El tráfico de la ciudad estaba terrible, pertenecer a una familia tan despiadada cómo la familia Altamirano era un la cruz para Alina, su carácter y bondad había sido heredados por sus padres, desafortunadamente los dos habían muerto en un trágico accidente de tránsito cuando ella era apenas una niñaJefe, la señorita Altamirano de dirige a la compañía Fernández, estamos esperando sus órdenesDorían entrecerró su verde y enfadada mirada. - asegúrate de que no llegue. - su órden fue tajanteDe pronto las vialidades que llevaban a la ciudad empresarial, dónde se encontraban diferentes compañías de alto nivel, fueron cerradas, no hubo manera para Alina, poder llegar a hablar con Rodrigo, después de estar demasiado tiempo en el tráfico, le pidió al chófer que la llevara al edificio esmeralda¿Estás seguro que aquí es dónde Alina vive, Aníbal?. - el Ceo le preguntaba a su asistente, el edificio esmeralda tenía buena pinta, pero para un hombre tan rico como lo era él, parecía un huevo de pi
— El silencio inundó el apartamento, los guardaespaldas que aguardaban afuera recibieron instrucciones del asistente Aníbal, continúen con su trabajo, deben terminar lo más pronto posible con el encargo del señor Montana— Después que terminó de tomar a la hermosa diseñadora, Dorian terminaba de abrochar los botones de las mangas de su camisa, la elegancia de ese aterrador hombre era extraordinaria, verlo tan cerca era como ver a el monstruo del lago ness, casi nadie podía — Dorían, es hora que te vayas de mi casa y te lleves a tus hombres, no me gusta que invadan mi privacidad — Alina, seguía en la cama cubriendo con una suave sábana blanca su cuerpo desnudo— La joven diseñadora tenía los labios pálidos, parecía que Dorian, le había quitado de ellos la sangre cómo si fuera un vampiro, sus hermosos ojos morados y sonrojadas mejillas, tenían al hombre complacido— Iré a una junta de negocios, mis hombres se quedarán a terminar mis órdenes, tú solo descansa, no te has recuperado del to
— La situación de la familia Altamirano, se estaba complicando demasiado, cada vez quedaban menos pretextos que darle a viejo amo, Pedro Altamirano, sobre la situación de la empresa, para Adam, era demasiado vergonzoso confesarle que la había perdido— Alina, todavía seguía preocupada por la salud de su abuelo, había estado tratando de alejar a Dorian pero no había tenido suerte con eso, el Ceo la seguía viendo como su mujer, había adaptado su departamento a su gusto, ahora era tres veces más amplio, tenía muebles nuevos y colores neutros— Esa noche, el millonario hombre llegó al edificio esmeralda en su maserati y sus habituales hombres de negro que siempre lo seguían, subió al piso de la joven diseñadora a quien encontró leyendo en su habitación— ¡Levántate y cambiate, iremos a una cena! — Dorian vestía un elegante traje azul oscuro, parecía ser un príncipe azul, ese que toda chica sueña con tener, pero que en realidad era un aterrador tirano y controlador— No estoy de ánimos para
— Después de haber echado a las dos mujeres Altamirano, el banquete siguió de la manera normal, Dorian, apartó a Alina, a una mesa, él la observaba fijamente, mientras que la bella mujer se sentía nerviosa— Entonces, ¿no puedo quitarte los ojos de encima ni un solo momento? de lo contrario ya tienes a dos mujeres encima tratando de echarte del banquete — el hombre preguntó con seriedad— Yo no empecé la discusión, fueron ellas las que trataron de enlodar mi nombre — Alina, se defendió, tal como lo hacía siempre de él— Hmmm... ya veo, gatita, solo conmigo te gusta ser como un erizo, pero con los demás eres demasiado tolerante, ¿qué no debería ser al revés? — No sé de qué hablas, pero te agradezco de todas formas lo que hiciste por mi — Alina sintió que su corazón se conmovió por como Dorian, la defendió hace un momento— No quiero que me agradezcas, quiero que me des algo más práctico — entonces el hombre levantó el rostro de Alina con dos de sus dedos y la besó, el beso fue suave a
La forma en la que ahora Rodrigo Fernández, odiaba a Alina, era solamente comparado a lo que la amo, ella era ese ángel que él había estado buscando, le había prometido casarse con ella cuando regresará de Inglaterra, pero no sabía que ella aprovechaba su ausencia saliendo con otros hombres y se burlaba de su amor, ahora estaba comprometido con Sofía y era a ella a la que iba a dar su apellido— ¿Por qué no puedo venir aquí? ¿acaso eres el dueño? — Alina, no estaba dispuesta a dejarse humillar por su antiguo amor— Aquí solo viene la gente decente, la forma en la que hiciste tratos con Dorian Montana, no creo que haya sido la más... honorable — Rodrigo fue, mordazmente sarcástico— ¿Eso que tiene que ver contigo? te recuerdo que tú y yo no somos nada, no tengo por qué darte explicaciones de lo que hago, ¿mejor di por qué a pesar de ser el prometido de mi prima Sofía, no has ayudado a la familia Altamirano a solucionar las cosas de la empresa? ¿así es como demuestras que la amas? — Ali
Sofía Altamirano, no pudo evitar sentirse nerviosa por la pregunta de Rodrigo, si algún día llegará a descubrir su engaño y que gracias a sus intrigas perdió el amor de Alina, sería mejor que se escondiera en el pozo más recondito de la tierra , por qué él la asesinaríaLos autos se dirigieron al edificio Esmeralda, ahí los guardaespaldas bajaron a Alina cómo si la llevarán prisionera y no la soltaron hasta llegar a su apartamento, el Ceo, se encontraba esperándola en la sala de estar, se le veía realmente molesto— Señor, la señorita Alina ya está aquí, la diseñadora fue arrojada a Dorian, ella cayó en la alfombra — el guardaespaldas avisó a su jefe y salió de inmediato — ¡Escucha bien Alina, si te atreves a ponerte de rodillas frente a Rodrigo Fernández, yo mismo te cortaré las piernas! Dorian no bromeaba con sus palabras , él realmente lo haría, esa mujercita no iba a ofender su honor, él es el Ceo más importante del mundo, su riqueza era incalculable, no iba a permitir que su gati
Rodrigo Fernández, estaba convencido que Alina lo había estado engañando mientras estudiaba en el extranjero, eso le destrozó el corazón, pero se recuperó y ahora estaba comprometido con Sofía Altamirano, la joven señorita de la familia Altamirano— Si bien era cierto que por el momento la empresa de los Altamirano, marchaba mal, confiaba en que se compondrán las cosas— Por la tarde, una de las sirvientas de la mansión Altamirano, llamó a Alina, angustiada, su abuelo se había puesto mal de salud, la criada sabía que no le iban a avisar pero ella sabía lo que Alina quería a su abuelo, así que decidió llamarla para que fuera a verlo— Alina, se vistió de prisa y bajó de su apartamento para tomar el Uber que había pedido, — ¡lléveme a esta dirección pronto, por favor! su angustia era mucha, su abuelo era la única persona de su familia que la quería, él quería verla bien, estaba segura que no sabía de todas las maldades que su prima Sofía y su madre le hacían— Cuando la bella diseñadora
El joven amo Fernández, se quedó viendo como los coches que estaban al servicio del CEO Dorían Monta, desaparecían con Alina, en su pecho sintió un dolor agudo, él ahora despreciaba a Alina por haberlo engañado, deseaba hacer feliz a Sofía, más ahora que estaba embarazada, pero la sombra del recuerdo de Alina, lo perseguía— En la mansión Tigre Azul, los coches negros llegaban, Dorian los esperaba en la entrada, el chófer abrió la puerta del auto para que su señor pudiera revisar a la señorita Alina — Vamos de prisa al hospital, — Dorian no perdió más el tiempo, apenas tocó a la mujer inconciente, supo que ardía en fiebre, — ¿Por qué estás así, Alina? ¿Es por qué Rodrigo Fernández, va a tener un hijo con tu prima? — el Ceo, llevaba su furia guardada en su interior, deseaba que la mujer estuviera despierta para reclamarle y darle un castigo, pero ella seguía inconciente— En la sala VIP del hospital, los mejores médicos atendían a la bella diseñadora, pero además de la fiebre, no enco