Eliester, cortó la llamada con el poderoso mafioso Castrioli, él había seguido viendo de vez en cuando a Alondra, no la había perdido de vista, y le había reiterado que estaba muy interesado en ella, y que iba a conseguir el permiso para ser novios tarde o temprano — ¿Qué fué? ¿qué fué lo que te dijo Nathaniel? — Lenin, preguntaba a su hijo — ¡El señor Castrioli, me va a recibir, incluso dijo que su esposa ordenará una cena especial, que me veía a las ocho! ¡Carajo, Papá, creo que lo voy a conseguir, pueda que ya me dé el permiso para ser novio de Alondra! — No tendría por qué ser diferente, tienes todo lo que se necesita para ser un digno yerno de un Castrioli — El padre estaba orgulloso de su hijo — Bueno, iré a terminar un encargo que me dejó Darriel, antes de marcharse a la luna de miel, te veo más tarde, papá — el jóven mafioso, salió de la mansión de su padre, Dylan, bajaba las escaleras y abrazó a su esposo — Ruso, ¿qué pasa? te ves muy sonriente — Nathaniel Cast
En unas hermosas playas de México, Lucien llevaba un coco para su hermosa esposa, ella estaba de antojos y el cumplía cada uno de los que ella le pedía — ¿Está cómoda, amor? — Dary, estaba sentada en una camilla para sol, cerca de una fresca alberca, ella acariciaba su vientre — Estamos muy bien, ven siéntate aquí a mi lado, ¿puedes ponerme un poco de bloqueador en la espalda? — Todo lo que desees, cariño, seré todo tuyo en esta luna de miel, ya que regresando a casa volveré al trabajo, y tú vas a reposar el embarazo en casa — Vamos, cariño, solo estoy embarazada, no estoy enferma, puedo trabajar y hacer muchas otras cosas — Preferiría saber que estás a salvo en nuestra casa, yo tengo que ocuparme de una compañía a nivel mundial junto con mi padre, a veces me pierdo en esas tediosas e interminables juntas o reuniones con socios, necesito saberte a salvo para poderme concentrar en el trabajo — Que sobreprotector resultó ser, señor Black, ven aquí, dame muchos besos, qu
Atenea fue despertando de a poco, se removía en la amplia cama de la lujosa habitación — ahh... ¿Dónde estoy? — la chica volteaba para todas partes hasta que lo vió, Nathanael, estaba sentado en el sofá para una persona, él seguía vestido de traje, más en la parte del torso solo tenía la camisa blanca y el chaleco del mismo color que el pantalón, ya no llevaba el saco, él tenía las piernas elegantemente cruzadas y bebía de un vaso de whisky — Por fin despiertas, estás en mi casa, y está es mi habitación, en la mesa de noche hay comida, es un hecho que no te has alimentado bien por días, eso no le va bien a tu organismo — No tengo apetito, siento haberte dado tantas molestias, iré a casa, ya has hecho suficiente por mí — Si te vas ahora corres el riesgo de que tu padre llegue y se desquite contigo por haber sido echado de la organización, ¿quieres darle la facilidad de que te dé una paliza? si eres tan estúpida puedes irte, no te detendré Atenea, se quedó pensando un po
Habían pasado dos meses, Evelyn había vuelto a casa, ella había encontrado un trabajo en una escuela donde daba clases de prevención sexual, o de situaciones de riesgo a adolescentes, jóvenes que muchas veces se exponían demasiado al querer vivir muy rápido Atenea, recogía unos libros y los guardaba en su bolso para salir y tomar el bus, estaba un poco más tranquila, solo que se seguía olvidando de comer la mayoría de las veces, al salir de la escuela una figura imponente y perfectamente vestida la estaba esperando — Nathanael, ¿qué haces aquí? — Es el cumpleaños de mi madre, ella me pidió que te invitara — Oh, que amable, pero... me avisaste de último momento, no le compré un obsequio, disculpame con ella, tengo que llegar a casa a preparar la clase de mañana, que la pasen bien en el festejo — Atenea, estaba encaminando sus pasos hacia la parada del bus, dejando al apuesto mafioso parada afuera de su lujoso y costoso coche — Alto ahí, mujercita, deje de hacer cosas impo
El joven mafioso, se pasó la mano por el cabello — Atenea, ya hicimos el amor, te visito de vez en cuando y te envío flores, nos acabamos de enterar de que estás embarazada, ¿qué más necesitas para sentir que estamos en una relación? — ¿Qué...? ¿están esperando un bebé? ¿co... cómo? Nathanael, ¿está es tu forma de darnos la noticia? Nathaniel, tu hijo no conoce la palabra tacto, si no le ha pedido a Atenea, que sean novios, ¿cómo carajos piensa que ella debe sentirse en una relación? ¿qué no le enseñaste nada de como se trata a una mujer? — Angela, estaba muy molesta con su hijo — Si, estoy embarazada, el médico me lo confirmó en el hospital, pero yo quería ir a casa a descansar, tengo mucho en que pensar, tengo un trabajo en una secundaria, pero solo son unas horas, voy a buscar otro trabajo para que no le falte nada al bebé, pero... el Boss, me obligó a venir con él, dijo que si no lo obedecía me iba a quitar a mi hijo — Atenea, dejaba salir lágrimas que rodaban por sus mej
En la casa de Atenea, ella se puso ropa cómoda, una pijama de shorts corto, calcetas a los muslos y una coleta, ella estaba preparando su clase para el día siguiente para sus estudiantes, cuando la guerra se escuchó La chica fue a abrir, más hizo un gesto de desagrado cuando vió allí a Nathanael — ¿Tan mal recibido soy? ¿qué te hice para que me desprecies así? — Nada, pero no quiero ser parte de ese mundo tan violento al que perteneces, quiero una vida tranquila, Boss — Querida, eso lo debiste haber pensado antes de hacer el amor conmigo y quedarte embarazada de mi hijo, soy parte del mundo de la mafia, eso ha sido por generaciones en mi familia, pero eso no me convierte en un monstruo, también tengo derecho de tener una familia, tengo derecho de amar y ser amado, déjame cuidar de ti, está vez lo voy a hacer mucho mejor, di que sí, Atenea, anda, no me tengas aquí en la puerta — Cuando nazca el bebé, puedes visitarlo, no tenemos por qué forzar las cosas... — ¿Forzarlas?
El tiempo pasó, los jóvenes matrimonios comenzaron a tener a sus bebés, Daniela, había roto fuentes en casa, el CEO, corría de un lado a otro de la habitación, mientras se pasaba las manos por el cabello — ¡Lucien, para que me estás poniendo más nerviosa, el bebé ya viene, toma la maleta y vamos al hospital! — Tranquila, cariño, todo va a salir bien, apresuremos antes de que nos nazca el bebé aquí, yo no sé nada de partos — ¿Ah, pero que tal de finanzas? ¡debiste haber estudiado para ser médico, así no estaría aquí sin saber que hacer! Los esposos se pusieron en camino, más Dary, en su dolor por las contracciones, comenzó a sentir que algo que le salía, ella estaba muy asustada — ¡¿Qué te pasa cariño?! — ¡Detén el auto, Lucien, siento algo ahí abajo, revisame! — ¡¿Qué!? no, no, aguanta un poco más, ya estamos cerca, no puedo detenerme ahora, Daniela — ¡No voy a llegar, detente, y baja a revisarme, por dios, por dios, esto no puede... no puedes nacer aquí, bebé, no
La ambulancia llegó y con mucho cuidado trasladaron a la madre y al bebé, la sangre de esos dos niños era muy fuerte, habían decidido nacer en el momento que quisieron fué una sorpresa para los Black y para los Diamantis, ver llegar también a Darriel con Angie y el bebé, solo los pudieron ver un momento, debían pasarlos con urgencia al ala de maternidad — ¡Cariño, aquí estamos tu madre y yo, lo hiciste muy bien, diste a luz al bebé! — Papá, que rápido llegaste — Angie, abrazó a su padre de la cintura y lloró, — Es un bebé, muy hermoso, papá, tu nieto... — Por supuesto princesa, ahora ve a qué te atiendan, te veré más tarde, te amamos — Los paramédicos siguieron su camino con la madre y el niño, Angélica, se abrazó a su esposo, ella lloraba de emoción, sus dos nietos habían llegado al mundo por fin — Señores Black, ¿qué hacen aquí? ¿quién les avisó de...? Lucien, nos avisó que Daniela había dado a luz al bebé, por lo visto estos niños son muy obstinados, el de ellos le