Él
Pasar el tiempo al lado de Lucía es perfecto, hacer el amor al dormir y al despertar han saciado mi ansiedad por completo y ni siquiera he tenido que recurrir a algún tipo de medicamento para conciliar el sueño. Es como si fuera una clase de milagro, y lo creería si no fuera por la persona que soy.
Por primera vez en mucho tiempo puedo disfrutar de ese tiempo, de una visita en la isla sin necesidad de pensar en qué tal vez alguien pudiera estar irrumpiendo nuestros asuntos. No significa que me haya olvidado de mis deberes pero sí que estos días han servido demasiado para aterrizar esta nueva versión de mí.
Lucía ha convivido mucho más con mi madre y hermana, las discusiones han cesado y c
LucíaHe interrumpido una reunión en el despacho de David y me he apresurado a volver a la habitación. No quise ser grosera, no quise interrumpirlos, no quería haber escuchado lo que escuché, en realidad no era mi asunto, para nada, pero me he entrometido…—Ojalá aprendieras a tocar puertas —digo para mi misma mientras me dejo caer en la cómoda silla de palma que está en la terraza que da para esa bonita piscina natural que tenemos en la habitación. Pienso en David volando cabezas si no lo obedeces y la verdad es que la pinta la tiene, pero me es imposible imaginarlo, no después de como todo ha mejorado.Escucho discusiones en el piso de abajo, es Carmina quien grita y no es necesario esforzarse demasiado para escuchar lo que dice. Est&aa
LucíaMe remuevo lentamente del abrazo de David, miro por la ventana y ya ha oscurecido o es que está a punto de caer una gran tormenta. Me pongo de pie y camino hacia la terraza donde está la que se convirtió en mi piscina favorita, me siento en la orilla completamente desnuda y el sentimiento de ser completamente primitiva me invade, algo así como Jane de Tarzan.Siento el agua fresca en la planta de mis pies, tomo una gran bocanada de aire y mis pulmones se sienten vivos. Este lugar es muy privado y relajante, hasta llegar al punto de preguntarse cuán necesario es que todos alguna vez se pierdan para volver a encontrarse.Corre un aire húmedo que me estremece, cierro los ojos y percibo un ligero ruido, como de pisadas, así que me giro en dirección a donde está
ÉlNo sé en que momento es que he perdido la consciencia, pero he escuchado a Lucía gritar. Me apresuro a ponerme de pie, huele a pólvora, hace calor…—¡David! —grita Enzo pero luego dejo de escucharlos y vuelvo a caer al suelo, no siento que tenga fuerza en las piernas, vuelvo a ponerme de pie.—¿Dónde está Lucía? —pregunto al ponerme de pie y siento la sangre escurrir en mi rostro, llevo la mano a la frente y en efecto, tengo una herida, luego miro mis piernas y noto que estoy desnudo. Enzo me toma del brazo y me coloca un batón para cubrirme—. ¿Dónde está Lucía?
LucíaNo sé muy bien el número de días que he pasado en este lugar. Después del transporte en el lujoso yate me han cubierto la cara y atado de pies y manos.Viajé en auto, no sé por cuánto tiempo porque al final he caído dormida hasta que algunos tirones me han hecho despertar.El olor que percibí era vegetación y mucha, escuché bastantes pájaros pero nada de brisa marina. Al final me han traído a esta habitación que parece la de un hotel, se han ocupado de mi alimentación y de que me haya duchado.Las heridas en mis pies han sanado sin problema, es por eso que creo que han pasado ya más de dos semanas. No se me permite acercarme al balcón y las 24 h
ÉlNo he dormido en días, me han sedado dos veces porque he estado a punto de matar a varias personas de mi equipo. Por fin he logrado dar con el paradero de Lucía, he ingresado a un par de personas de mi equipo para poder saber si ella está bien. Todo ha salido de acuerdo al plan, sin embargo he luchado por no perder la cabeza y traerla conmigo ahora mismo.Recibo diariamente su imagen, la he visto llorar y estar acostada hecha un ovillo por días, quisiera abrazarla, quisiera tenerla conmigo ahora mismo, pero he tenido que ser inteligente para poder acabar con toda esa familia y no correr más peligro.—Mi madre está bastante intranquila —dice Enzo y yo bufo&
LucíaSiguen sin permitirme ver el reloj o la luz del sol, cada día y cada noche me parecen la misma cosa, ni siquiera sé en que mes estoy. Me siento perdida, creo que han pasado dos semanas desde que el doctor me ha sacado sangre y luego nada, no me han notificado de los resultados y tampoco me han dicho que esté enferma. Pero mi salud no ha mejorado.Los mareos y las náuseas no me dan tregua y el sueño no se me acaba… todo mi cuerpo indica que estoy… he comenzado a pensar que tal vez esté embarazada… Ese pensamiento no me ha dejado, sin embargo siento que no sería lo mejor, ya que representa un poder más para esa gente y tal vez un disgusto para David. Para mí representa miedo, porque no solo debo de ver por mí ahora.Me recues
ÉlLa vi, la tuve tan cerca y no la pude retener… esos hombres se la han llevado de nuevo y todo lo hice como estaba planeado, salvo por el arresto de Alonzo…—Estamos rastreando a esos idiotas, están a punto de llegar a tierra —dice Ron, mi encargado de sistemas.—No he podido dormir, han pasado 12 horas desde que vi por última vez a Lucía, estoy ansioso, la necesito conmigo —miro la pantalla, está parpadeando el localizador y en una media hora deberían de estar llegando al lugar. Quiero recuperarla y quiero volarle la cabeza a esos tipos.Los minutos me parecen horas, cierro los ojos y veo a Luc
LucíaSegún el conteo que llevo en la palmera han pasado 12 días desde que esos hombres me han abandonado en este lugar. Por un momento siento que todo está yendo bien, en realidad, me agrada la idea de estar en este lugar sin alguien que me esté vigilando todo el tiempo, sin embargo está el asunto de que no hay absolutamente nada que me pueda mantener con vida por más tiempo, la comida se me ha terminado hace 2 días y mi barriga cruje a cada instante, he encontrado algunas frutas pero no parece ser suficiente para el bebé. Estoy bastante asustada porque no quiero perderlo, es lo único que tengo de David, y con esto me siento más que unida a él.Camino por el habitual sendero hasta llegar a la laguna de agua dulce donde he acudido a bañarme diariamente. Me deshago de mi pijama de sat&iac