseaba otra Paula en su vida. Ella seria incapaz de usar sus encantos con él para seducirlo y sobre todo de ponerle los cachos con otros hombres. Pero hay ocasiones en que desearía poder ver más allá. De lo que hay detrás de esa ropa espantosa que usaba su mujer.Algún día lo descubriré- pensó con malicia.-Te ves ..bien- murmuró para halagarla.Alana lo miró con la ceja alzada. No es necesario que me dediques piropos que no van al caso. Y más si son falsos- Nos vamos.Adriano la miro sorprendido.-Desde cuando una mujer rechaza los piropos que le doy- pensó- O está mujer realmente me está afectando.…..Horas después llegaron al complejo hotelero *Lombardo* El vale
Dos semanas mas tarde, fue lo que disfruto Alana de su esposo. Ella pensó que Adriano era un hombre dominante e incluso creyó que se caso con un hombre con problemas de alcohol porque bebía todas las noches en la cena. Hasta ese momento, nada cambio. Visitaba a su familia, compartía con sus abuelos y tia. Mientras; Adriano se iba a trabajar en los hoteles y empresas que tenia en la costa mediterránea. Cada vez se sorprendida de los diferentes negocios que manejaba su esposo, desde conglomerados, a empresas de inversión. Todo con ayuda de sus grandes amigos, que aún no tenia el placer de conocerlos.Mientras, este se dedico a presentarla en todos sus negocios en la costa mediterránea con el fin de acercarse a ella, para que se sintiera cómoda con él.Había disfrutado como nunca de la visita a los hoteles y lugares que su adorado esposo la llevo. A Adriano le divertía sacarme alguna rama que se me enredaba en el cabello cada vez que paseaban por un bosque.Le había p
Alana se encontraba sumamente furiosa que apenas podía poner sus ideas claras. Estaba molesta ,se sentía humillada. Se sentía como una prostituta que Adriano acaba de comprar.¿Y que había de los sentimientos que ella tenia? Por mucho que lo amara no estaba a darle su virginidad de aquella, manera. Tal vez la culpa era de su abuela por inculcarle aquellos valores chapados a la antigua. Otra mujer, estaría contenta con la actitud de su marido pero la verdad era que se encontraba sumamente molesta por la situación. Pero la educación que había recibido era uno de los impedimentos para que ella estuviera íntimamente con su esposo. A pesar de en el fondo estaba decidida a entregarle la mayor parte de su vida a ese hombre. Y entregarse sin reservas.Incapaz de hablar ante la expresión que tenia su marido arrogante, Alana se dio la vuelta y abrió la puerta con violencia, saliendo corriendo por las escaleras. Entró a su habitación tratando de coger aire en sus pulmones se encontraba sum