Capítulo 24

Lucía

—Ven, ven aquí —digo con la voz temblorosa y en segundos está caminando hacia la cama. Sube y su enorme cuerpo hunde el colchón. El leve movimiento de las olas es casi imperceptible, apenas puedo recordar que estoy en un yate. David se detiene justo frente a mí y toma mi mano con sus dos manos. Dejo caer mi cuerpo en reposo y él solo me mira espantado. 

—Ven aquí —mirándome detenidamente se recuesta pero alejado de mi—. Acércate a mí. 

—No puedo —muerdo mi labio y me siento terrible, debo de lucir espantosa. 

—Lo siento, debo de lucir horrible —trato de sentarme de nuevo cuando él me detiene. 

Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP