Mientras Alana pensaba en ¿Cómo cumplir sus objetivos? Lo que mas deseaba era poder cumplir el que más anhelaba ¿ Qué Adriano Lombardo volviera amar? Sera posible que logre conquistar su sueño de amor con él. Pero también desde lo mas profundo de su corazón anhelaba justicia para su hermana muerte.
Desde el fondo de su corazón ella, sabia que alguien la había asesinado. El collar era la prueba de ese delito que no se pudo comprobar. Y ella estaba dispuesta a probarlo no le importaba el tiempo que le tomara aquello. Necesitaba llegar al fondo de la verdad. Y para eso era convertirse en la esposa de Adriano Lombardo puesto él estaba cerca, bien o mal de la mujer que pudo traer a su amante en las garras de su hermana. Tenia que enfrentar ese pasado aunque no le gustara.
…..
Un mes después
Adriano Lombardo observaba a su nueva esposa. Desde aquél encuentro que tuvieron para acordar su matrimonio, no la busco mas. Puesto él tenia que atender cosas de la empresa en Madrid. Desde que converso con su padre que traería a su esposa a la Mansión familiar este le dijo que primero vivieran juntos para conocerse y compartir.
Antes de que la metiera en ese mundo, tan distinto al que ha estado rodeada. Desde la conversación con su padre no ha querido pensar en nada más. Es cierto que no deseaba casarse, pero la fragilidad de la salud de su padre hizo que tomara esta decisión. Sentía que había perdido demasiado tiempo en cosas sin sentido. No pudo ver el dolor de su padre que era él mismo o más que él.
Ahora tenia enfrente a la mujer con la que se casó, no sabía cómo reaccionar ante ella. En realidad no era tan atractiva y como siempre su aspecto dejaba mucho que desear El cabello estaba amarrado en una coleta, que dejaba apenas unos cabellos fuera del moño, ocasionando que su rostro este cubierto. Bajo un poco mas la mirada encontrándose la ropa que estaba usando – No sabia si llorar o reír de lo absurda que se veía. Parecía mas mi abuela que mi mujer. ¿Quizás era por la manera que fue criada?
De todas maneras no me debe importar como este vestida, ella solo me debe servir para un fin. También me sorprendió que no se molestara por la Luna de miel, existen mujeres que solo piensan en eso, se daba cuenta que aún tenia muchas cosas por conocer de su esposa.
Después que la vio interactuar con la gente del pueblo donde estaba su rancho se dio cuenta que esta es querida por la genta, por lo amable y bondadose que es. A pesar de todo habían cosas que le gustaba de su esposa.
La boda fue de lo mas sencilla solo asistió la familia de su esposa y el novio de su hermana, todos estaban contentos por ella. Su familia lo único que le pidió fue que la cuidara y respetara. Se lo prometió a su familia sin saber porque lo hizo.
¿Qué sucede? - le preguntó al verla nerviosa.
No, nada- le contesto.
Me di cuenta que tu pusiste tus exigencias y condiciones a este matrimonio pero yo no hice las mias.
Me imagino cuales son ¡Un heredero y que no te moleste! No es cierto.
No es solo eso.
¿Entónces?
Una de las condiciones es que nunca me mientas. Si los llegas hacer tendrás serios problemas conmigo.
No lo pienso hacer, lo mismo deseo para mi.
¿De acuerdo?
Aunque de todas maneras sabría que me mientes .
¿Cómo?
Este se acerco a ella para sentarla en su regazó, Alana se avergonzó por la manera en que su ahora marido estaba controlándola.
¿Quieres saber porque se como me estas diciendo mentira?
¡Sí!
Simple has estado nerviosa , mueves mucho tus manos y tus ojos te delatan . ¿Qué has estado pensando?
Simple, ¿ Terminaste con tu amante?
Adriano se descoloco por la pregunta de su pequeña diabla, nunca pensó que esta supiera de su amante, ¿La cual fue un grano en el culo porque no quiso romper pensando que ella seria la escogida para madre de sus hijos? La verdad no estaba tan loco para meter otra arpía en su vida, ni otra Paula que trate de engañarlo con el primero que pase. Había aprendido la lección y por nada del mundo cometería la locura de volver a su amante su esposa.
-Olvidate de ella, ya no significa nada- dijo este. Te prometí que no habría mas.
-Espero que cumplas tu palabra.
Adriano se quedo mirando a su esposa le agarró un mechón de su cabello , observándola
Me estas retando- le dijo este.
¿Qué , no puedo hacerlo? - dijo ella mirándolo enojada-
Adriano no sabía porque sintió tanto placer, verla enojada- Este coloco su mano en su mejilla, se dio cuenta de lo suave y tersa que era la piel de su esposa. Se pregunto si así mismo era lo demás. Maldijo por dentro, al darse cuenta de donde lo estaba llevando sus pensamientos. Fue entonces que se dio cuenta de que podía seducir a su esposa a su antojo y lograr lo que deseaba de ella. Quería saber hasta donde podría llegar ella, con un hombre como él.
-En realidad, usted puede llegar a ser un cínico irresistible- dijo ella.
-Tienes una lengua muy afilada.
-Esta equivocado, si usted piensa que puede dominar mis pensamientos y mi manera de ser- se quejó enojada.
-En primer lugar, yo nunca he dicho que no puedes pensar.
-Pues no pareciera, solo quiere que usted dispone y yo obedezca.
-Lo que yo haya hecho antes de casarnos no debe importar en estos momentos, tampoco es que quiera dominar tus pensamientos.
- Creo que nunca vamos a estar de acuerdo en algo, porque usted es el que decide y yo tengo que obedecerlo , No es así.
-¿Digamos pequeña diabla? Sonrio burlamente lleno de sastifación al ver la expresión de su mujer cuando este la agarro de sus caderas para mas arriba de su miembro, esta se iba a quejar cuando sintió algo duro y enorme a través de ella. Esta abrió los ojos.
-Señor, usted Lombardo. . lo señalo con el dedo. Este se lo mordió.
-Esto me recuerda una cosa…. Que de ahora en adelante me llames ¡ADRIANO!
Adriano sintió las firmes nalgas de su esposa presionando contra sus caderas y su miembro no pudo evitar reaccionar ante ella, la volteo he hizo que lo mirará a través de sus ojos esmeraldas y aproximo su cuerpo hacia su pecho quedando la cara a unos metros de él…
¿Qué estás haciendo? Preguntó. Dijiste que no me forzarías.
¡Maldición! Nunca he forzado a una mujer. Sonrió con malicia. Dije que no te forzaría y en eso quedamos pero jamás dijiste que no podía besarte.
Pero….
Adriano la cayó con un apasionado beso, este se dio cuenta que ella no sabía besar. Y por algún motivo, eso le agrado, la mordió suavemente para que abriera la boca para introducir su lenga en ella, devorarla como nadie lo ha hecho antes.
Alana deslizo sus manos hacia el pecho de Adriano sorprendida por el ataque y el placer de sus labios. Esta no sabia que los besos eran hacía, sentía como él dominaba sus labios y boca hasta que la hiciera suya de mil maneras.
Para ella que nunca había sido besada de esa manera tan dominante y tan así. Solo tuvo un novio pero era todo lo contrario ha Adriano. El solo roce de sus labios comenzó lentamente hasta que Adriano se volvió demandante, ella solo pudo sentir la fragancia de masculinidad que brotaba de la piel de su esposo. Perdiéndose en aquellos labios, que le sabían delicioso. Este la obligó abrir más sus labios para que este jugara con su lengua a su antojo. El beso era tan ardiente que sintió que algo le bajaba por sus piernas, haciéndola estremecer de placer.
Adriano alcanzó a sentir la calidez de su esposa y para su sorpresa una llama de deseo ardiente lo inundó. Dandosé cuenta que deseaba mucho mas de su mujer. Era dulce, sabrosa, sabía a canela con miel. No quería separarse de sus labios pero sentía que el aire se les iba.
La soltó, levemente cuando vio su sumisión este decidió volver a profundizar el beso nuevamente. Jamás imagino que aquella mujer que parecía una mojiga, sosa y hasta poco agraciada con un beso había logrado que su miembro la deseara. Sentía que los pantalones en cualquier momento se le rompería, sin poder evitarlo tuvo una erección.
Este profundizo aún mas los besos que se estaba dando con ella, olvidando que tenia una enorme erección que deseaba salir para darle placer a su mujer. Alana se dio cuenta de la erección de su marido y se alarmo, porque no deseaba aquello todavía.
Adriano deseaba mucho más, no resistió saber como eran sus senos. Que eran ocultados por la m*****a ropa que estaba usando. Decidió ingresar su mano hasta sus senos para bajárselos, cuando Alana se dio cuenta de sus intenciones.
-¿¡Basta!- dijo ella…liberándose de él. Usted.
-¿Maldita sea?- pensó irritado.
-Este se rio nuevamente.
-Dijo que no me forzaría.- susurro.
-Pero jamás hablamos de que no podía besarte y mucho menos seducirte.- este la miro cínicamente sonriendo. Así que mi amada esposa. Eso no estaba en las condiciones.
Alana se dio cuenta que había caído en la trampa de su marido, porque era cierto nunca hablaron de los besos o que este pudiera seducirla…dejándola deslocada.
Alana no podía creer lo descarado que era su esposo. Había caído en su trampa sin proponérselo. Adriano miró con intensidad a su mujer y notó la acelerada respiración de su nueva esposa. -Usted…-¿Qué nunca te había besado de esa forma?- dijo sonriendo coquetamente.-Bueno, si.. pero me metió la lengua dentro de la boca.Adriano se echó a reír.-¡Por supuesto! Es un beso - dijo este sarcásticamente.-Pero con lengua…-¡Si!-Yo bueno…. Nunca me habían besado así.-¿Y se puede saber quien no te ha besado de esa manera antes?-Mi casi novio- le contesto.Adriano miró con una ceja alzada a su esposa ..¿Qué idiota no sabía besar bien?Casi novio, es o era.No, bueno solo era un pretendiente.Su esposo bufó enojado del idiota que había besado a su esposa. De pronto vio como su mujer, se puso roja como tomate, de lo apenada. Le pareció linda. También, interesante. Una sonrisa llena de satisfacción lleno su rostro.Adriano volvió a besar a su esposa de nuevo, le encan
Adriano se encontraba furioso, con su esposa. No podía creer lo manipuladora que era. Maldecía haber aceptado sus condiciones. Aun recordaba la discusión que habían tenido.Le presento a todo el personal que estaría atendiéndolos en su luna de miel, sus empleados al parecer congeniaron con ella, los trato con respeto cosa que su antigua ex mujer nunca hizo para ella solo eran para servirla. Si se dio cuenta que su nueva esposa era diferente a Paula; pero eso no le quitaba que se encontrara sumamente molesto y disgustado con ella. Todavía recordaba la discusión que habían tenido hace horas.Cuando entraron a la habitación esta miro que solo había una cama. Y allí empezó todo.-¿Qué te parece? - le preguntó-No- dijo con voz temblorosa puesto que no reparo que tendrían que dormir juntos en esos momentos.-¿Qué? -este alzó una ceja.-No voy a compartir cama contigo en este momento- le dijo.Este trato de mantenerse controlado con su irritable mujer, estaba realmente loca si pen
En la costa, se encontraba Adriano caminando por las playas había decidido salir para despejar la mente en estos momentos no quería ver a su pequeña Diabla. -¿Diga? – contestó su móvil -¿Cómo esta el recién casado?- le pregunto divertido Nick. Aday rodo los ojos de fastidio porque su amigo siempre sabia como ponerlo de cabezas cuando se lo proponía. -Déjate, de joder- Le dijo. No estoy de humor. -Huy por lo que veo la luna de miel, fue un fiasco. – se burlo su amigo. Tuvo mucho que ver aquella mujer que llamas esposa. Adriano se tocó la cabeza fastidiado. -Si supieras con lo que me salió entendieras que estoy muy cabreado. Nick sonrió. – No me digas, no tuviste lo miel. -Nick, no jodas. -Perdón hermano. – dijo este burlándose. Ahora con mas deseo conocer a tu esposita. Sabre lo encantadora que es por haberle negado sexo al gran Adriano Lombardo. -¡Idiota! -Ya en serio, no me digas que el gran Adriano Lombardo- dijo burlándose-No logro consumar su matrimoni
Minutos más tarde, Alana entró al salón en el que su esposo la estaba esperando.-Ya estoy lista- dijo con una sonrisa. Adriano la miró de arriba abajo - Tan mojigata como siempre- pensó.Llevaba una ropa seria y recatada, aunque eso era lo que quería de ella ¿No? Sí, la verdad se caso con ella por eso. No deseaba otra Paula en su vida. Ella seria incapaz de usar sus encantos con él para seducirlo y sobre todo de ponerle los cachos con otros hombres. Pero hay ocasiones en que desearía poder ver más allá. De lo que hay detrás de esa ropa espantosa que usaba su mujer.Algún día lo descubriré- pensó con malicia.-Te ves ..bien- murmuró para halagarla.Alana lo miró con la ceja alzada. No es necesario que me dediques piropos que no van al caso. Y más si son falsos- Nos vamos.Adriano la miro sorprendido.-Desde cuando una mujer rechaza los piropos que le doy- pensó- O está mujer realmente me está afectando.…..Horas después llegaron al complejo hotelero *Lombardo* El vale
Dos semanas mas tarde, fue lo que disfruto Alana de su esposo. Ella pensó que Adriano era un hombre dominante e incluso creyó que se caso con un hombre con problemas de alcohol porque bebía todas las noches en la cena. Hasta ese momento, nada cambio. Visitaba a su familia, compartía con sus abuelos y tia. Mientras; Adriano se iba a trabajar en los hoteles y empresas que tenia en la costa mediterránea. Cada vez se sorprendida de los diferentes negocios que manejaba su esposo, desde conglomerados, a empresas de inversión. Todo con ayuda de sus grandes amigos, que aún no tenia el placer de conocerlos.Mientras, este se dedico a presentarla en todos sus negocios en la costa mediterránea con el fin de acercarse a ella, para que se sintiera cómoda con él.Había disfrutado como nunca de la visita a los hoteles y lugares que su adorado esposo la llevo. A Adriano le divertía sacarme alguna rama que se me enredaba en el cabello cada vez que paseaban por un bosque.Le había p
Alana se encontraba sumamente furiosa que apenas podía poner sus ideas claras. Estaba molesta ,se sentía humillada. Se sentía como una prostituta que Adriano acaba de comprar.¿Y que había de los sentimientos que ella tenia? Por mucho que lo amara no estaba a darle su virginidad de aquella, manera. Tal vez la culpa era de su abuela por inculcarle aquellos valores chapados a la antigua. Otra mujer, estaría contenta con la actitud de su marido pero la verdad era que se encontraba sumamente molesta por la situación. Pero la educación que había recibido era uno de los impedimentos para que ella estuviera íntimamente con su esposo. A pesar de en el fondo estaba decidida a entregarle la mayor parte de su vida a ese hombre. Y entregarse sin reservas.Incapaz de hablar ante la expresión que tenia su marido arrogante, Alana se dio la vuelta y abrió la puerta con violencia, saliendo corriendo por las escaleras. Entró a su habitación tratando de coger aire en sus pulmones se encontraba sum
Alana se levantó rápidamente de la cama sin dejar de observar el magnífico físico de su marido, que dormía plácidamente. Su mente comenzó a trabajar a toda velocidad ¿Qué recordaría su marido al día siguiente? No quería ni imaginarse lo que pasaría si llegaba a enterarse que lo había dormido con un té. Tenía que hacer algo para hacerle creer que al fin había logrado su propósito: Acostarse con ella.Necesitaba una prueba física, algo que le asegure que ella había sido suya esa noche ¿Pero qué?Después de un rato de pensarlo, tuvo una idea. Habían mujeres que sangraban al perder la virginidad. Si Adriano encontraba una mancha de sangre en las sábanas. Estaba segura que no dudaría de que habían pasado la noche juntos.Nerviosa tomo el pulso de su marido y corrió hacia su maletín. Decidió hacer una mezcla rojiza vertiéndolas un poco en el té que sobro. Al cabo de unos segundos, Alana se acerco a la cama y vertió la mezcla . -Perfecto - pensó -Nadie se dará cuenta de nada. ¿Cuánta
Madrid ……Un hombre alto, rubio y musculoso entró en el amplio salón de su caso. Al ver a la mujer que esperaba encontrar en el mullido sofá con un libro en la mano, esbozo una amplia sonrisa y avanzo hacia ella.-Mi vida… dijo en tono de saludo..-¿Qué quieres?- respondió ella secamente.-Adivina quien regreso de su viaje.Aquellas palabras le parecieron interesante a la mujer, que levantó la vista mirando con curiosidad a su amante.-¿Quién?-Tu ex marido. Adriano.Paula cerró el libro que estaba leyendo y se puso de pie.-¿Estás seguro?-Por supuesto, mi reina. Acabo de verlo en el club junto a sus amigos Nick y Diego. Al parecer, según me conto el gerente del club regresó hace un mes.Paula se mordió los labios sonriendo satisfecha. Al fin regreso.-Ahora ya podemos empezar con tu plan.. le dijo besándola. Esta trato de ignorarlo ¡Mi plan!Al recordar que le había dicho al tonto, acerca que de que deseaba vengarse de Adriano por haberla dejado en la casi miseria. El idiota