La casa sobre los fresnos
Sierra de Aitana
Lara respiró hondo y se dejó caer hacia atrás en la cama, donde Dominic la esperaba para acunarla entre su torso y sus brazos desnudos. Por el abrupto despertar que había tenido, podía adivinar que el resultado de la conversación sostenida con Moyra a través de Evelett no era tranquilizador. Aun así Lara estaba viva, estaba con él y ya era suya, eso era todo lo que en aquel momento podía importarle.
Lidiar con la disyuntiva personal de traicionar o no al hombre que lo había hecho quien era en el mundo de la noche, descubrir que no todo lo que le habían contado desde su nacimiento era cierto, ya había representado una lucha interna que jamás había esperado tener que librar. Sin embargo, y a pesar de toda su incursión en aquella contienda, la única razó
La Casa de la NocheMarsella_ ¿Cuánto, por otra hora de vida? _ La burla en el acento de Ius era tan marcada que solo arrancó una sonrisa de desprecio del torturado átero_ Te la daré a cambio de que me digas qué son esas marcas que les han salido en los rostros.Ahora, como antes, los rectores de las castas seguían manteniendo aquella superioridad innata que le hacía hervir la sangre en las venas. No importaba su sacrificio por las Razas, no importaba cuántas veces hubiera arriesgado su inmortalidad por ellas o que hubiera perdido sus colmillos en batalla. Al final, la veneración y el respeto que Ius esperaba del resto de las criaturas de la noche, no los había conseguido en quinientos años._ Nada, Craig. _ murmuró Lú _ Nuestra vida no vale nada en comparación con lo que nuestro silencio
Frontera de Mónaco con FranciaCerca del marLlegaron, uno tras otro, con los rostros marcados y confusos, a postrarse ante la Madre. En el improvisado nuevo campamento solo estaban Lara, los sorian, los primeros oficiales stark y la anciana regente, todos nerviosos y agobiados por el peso de la responsabilidad que había caído sobre sus hombros.Hasta hacía unos días, la confrontación no pasaba de ser el mismo conflicto entre craig y stark, extendido durante quinientos años; pero en sólo unas horas Ius había hecho de participación obligada al resto de las Razas, y ningún runier, átero, mantri o nihil permitiría los asesinatos de sus líderes sin hacer algo al respecto.El conflicto había trascendido ya a todas las castas, y tal vez era el momento de preguntarse si lo que tanto habían anhelado los star
La Casa de la NocheMarsella Cuando el camión de FedEx dejó el paquete fuera de la verja de entrada, casi a dos kilómetros de la casa, Ius pensó en cualquier tipo de arma, bomba o amenaza, pero jamás en una carta firmada de puño y letra de la Madre. Larga y en extremo liviana, la caja sólo contenía una hoja de papel y la mirilla de una de las armas modificadas de los sorian.“Nadie más tiene que pagar por nuestros errores. Terminemos esto hoy, solo tú y yo. Si logras matarme las Razas de la Noche no discutirán tu supremacía.”Lara SandersAl pie de la nota estaban escritas unas coordenadas hacia las que Ius dirigió la mira con actitud de particular incredulidad. A unos doce kilómetros, en medio de un claro de bosque, la inconfundible, altiva y pelirroja cabellera de la muchacha a la que por dos veces hab&iac
_ ¡Llévatelo!Stefano pareció quedar petrificado ante la orden tajante de la Madre, sin tener idea de si debía o siquiera podía obedecerla de alguna manera._ ¡Llévatelo, ahora! _ volvió a gritarle Lara con voz estentórea _ ¡Sácalo de aquí o se hará matar! ¡Y de paso hará que nos maten a todos!Hacía apenas diez minutos que habían logrado entrar en los calabozos, y el hallazgo había sido horrendo. Nanybell se había llevado las heridas menos graves, de modo que Emily se hizo cargo al instante de abrir el paso a los antiguos subterráneos con una explosión concentrada. Las familias se adentraron con rapidez en los laberintos, pero la detonación puso sobre aviso a los soldados, y en contados momentos una avalancha de craig se les vino encima.Grum cargó con el cuerpo lacerado de Lú, que apenas resp
Campamento starkRegión de Kocevje. EsloveniaEvelett observó alucinada, durante un largo rato, las siluetas que se elevaban danzantes contra las luces y las sombras proyectadas por la diminuta hoguera. El campamento stark era un hervidero de criaturas de la noche de todas las castas, que iban y venían de tienda en tienda, haciendo lo posible por acomodar a los cautivos que habían sido rescatados.Para huir del alboroto los dos niños habían ido a refugiarse al lugar donde mayor tiempo pasaban en los últimos días. El espacio lleno de árboles entrelazados y oscura maleza que servía a los jóvenes stark en sus entrenamientos se hallaba vacío a aquella hora, y la pequeña se había aferrado a la mano de Scott, dejándose guiar hasta un apartado recodo.Los juegos de luces y sombras los habían hecho reí
Golfo de TriesteEsloveniaEl silencio circundante apenas cubría la furiosa respiración que se escapaba de cada uno de los presentes en la ceremonia. Tal como dictaban las antiguas tradiciones de las Razas de la Noche, las exequias de un rector de las castas debían durar tres días y tres noches, y en la tercera madrugada las cenizas humeantes del anciano Larou habían sido entregadas al mar en la ensenada más cercana.Henryk apenas había logrado controlarse durante el duelo, y el pueblo átero se había sumido en un estado de profunda desesperación. La presencia segura del Portugués, y la certeza de que su pueblo lo necesitaba y por ello no podía permitirse derrumbarse, era lo único que había mantenido al joven heredero con la compostura necesaria.Lejos de las familias stark, lejos de cualquier lugar de refugio de l
_ Déjame ayudarte.Lara no se sorprendió cuando el pulso seguro de Dominic la retuvo de la parte posterior de la cazadora para ayudarla a soltar las correas del chaleco. Le sacó la coraza frontal y la dejó a un lado, besando su nuca con suavidad y cerrando sus brazos alrededor de ella para abrazarla._ ¿No te parece que estás sola, muy lejos del campamento, cuando me prometiste que no harías nada imprudente? _ la regañó _ ¿O será que ya no puedo confiar en ti?_ Necesitaba bañarme. _ se disculpó ella _ Además, no está tan lejos como para que no puedan escuchar mis gritos ._ ¡Lara, Lara! Este arroyo está helado. ¡Vas a congelar ese hermoso… tierno… perfecto… delicioso cuerpecito de dieciocho años!_ Diecinueve. Cumplo diecinueve hoy.El Comandante la hizo dar vuelta, mudo de sor
La Casa de la NocheMarsellaSiena bajó los ojos celebrando no ser, por esta ocasión, el objeto de la mirada iracunda con la que el regente fulminaba a cada uno de los jefes de escuadrón presentes en la sala. Por tercera vez en una semana la seguridad de la mansión de la noche había sido violada, y en quinientos años nunca habían sufrido derrotas tan seguidas y aplastantes como aquellas.Casi parecía una invitación al mundo de la noche, una prueba de que eran capaces de hacer su voluntad a pesar de las disposiciones del regente de las Razas._ Señor, no tengo forma de justificar este atraco… _ intentó decir la Primera Oficial cuando Ius concluyó la reprimenda a sus altos mandos, pero un gesto suyo la interrumpió._ ¡Tú no tienes nada que justificar, Siena, estabas fuera de servicio! Adem&